Antioquia
Este fue el ataque del Clan del Golfo que rompió el cese al fuego
El ataque ocurrió en el departamento de Antioquia contra la población civil y un grupo de militares.
Aunque las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) niegan su participación en los hechos de violencia que se presentan en Antioquia en el marco del paro minero, el Ministerio de Defensa tiene información certera para responsabilizarlos de los últimos ataques que sufrió la población civil y la fuerza pública en el Bajo Cauca y nordeste.
El incidente que colapsó la paciencia del Gobierno nacional ocurrió en la tarde de este domingo 19 de marzo en la carretera que comunica a la ciudad de Medellín con la costa Atlántica, en el tramo que de Tarazá lleva a Puerto Valdivia.
Allí, sujetos desconocidos ordenaron frenar el tránsito de los automotores, hicieron bajar a los pasajeros y luego prendieron fuego.
Los carros quedaron envueltos en llamas. Cuando las unidades militares trataron de hacerles contrapeso a los delincuentes que protagonizaron este hecho, fueron recibidos con disparos. Al parecer, las balas llegaron de fusiles que tienen el sello del Clan del Golfo. Minutos más tarde, la alteración del orden público fue controlada por las autoridades.
No hubo personas heridas, pero tampoco capturas. Esta emergencia impulsó al presidente Gustavo Petro a tumbar el decreto que formalizaba el cese al fuego de hostilidades con el grupo que comandó alias Otoniel como un gesto de voluntad de paz. Con este panorama, la fuerza pública tiene la obligación de adelantar operaciones contra los delincuentes.
El director general de la Policía Nacional, general Henry Armando Sanabria Cely, dijo que son dos las estructuras que están detrás del caos que hoy viven las poblaciones del Bajo Cauca y el nordeste antioqueño, pero también el sur de Córdoba. Al menos 300 mil personas se han visto afectadas con el terror que ha impuesto el Clan del Golfo.
Se trata de la unidad de Jorge Iván Arboleda Garcés que tiene como único líder a alias Marcos y el grupo Uldar Cardona Rueda, bajo el mando de José Miguel Demoya Hernández, conocido con el alias de Chirimoya. Ambos se mueven entre los municipios de Remedio, Zaragoza, Caucasia, Nechí, El Bagre, Ayapel, Montelíbano y Planeta Rica.
Ante estos señalamientos, en un supuesto comunicado firmado por la organización ilegal, se desestimó la información expuesta por el Ministerio de Defensa. Sus integrantes dieron cuenta de que el ELN sería el grupo que está ordenando la afectación al orden público, utilizando su nombre para afectar el proceso de paz que adelanta con el Gobierno nacional.
Pero los datos de inteligencia son precisos: “Existe suficiente evidencia para afirmar que el Clan del Golfo es el autor directo de la violencia desatada hoy en Tarazá y que es el responsable del hambre que sufre la población del Bajo Cauca, a la que además ha sometido a presiones y amenazas. No tenemos ninguna duda”, agregó el Ministerio.
Frente a este escenario, las tropas están en alerta máxima para contrarrestar los hechos terroristas que podrían cometer las Autodefensas Gaitanistas de Colombia. En esa zona de Antioquia se desplegó a más de diez mil efectivos para proteger la seguridad de los habitantes, quienes están atemorizados por la respuesta de los delincuentes.
Ahora bien, la Secretaría de Seguridad y Justicia de Antioquia informó que, de momento, no hay un acto administrativo que restringa la movilidad en la subregión para prevenir afectaciones a la población civil. Sin embargo, la Policía Nacional recibió la alerta máxima con el propósito de reforzar los sistemas de vigilancia ante actos terroristas de las AGC.
Así lo confirmó el director de la institución, general Henry Sanabria: “La Policía entra en máxima alerta en alistamiento de primer grado, particularmente en aquellas zonas donde tiene presencia y actúa en contra de estos grupos armados. Particularmente, las AGC. Los policías tienen la consigna de protegerse y garantizar a la comunidad su seguridad”.