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Intoxicación masiva en el búnker de la Fiscalía de Medellín; esto es lo que se sabe
Los detenidos habrían ingerido frijoles y pollo en mal estado.
Al menos 15 reclusos del búnker de la Fiscalía de Medellín, ubicado en el barrio Caribe, se habrían intoxicado por ingerir alimentos en mal estado. La situación sanitaria se habría presentado el martes, 4 de abril, sobre la 1:30 p. m.
De acuerdo con Jorge Alberto Carmona Vélez, Defensor de Derechos Humanos de la población privada de la libertad de Antioquia, 15 de los 38 detenidos en las celdas de paso de los calabozos de la Ley 600 del CTI de la Fiscalía, habrían ingerido frijoles y pollo, alimentos que estaban descompuestos.
“La situación sigue siendo delicada, ya que en estas mismas celdas de paso del CTI se presentó hace un par de días un intento de homicidio, al parecer, un detenido con problemas psiquiátricos, quien inicialmente intentó ahorcarse y no lo logró gracias a los mismos compañeros de celda”, aseguró Carmona.
Supuestamente, posterior a ese intento de suicidio, el detenido habría tomado la decisión de mezclar un promedio de 50 pastillas distintas, y luego las habría ingerido.
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“Por ello, tuvo que ser trasladado a un centro hospitalario de emergencia el día de hoy (miércoles, 5 de abril). Se encuentra recibiendo atención hospitalaria bajo vigilancia y custodia permanente de funcionarios de la Fiscalía General de la Nación”, agregó el Defensor.
Asimismo, se habrían trasladado a algunos privados de la libertad de la Estación de Policía Laureles en Medellín, por posible intento de fuga.
“Esas situaciones están generando a los custodios de la Policía Nacional y a los custodios del CTI de la Fiscalía General de la Nación, una gran preocupación qué se está trasformando en cansancio, estrés laboral y posibles enfermedades psicosociales por estar realizando una labor que si se mirara con lupa, se podría evidenciar que no es responsabilidad de la Policía Nacional y mucho menos del del CTI, vigilar y custodiar personas privadas de la libertad”, señaló Carmona Vélez.
Manifestó que el desbordado hacinamiento carcelario en las estaciones de Policía de Medellín y Uris, lleva una trayectoria de al menos diez años sin ver soluciones. “El hacinamiento, la pésima alimentación, la falta de atención inmediata en salud y la falta de aplicación a los subrogados penales son los grandes protagonistas”, anotó.
Denunció que mientras todo esto ocurre, en la cárcel nacional Bellavista hace más de un año inauguraron el pabellón número 2 que tiene una capacidad para 440 personas, “y supuestamente no lo han entregado por la supuesta falta de unas cámaras de seguridad”, precisó Carmona.
Cabe recordar que en la cárcel El Pedregal de la ciudad de Medellín, también se presentó un caso de intoxicación masiva.
Al menos veinte reclusos se vieron perjudicados. La situación sanitaria obligó a realizar una visita por parte de la Personería al complejo penitenciario.
“La Personería Distrital de Medellín acompañó la verificación en el Coped el Pedregal luego de que se registrara una presunta intoxicación de la Población Privada de la Libertad”, aseguró esta entidad.
Las primeras versiones apuntan a que los reclusos se intoxicaron tras haber comido chorizos que no estaban aptos para el consumo humano.
“Estuvimos verificando las instalaciones del rancho y allí pudimos evidenciar la existencia de las contramuestras, las cuales deberán ser analizadas por el área de vigilancia y control de la Secretaría de Salud”, dijo Mateo Gómez López, personero delegado del área penal, familia y convivencia de la Personería de Medellín.
Los resultados de estas pruebas permitirán determinar la causa real de la intoxicación masiva en la cárcel El Pedregal.
A finales del año pasado, Jorge Carmona, defensor de la población carcelaria en Antioquia, señaló que en la cárcel El Pedregal se conoció un video en el que se evidencia carne no apta para el consumo, pues al parecer era de caballo e, incluso, traía pelos del animal.
De acuerdo con el defensor, los privados de la libertad también han recibido carne de gato y de rata, debido a que han encontrado cráneos de este roedor en las comidas.