No paran los casos de quemados en experimentos; esta vez les pasó a dos estudiantes en Angelópolis, Antioquia

Dos estudiantes de la Institución Educativa San José, del municipio de Angelópolis (Antioquia), resultaron con quemaduras de primero y segundo grado, mientras eran espectadores de un experimento de la feria de ciencia y tecnología del colegio.

Los hechos ocurrieron cuando los estudiantes realizaban una ronda por los estands de los compañeros y en uno de ellos estaban manipulando alcohol. De un momento a otro se incendió el trabajo académico e impactó con las llamas a los estudiantes, quienes por las graves quemaduras fueron trasladados al hospital local La Misericordia.

María Alejandra Ospina, enfermera del Hospital La Misericordia, contó que uno de los jóvenes de 14 años está esperando que sea remitido a Medellín, porque requiere cirugía general por la gravedad de las heridas y el otro estudiante ya fue dado de alta con recomendaciones de cuidado y reposo en casa.

“Está bajo observación médica, mientras sale el proceso de remisión para Medellín, fue el que más sufrió. Los dos eran espectadores y de un momento a otro explotó el experimento, que al parecer tenía alcohol”, contó Ospina.

De acuerdo con la versión de uno de los docentes, de inmediato activaron la póliza departamental, y la rectora de la institución estuvo pendiente del caso en conjunto con los padres de familia. Este sería el segundo suceso de gravedad en menos de una semana en el departamento, donde las secretarías de Educación prenden las alarmas para que estos casos no vuelvan a suceder y se cumplan con los protocolos para evitar mayores tragedias.

Consultamos a la Alcaldía de Angelópolis sobre las investigaciones que adelantan del hecho, pero hasta la hora que se publicó esta nota no se ha obtenido respuesta.

Cabe recordar que el pasado martes 27 de septiembre, en hechos muy similares, un trabajo académico terminó en un accidente al interior de un colegio ubicado en el municipio de Itagüí, Antioquia. En medio de un experimento con material inflamable, cinco estudiantes y la docente que tenía a cargo la actividad resultaron con quemaduras. Las autoridades iniciaron un proceso de investigación para esclarecer el incidente.

Las víctimas están matriculadas en el grado cuarto de la institución educativa Concejo Municipal de Itagüí. Aunque se desconocen los detalles del experimento que desató la emergencia en las últimas horas, la administración informó que hubo manipulación de elementos cuya composición podría desatar este tipo de incidentes.

Ahora bien, una vez se desató la complicación en el aula de clase, los organismos de socorro de la ciudad fueron alertados de la situación. Hasta el sitio llegaron tres ambulancias y una máquina de rescate. En imágenes registradas en las redes sociales por el resto de los alumnos del colegio se observa a los estudiantes afectados en camillas.

Todos los menores de edad que expresaron tener lesiones fueron remitidos al centro hospitalario que estaba más cercano de la institución. Hasta el servicio de urgencias de la Clínica Antioquia llegaron los protagonistas de la emergencia, donde se confirmó la gravedad de la actividad: presentan quemaduras de primero y segundo grado.

No obstante, uno de los niños de nueve años es el que está más delicado. Según la Alcaldía de Itagüí, esta persona presenta lesiones en mayor porcentaje en su cuerpo. En efecto, fue remitido hacia la unidad de quemados del Hospital San Vicente de Paúl donde es atendido por especialistas a esta hora. Se desconoce la estabilidad de su salud.

La administración municipal a través de las secretarías de Educación, Salud y familia, se encuentran al frente de la situación para brindar la atención y el acompañamiento tanto a los menores afectados como a sus familias y se iniciará la investigación para determinar las causas del accidente”, informaron en un comunicado estas dependencias de Itagüí.

Finalmente, la Alcaldía resaltó que todos los estudiantes que están matriculados en los colegios de este municipio del sur del Valle de Aburrá cuentan con una póliza que acoge las emergencias que se registren mientras están dentro de los colegios y desarrollando actividades extracurriculares, las cuales ya fueron activadas por los organismos.