“Es necesaria la presencia del presidente”: personeros de Antioquia piden que Gustavo Petro participe en mesas de diálogos por paro minero

A través de un extenso comunicado, la Asociación de personerías de Antioquia pidió que el presidente de la República, Gustavo Petro, participe en las mesas de diálogos que se está desarrollando por cuenta del paro minero. Las protestas iniciaron desde el pasado jueves, 2 de marzo, en las subregiones del Bajo Cauca y nordeste antioqueño.

La solicitud toma lugar luego de la fallida reunión entre representantes del Comité del paro minero de Zaragoza, Cáceres, Tarazá y Caucasia y algunos funcionarios del Gobierno Nacional, entre ellos: la viceministra del Ministerio del Interior, Lilia Solano, el viceministro general del Ministerio del Interior, la vicepresidenta del Ministerio de Minas, Johanna Rocha y el director de Recursos Hídricos, Fabián Caicedo.

“Al momento de emitir este comunicado se conoce del fracaso de las negociaciones que se venían realizando entre mineros y Gobierno Nacional. Situación que nos preocupa demasiado, por lo tanto, se hace un llamado al Gobierno nacional a analizar y definir solución a las problemáticas y reivindicaciones de los mineros. Es necesaria la presencia del presidente de la República en la mesa de diálogo”, se lee en el escrito.

“Se invita a la gobernación de Antioquía a ejercer una posición real de mediación, que cree un puente entre comunidad y Gobierno nacional que conlleven a una solución inmediata a articular con las Personerías municipales somos quienes promovemos, divulgamos y defendemos derechos humanos. No tiene sentido sentarse con todos menos con quienes tenemos interlocución con los pobladores”, dice el comunicado.

En el mismo documento manifiestan lo siguiente: “exhortamos a los líderes del paro minero a mantener el norte de la protesta de manera pacífica y procurar un diálogo constructivo entre gobierno y manifestantes que reconozca las iniciativas de estos para tratar de fondo y con objetividad las problemáticas latentes en el sector minero”.

¿Por qué protestan?

Los mineros pretenden que la Fuerza Pública cese las operaciones contra la extracción ilícita de yacimientos, actividad que ha devorado parte de las montañas de esas subregiones y contaminado los afluentes que por allí corren, según la Gobernación.

Ante la firme posición de las autoridades frente a sus pedidos, varios sectores han tomado acciones irregularidades para llamar la atención. El cierre de las carreteras solo es una parte de los estragos que han padecido los habitantes. De hecho, hay algunas dificultades en materia de movilidad, sobre todo para llegar a la Costa Atlántica por la Troncal de Occidente.

Quienes requieran desplazarse hacia esa zona del país que incluye los departamentos de Córdoba, Sucre y Bolívar, la opción que tienen en este momento es utilizar la carretera Medellín - Arboletes, es decir, por la zona del Urabá de Antioquia.

Adicionalmente, la vía Medellín - Puerto Berrío, es la que se tiene habilitada para las personas que necesiten llegar al Cesar, Magdalena y La Guajira porque esta alternativa vial los conecta directamente con la Ruta del Sol.

Aunque en la región se han habilitado corredores humanitarios, existe temor entre la población por un posible desabastecimiento, teniendo en cuenta que el paro minero se programó de manera indefinida y se han levantado sus líderes en algunas oportunidades de la mesa de diálogos.

En cuanto al último reporte entregado por las autoridades, se confirmó por parte del Ejército Nacional que los bloqueos están concentrados en la Troncal de Occidente, en la jurisdicción de Antioquia, en algunas zonas se las localidades de Tarazá, Cáceres y Caucasia.

Indican que algunos municipios presentan escasez de alimento y que la misión médica ha tenido que enfrentarse a desafíos para atender a los pacientes, por los obstáculos como grandes árboles que fueron atravesados en la vía.

Las dificultades para la población también se registran en localidades como Caucasia, que deja tres personas heridas, entre ellas un menor de edad, quien está recibiendo atención médica en un hospital.