Antioquia

EPM reportó ingresos por $ 23,6 billones en el tercer trimestre de 2022

A septiembre, EPM ha transferido al Distrito de Medellín $ 1,6 billones

27 de octubre de 2022
EMPRESAS PÚBLICAS DE MEDELLÍN EPM - MEDELLÍN
Edificio de Empresas Públicas de Medellín | Foto: DIEGO ANDRES ZULUAGA

Empresas Públicas de Medellín anunció que pese a los impactos de la economía mundial que ha elevado indicadores como la inflación, el índice de precios al productor y la tasa de cambio, han implicado mayores ingresos e incrementos en los costos y gastos de la compañía.

Esta situación ha llevado a la implementación de una clara política de optimización y austeridad que ha permitido generar un Ebitda de $ 7,3 billones durante lo corrido del año, con un margen del 31 %. Así las cosas, El Grupo EPM obtuvo $ 23,6 billones de ingresos, de los cuales EPM matriz aportó $ 9,8 billones, correspondiente al 41 %. Por su parte, las filiales del exterior aportaron el 28 % y las filiales nacionales de energía y aguas el 31 %. De estos ingresos, el 67 % corresponde a Distribución de Energía y el 17 % a Generación de Energía 1.

El Ebitda del Grupo EPM alcanzó los $ 7,3 billones, de los cuales $ 4,2 billones fueron aportados por EPM, correspondiente al 58 %, con un margen del 43 %, las filiales nacionales de Energía y Aguas el 24 %, y las filiales del exterior el 18 %. El segmento Distribución aportó el 50 %, Generación el 27 %, Transmisión el 4 %, Gas el 3 %, Provisión Aguas el 10 % y Gestión Aguas Residuales y Residuos Sólidos el 6 %. El margen Ebitda fue del 31 %.

Excedentes

EPM matriz sigue siendo motor de desarrollo para el Distrito de Medellín, es así como del total de excedentes a transferir por $1,8 billones durante el año, ya ha transferido $ 1,6 billones. Estos recursos son vitales para los programas sociales y de bienestar de los medellinenses. El Grupo EPM frente al entorno volátil de la economía internacional, revisa permanentemente todas las variables que puedan afectar los resultados financieros y mantiene políticas de eficiencia en costos y optimización de recursos, buscando la sostenibilidad y garantizando la prestación de los servicios públicos domiciliarios con altos estándares de calidad y oportunidad a la comunidad.

EPM espera encender dos turbinas de Hidroituango antes del 30 de noviembre

Empresas Públicas de Medellín (EPM) le salió al paso a la incertidumbre que hay en torno al proyecto de Hidroituango, al anunciar este miércoles que las dos primeras turbinas de generación de energía podrían entrar en operación antes del 30 de noviembre de este año.

La desarrolladora de la hidroeléctrica explicó que las dos unidades están instaladas completamente y solo falta ponerlas a rodar con el agua que cae del embalse en medio de unas pruebas técnicas que se ejecutarán en las próximas semanas.

Con base en los resultados del experimento, se podría anunciar una fecha para el encendido. Solo se ampliaría el cronograma, retrasando la inauguración de la obra, en dado caso de que los efectos de los exámenes sean negativos para la seguridad del proyecto.

El gerente general de EPM, Jorge Andrés Carrillo, definió que a las dos turbinas no les falta un bulto de cemento ni un tornillo para entrar en funcionamiento. Pero requieren garantizar que la estabilidad de la infraestructura no se vea afectada con las rotaciones.

“Hoy podemos anunciar que hemos culminado y están listas las obras civiles y montajes de las unidades de generación de energía número uno y número dos de Hidroituango. Esto es una buena noticia para los antioqueños y el país”, dijo el funcionario.

Frente a este escenario, la compañía de servicios públicos estaría en la capacidad de cumplir a tiempo con los acuerdos que alcanzó con la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg). El 30 de noviembre deben estar operando las dos primeras turbinas.

La amenaza de las multas billonarias se estaría esfumando. Si se incumplen los pactos, la empresa tendría que cubrir obligaciones superiores a los 1.160 millones de dólares. En esa cuenta de cobro también estarían las faltas por no cumplir con los negocios alcanzados en las subastas de energía.