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Esta es la increíble razón por la que se fugó alias Pichi, el Pablo Escobar de Bucaramanga
SEMANA conoció detalles exclusivos del expediente de alias Pichi, el narcotraficante más poderoso de Santander que fue recapturado esta semana.
El 10 de octubre la Policía Nacional categorizó a Óscar Camargo Ríos como uno de sus principales objetivos: el Pablo Escobar de Bucaramanga, conocido con el alias de Pichi, se fugó de un apartamento del barrio El Poblado de Medellín, donde estaba pagando una condena de 90 meses por concierto para delinquir. SEMANA conoció las razones de su escape, según fuentes consultadas por la institución.
Los detectives establecieron que el poderoso narcotraficante tomó la decisión de burlar la seguridad del Inpec cuando recibió una llamada telefónica de un abogado, quien le contó que un juez lo volvería a enviar a prisión por el escándalo que generó su liberación; la opinión pública criticó ampliamente que un sujeto con ese prontuario de peligrosidad estuviera en la calle como “Pedro por su casa”.
Al parecer, eso no fue lo que le generó angustia a alias Pichi. Los investigadores recibieron elementos que darían cuentan que el mismo informante le comunicó que él sería extraditado por el Gobierno de Gustavo Petro. En ese momento, el delincuente armó un plan improvisado para perderse del mapa y volver a vivir en la clandestinidad, como lo hizo en dos oportunidades en la última década.
“No fue una fuga preparada. Pichi se llena de temor, dice que él no quiere irse para el exterior y por eso toma la decisión de fugarse. ¿Cómo se fuga? Con las personas que estaba en ese momento en su casa”, detalló uno de los integrantes de la Dirección de Investigación Criminal. Lo favorecieron una novia, un barbero, un escolta y el hermano de una de sus compañeras sentimentales.
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Ellos agarraron una camioneta blanca, un carro gris y una motocicleta para salir del barrio El Poblado y llegar hasta el norte del Valle de Aburrá. “La camioneta blanca iba haciendo la avanzada de la ruta, el vehículo gris iba en el medio, que era donde iba Pichi, y la moto iba cerrando la fuga”, dijo uno de los funcionarios que analizó las 54 cámaras de video que registraron sus movimientos.
Uno de los rostros que fue captado en esas imágenes fue el de alias Pacheco, un exintegrante de las Fuerzas Militares que figura como el representante legal de una empresa de seguridad. Antes de su detención, respondió en SEMANA que era un instructor y descartó su responsabilidad en la desaparición de un grupo de mercenarios colombianos en México, en la cual salpican a su compañía.
Ellos se escondieron en una vivienda del municipio de Bello y luego pasaron a seis fincas del municipio de Copacabana. Alias Pichi era consciente de que Santander no era un lugar seguro para él por los enemigos que tiene en ese departamento. La estabilidad fue Medellín, donde tenía el espaldarazo de los cabecillas de las estructuras criminales con los que tenía pactos y conoció en la cárcel de Itagüí.
Óscar Camargo Ríos fue detenido el pasado 9 de diciembre en una milimétrica operación de la Policía Nacional y fue recluido en la prisión de Cómbita, en Boyocá, donde el Inpec tendrá la misión de desconectarlo del crimen. Junto a él fue detenido alias Rolex, su mano derecha y quien se perfilaba como el segundo al mando en dado caso de que ocurriera algo con el líder mayor.