Antioquia
Lamentable: niño de un año murió por maltrato en La Estrella, Antioquia; capturaron a su padrastro
De acuerdo con el dictamen del Instituto de Medicina Legal, el menor presentó hematomas en diferentes partes de su cuerpo, fractura en un brazo y su muerte se habría producido por asfixia.
En la tarde de este miércoles, las autoridades capturaron a Deivy Alejandro Parra como el presunto responsable del homicidio de Liam Alexander Londoño Rojas, de un año. Estos lamentables hechos sucedieron entre la noche del pasado domingo y la mañana del lunes en el corregimiento La Tablaza, del municipio de La Estrella.
De acuerdo con el dictamen del Instituto de Medicina Legal, el menor presentó hematomas en diferentes partes de su cuerpo, fractura en un brazo y su muerte se habría producido por asfixia. De acuerdo con la información preliminar, este hombre, padrastro del pequeño, había quedado a cargo del niño mientras la mamá trabajaba. Pero, al momento de llegar del trabajo, lo encontró muerto.
“Manifestamos nuestra solidaridad con sus familiares y allegados por este hecho que enluta a todo el territorio siderense, y nos vinculamos con la familia para brindar todo nuestro apoyo institucional. Rechazamos todo acto de violencia contra los niños, niñas y adolescentes. Además, reiteramos nuestro compromiso con la niñez, trabajando día a día para que no sean víctimas de ningún tipo de conflicto, ni violencia”, sostuvo el alcalde de La Estrella, Juan Sebastián Abad.
En este momento se adelanta la audiencia de control de garantías, donde posiblemente le imputarán cargos por el delito de homicidio agravado y determinar si es enviado a un centro carcelario. Cabe recordar que, inicialmente, el padrastro había manifestado que el menor se había caído de la cama y posteriormente se había quedado sin signos vitales, pero las pruebas confirmaron que sí había sido asesinado.
Tendencias
Comunicado a la opinión pública, frente a los hechos ocurridos el pasado 23 de octubre.
Posted by Alcaldía de La Estrella on Wednesday, October 26, 2022
Caso Maximiliano
Maximiliano Tabares Caro fue reportado como desaparecido el pasado 21 de septiembre en el municipio de Remedios, Antioquia. Su madre dijo que se perdió cuando lo envió a una tienda, pero la Fiscalía presume que se esfumó en medio de un supuesto acto satánico.
La familia de este menor de seis años habría protagonizado este crimen bajo la sombrilla de Los Carneros, un grupo liderado por el padrastro del niño que recurriría a torturas para recibir señales espirituales que lo llevaran a encontrar guacas en la región.
El ente de acusación sospecha que Tabares Caro habría sido sometido a uno de estos rituales con el fin de ubicar en las montañas de la región elementos valiosos. Seis personas son señaladas como presuntas responsables, pero se declararon inocentes.
Los elementos de prueba indican que ‘Los Carneros’ estarían involucrados en actos violentos y desmedidos contra otro señalado integrante del grupo a quien, presuntamente, le propinaron quemaduras, y lesiones en los genitales y distintas partes del cuerpo. En los procedimientos se incautaron siete celulares; además de un muñeco, libros y objetos usados para prácticas de santería.
El relato de un exintegrante de la supuesta secta satánica de Los Carneros es la pieza clave que tienen las autoridades para esclarecer la desaparición de Maximiliano Tabares Caro, el niño de seis años que se perdió en el municipio de Remedios. La Fiscalía señala a la agrupación como la presunta responsable. Entre las personas acusadas está su madre.
El principal testigo se unió al grupo en 2021. Ingresó por invitación del padrastro de la víctima. Él le describió que la tribu tenía como objetivo principal encontrar guacas en la región. Es decir, tesoros escondidos bajo la tierra para hallar piezas valoradas en los mercados. Sin embargo, se retiró en el camino por la crueldad de los encuentros.
Alcanzó a vivir en carne propia los sacrificios que hacían para encontrar las señales que les enviaban supuestos espíritus con el fin de ir a los puntos exactos donde estaba el oro. Esa tarea estaría siendo obstaculizada por el hijo de una de las integrantes y compañera sentimental del sujeto que llevaba la batuta en la secta, Maximiliano Tabares Caro.