Medellín
Edificio Space: diez años de una tragedia que todavía no se resuelve
Hace diez años se desplomó la lujosa unidad residencial en el barrio El Poblado de la capital de Antioquia.
El edificio Space cayó con efecto dominó el 12 de octubre de 2013 en Medellín. Primero colapsó la torre seis y, después, se desplomó por completo. En medio de la emergencia, murieron doce personas y más de cien familias tuvieron pérdidas millonarias.
La lujosa unidad residencial se convirtió en polvo y, tras diez años, los propietarios de los apartamentos siguen viviendo un calvario para tratar de recuperar los ahorros que invirtieron. Muchos han fallecido esperando justicia, mientras que otros ya perdieron la fe.
Si bien el año pasado el Tribunal Administrativo de Antioquia condenó en segunda instancia a la administración distrital, a la constructora Lérida CDO, a la aseguradora y a los curadores urbanos de la época a pagar más de $30 mil millones, todavía no se cumple.
Allí se señaló que el municipio debe indemnizar a 102 familias que habitaron el conjunto por omisiones en la vigilancia y control de la obra. Luego de una acción de tutela, el Consejo de Estado aclaró que la entidad tiene la obligación de responder por el 25 % de la multa.
Lo más leído
Aunque ya pasaron 13 meses desde esta orden, los afectados no han recibido la plata. La administración respondió que la sentencia no se ha podido ejecutar porque los demandantes solicitaron un esclarecimiento sobre la providencia.
“El distrito está a la espera de la notificación oficial de la decisión para darle cumplimiento a lo ordenado a las familias del caso Space. Además, adelanta la solicitud de revisión eventual de la sentencia ante el Consejo de Estado”, manifestó la Alcaldía.
Así fue la emergencia
Todo empezó el viernes 11 de octubre. Una llamada entró a la línea de emergencias 123 de la capital de Antioquia, donde un habitante describió que en su vivienda aparecieron amplias grietas, luego de que un fuerte temblor sacudiera a su residencia. Ese día solo se movió el piso en ese sector de la ciudad y se debió a las fallas estructurales del inmueble.
De inmediato, se activó la comisión especial del Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo para atender la alerta emitida desde Space. Hasta ese punto llegó el entonces director encargado de esta dependencia, Jaime Enrique Gómez Zapata, quien confirmó la delicada condición del edificio que amenazaba con desprenderse.
“Hicimos un recorrido donde vimos todas las afectaciones y grietas en todo el edificio. La verdad, se veía y se sentía raro el edificio. En ese momento, le dijimos a toda la gente que habitaba la torre seis que lo mejor era evacuar. Ellos salieron y la constructora fue la encargada de atender la situación de ellos”, afirmó el funcionario.
Pero un mensaje no fue acatado por la empresa que edificó la unidad residencial. Los organismos de socorro le pidieron no intervenir las afectaciones hasta que se conociera un informe detallado de las condiciones reales en las que se encontraba la infraestructura a razón de que, visiblemente, la caída podía ocurrir en cualquier instante. Así fue.
Horas después, colapsaron los apartamentos del edificio número seis. Doce personas quedaron atrapadas. La búsqueda se extendió por 16 días. Las familias de los desaparecidos se instalaron a un pie de la tragedia para seguir, en primer plano, la valerosa tarea de los socorristas con el fin de encontrar buenas noticias bajo los escombros.
Infortunadamente, no hubo sobrevivientes. El incidente les cobró la vida a Juan Esteban Cantor, Jaime Botero, Juan Carlos Botero, Andrés Ricardo Castañeda, James Andrés Arango Pulgarín, Wbeimar Contreras, Iván Darío González Álvarez, Diego Hernández Ceballos, Álvaro José Bolívar, Luis Alfonso Marín, Albeiro Alcaraz y Jesús Colorado.
Cuando salió la primera víctima mortal, se ordenó el desalojo del resto de las unidades, dado que el material que cayó afectó la estabilidad de las demás torres. Con el paso de los meses, la Alcaldía de Medellín pidió la implosión controlada del resto de Space. Ese procedimiento se cumplió en dos etapas: el 27 de febrero y el 23 de septiembre de 2014.
Más tarde, los organismos judiciales confirmaron las causas de la emergencia: deficiencias en la edificación. En la lista de responsables aparecieron los constructores que se declararon en quiebra para asumir los costos de las responsabilidades, también el curador urbano, que dio el aval para la obra, y a la Alcaldía de Medellín, por no mitigar los riesgos.