Antioquia
La extraña desaparición de once toneladas de explosivos en Uramita, Antioquia
Las autoridades activaron un plan de búsqueda urgente para dar con el paradero del material que fue hurtado.
En el departamento de Antioquia se encendieron las alarmas por el hurto de once mil kilos de explosivos que estaban a cargo de una empresa extranjera en el municipio de Uramita, población ubicada en el occidente.
Las autoridades buscan por cielo y tierra el material que podría estar en las manos de las organizaciones delincuenciales que operan en esta región del país. Se sospecha del Clan del Golfo.
La denuncia fue interpuesta por la compañía china Chec que está enfilada en la concesión Autopistas Urabá S. A. S. y que encabeza la construcción del proyecto Autopista Mar Dos, entre las subregiones del occidente y el Urabá.
En una de las bodegas estaban guardados los elementos que estarían siendo utilizados en las obras. En el inventario quedó en evidencia que se trataría de 11.900 kilos de emulsión en barra y doce mil estopines.
Hombres fuertemente armados llegaron hasta las instalaciones que la compañía tiene activas desde el 2018 en el municipio de Uramita. Si bien se contaba con agentes de seguridad, el personal fue encañonado por los delincuentes.
El comandante de la Séptima División del Ejército Nacional, general Óscar Leonel Murillo Díaz, detalló que los sujetos que tomaron el material explosivo aprovecharon la oscuridad de la noche para cometer la falta.
“El evento ocurrió en la madrugada del sábado. La empresa que construye la vía al mar tenía unos explosivos que se emplean para ese tipo de actividades ahí guardadas. Al parecer, la gente armada intimidó a los vigilantes”, dijo el oficial.
Todavía no hay pistas de las personas responsables de este hecho. Los principales sospechosos son los integrantes de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), como también se hace llamar el grupo que comandó alias Otoniel.
En el sitio donde se reportó la emergencia se tiene presente la injerencia de la subestructura armada de Edwin Román Velásquez, brazo ilegal que atemoriza a los habitantes del occidente antioqueño con extorsiones, homicidios y secuestros.
Las investigaciones del caso fueron asumidas por las unidades especiales de la Séptima División del Ejército Nacional y el Departamento de Policía Antioquia, quienes confían en entregar prontamente los resultados operacionales.
Este miércoles, dos de noviembre, se tiene programado un consejo de seguridad para evaluar la situación y las pistas que tienen las autoridades sobre la mesa con el fin de dar con la ubicación de las personas que tienen la carga de explosivos.
“Policía y Ejército continuamos con las operaciones en el sitio, a ver qué hacemos para lograr con el paradero de los sujetos y poder recuperar ese material”, concluyó el general Óscar Leonel Murillo Díaz, quien lidera el trabajo en Antioquia.
Paralelamente, se intensificarán las labores de búsqueda en las zonas donde se estaría moviendo el material que podría ser utilizado contra los miembros de la Fuerza Pública o las comunidades que están sometidas al deseo de los ilegales.
La lupa está puesta sobre los municipios de la subregión del occidente del departamento, a razón de que es el corredor preferido por las organizaciones delincuenciales para mover este tipo de elementos, justificados en el terreno selvático.
Se espera que en las próximas horas se intensifique la búsqueda de las once toneladas de explosivos a lo largo y ancho de Antioquia, también en las regiones limítrofes para frenar la expansión de los ilegales que amordazaron a los vigilantes.
También se espera un comunicado oficial por parte de la compañía china donde se dé cuenta de los hechos que desataron la emergencia con la que hoy maniobran los uniformados para dar con los explosivos.