ANTIOQUIA
Peligrosos presos en Caucasia aprovecharon crisis por paro minero y se fugaron de una estación de Policía
Se trata de dos presos que presuntamente pertenecen al Clan del Golfo y Los Caparros.
La situación de seguridad en Caucasia tiende a empeorar con el pasar de los días en medio de la crisis por el paro minero. En esta ocasión, dos presos se fugaron de la estación de Policía. De acuerdo con información oficial, uno de los presos es del Clan del Golfo y otro de Los Caparros.
Ambos estaban detenidos en el calabozo cuando se presentó la fuga. Los fugados fueron identificados como Davison Gutiérrez, alias Palito, y Jordan Restrepo, alias Rolo.
La Policía de Caucasia señaló que la fuga ocurrió mientras los uniformados atendían requerimientos del paro minero. Aprovechando esa situación, los presos cortaron uno de los barrotes de la puerta y se fueron.
Los detenidos se encontraban privados de la libertad por ser peligrosos sicarios y estaban acusados del delito de homicidio.
Tendencias
Crisis por el paro
La Asociación de Personerías de Antioquia denunció que once municipios del departamento se encuentran en confinamiento total por cuenta del paro de mineros que está activo desde el jueves 2 de marzo en las subregiones del Bajo Cauca y nordeste.
Este fenómeno se está presentando por la infiltración de las estructuras delincuenciales en la movilización social. Las autoridades alertaron que, con fuertes intimidaciones, los ilegales ordenaron cerrar los establecimientos comerciales y frenar el transporte público.
Al parecer, tienen el interés de que el Gobierno nacional suspenda las operaciones contra la minería irregular que está devorando las montañas de esos territorios y contaminando los afluentes, siendo su principal músculo financiero para sostener a sus filas criminales.
Se mantiene la crisis en los pueblos de Caucasia, Cáceres, El Bagre, Nechí, Tarazá, Zaragoza, Segovia, Remedios, Vegachí, Yalí y Yolombó. Allí ya se reporta escases de los productos de la canasta familiar y otra lista de servicios básicos en los hogares.
También las puertas de las instituciones educativas públicas están cerradas por petición de los delincuentes y el temor de la ciudadanía por las alteraciones del orden que se podría presentar en las próximas horas. Este escenario ya ajusta cinco días.
Mientras que el comité hospitalario de emergencias del centro médico César Uribe del municipio de Caucasia se declaró en alerta roja por el funcionamiento limitado para la prestación de los servicios, citando los bloqueos que hay en los ejes viales de la subregión.
En medio de las movilizaciones, se han presentado hechos vandálicos contra la infraestructura pública y privada en esta misma población. Otra de las preocupaciones es que un número amplio de menores de edad son los protagonistas de los incidentes.
Detrás de esto estarían las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC). Ellos enfurecieron por un golpe que les propinó el Ejército Nacional y la Policía en los últimos días: quemaron cinco dragas de grandes magnitudes instaladas sobre el río Nechí.
Estas unidades de extracción ilícita de yacimientos mineros les dada, cada mes, hasta 1.500 gramos de oros, equivalentes en el mercado negro a 3.600 millones de pesos. Durante el tiempo que opero, se llenaron los bolsillos con 7.500 millones de pesos.
Frente a este escenario, la Asociación de Personerías de Antioquia afirmó que las administraciones municipales no estarían tomando las decisiones necesarias para tomar el control de la seguridad. Sospechan de vacíos en la vigilancia por parte de las autoridades.