ANTIOQUIA
Hombre estuvo secuestrado ocho meses, tras desmovilizarse del ELN
Los integrantes de la subestructura de Jorge Iván Garcés lo tuvieron en cautiverio en las montañas del nordeste antioqueño.
El Clan del Golfo tuvo durante ocho meses secuestrado a un hombre que se enfiló en el Ejército de Liberación Nacional (ELN) en la subregión del nordeste antioqueño. Si bien la víctima dejó las armas antes del hecho, los delincuentes lo retuvieron de manera ilegal en la zona rural del municipio de Remedios. El Ejército lo liberó en las últimas horas.
Este sujeto estaba sometido al cuidado de tres personas en la vereda Martaná de esta población, de acuerdo con la información suministrada por las unidades de inteligencia de la fuerza pública en Antioquia. Los delincuentes serían miembros activos de la subestructura armada denominada como Jorge Iván Arboleda Garcés de las AGC.
Una operación militar terminó con el sufrimiento del desmovilizado. A él le quitaron los elementos que lo tenían privado de la libertad, mientras que los ilegales fueron capturados. Entre los señalados de protagonizar este delito, se encuentra alias Jaime. Él es nombrado por las autoridades como el supuesto cabecilla de este brazo armado.
Ese hombre llevaría cinco años dentro de la organización ilegal y, presuntamente, tendría a cargo la operación entre los municipios de Remedios y Segovia, localidades que hoy están en alerta por las confrontaciones del Clan del Golfo y el ELN por el control territorial. Los organismos de derechos humanos advierten sobre violaciones a las comunidades.
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“Delinquía en las veredas Martaná, Juanbra, Salado, Santa Sucia, Otú, del municipio de Remedios; y en las veredas Quebradona, Río Bagre, El Aporreado y Campo Alegre, en jurisdicción del municipio de Segovia, Antioquia”, detalló el comandante de la Décima Cuarta Brigada del Ejército Nacional, coronel Manuel Enrique González Díaz.
Varias investigaciones que se adelantan en la Fiscalía General de la Nación relacionan a este supuesto cabecilla con delitos que han ensangrentado las montañas de estas poblaciones en los últimos meses. El sindicado, por ejemplo, de haber participado en el asesinato de líderes sociales, cobros extorsivos, proselitismo armado y tráfico de drogas.
En medio del operativo que se llevó a cabo en Remedios, las autoridades pudieron incautar dos armas de fuego que estarían siendo utilizadas para ejecutar los crímenes. También se encontraron una serie de explosivos, municiones de diferentes calibres, dos proveedores, dos radios de comunicaciones y cinco equipos de telefonía celular.
Ahora bien, los detenidos fueron puestos a disposición de las autoridades competentes para iniciar el proceso de judicialización por las faltas que habrían cometido recientemente bajo el nombre de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), como también se hacen llamar los integrantes del Clan del Golfo.
“El Ejército Nacional continuará su ofensiva en el nordeste antioqueño para neutralizar todo accionar delictivo que afecte la seguridad y tranquilidad de la población”, concluyó el comandante de la Décima Cuarta Brigada, adscrita a la Séptima División. Las unidades de este grupo tienen que batallar con un sinnúmero de vulneraciones de los ilegales.
En ese sector la Defensoría del Pueblo ha identificado la instrumentalización de personas de parte de los actores armados con los que buscan hacerse contrapeso en la lucha por el control territorial. El narcotráfico y la minería son los activos que los mantienen en constantes combates, en la lista también aparecen las disidencias de las Farc.
“Existe un alto riesgo de violaciones a los derechos humanos contra líderes y lideresas sociales, firmantes del Acuerdo de Paz y sus familias y defensores de derechos humanos. También hemos encontrado el incremento homicidios, reclutamiento forzado en contra de niñas, niños y adolescentes y enfrentamientos en los que la población civil queda en medio”, afirmó el titular de esta entidad del Ministerio Público, Carlos Camargo.
Mientras que la Gobernación de Antioquia pidió, para mejorar las condiciones de seguridad, aumentar el pie de fuerza y fortalecer los procesos de investigación con el fin de prevenir el cometido de las acciones violentas en esta subregión que reporta un alza considerable en el número de muertes violentas durante este 2022.