Medellín
Taxistas de Medellín anuncian que se irán a paro de actividades; reclaman regulaciones al transporte informal, su mayor dolor de cabeza
La informalidad del sector es el argumento que sostiene el paro de los conductores.
Los conductores de los vehículos amarillos que circulan por las calles de la capital de Antioquia se unirán al paro nacional que se realizará en los próximos días para jalarle las orejas al Gobierno de Gustavo Petro y a las administraciones municipales del país.
Aunque se creía que el cese de actividades estaba sustentado en el incremento de $ 1.000 que ha tenido el precio de la gasolina durante los últimos meses, es otro el argumento que frenará la prestación del servicio público de transporte en la ciudad de Medellín.
En esta oportunidad, la Federación Metropolitana del Gremio de Taxistas cree que es importante cesar las actividades por la falta de regulación que estarían teniendo las autoridades con las operaciones que prestan las plataformas digitales en el sector.
Un dolor de cabeza constante se ha convertido para ellos que los vehículos particulares ofrezcan carreras en el Valle de Aburrá sin contar con los requisitos de ley ni mucho menos costear las exigencias que los taxistas están en la obligación de asumir.
Lo más leído
En cuentas ligeras, los conductores informales les han sustituido el 50 % de los trayectos que cubrían hace 60 meses en esta subregión. Esto les ha golpeado el bolsillo y advierten que las plataformas digitales les están quitando el pan de la boca.
Así lo reconoció el vocero de la agremiación, Fredy Escudero, al enumerar las desventajas que mantienen frente a los particulares que ruedan, principalmente, en Medellín. En una asamblea se definió que el paro se realizará el próximo miércoles 22 de febrero.
“La única razón por las que el gremio saldrá a paro es por la ilegalidad, la falta de operatividad de las secretarías de Movilidad a nivel nacional. Esto ha ocasionado que se desborde la ilegalidad. Estamos exigiendo que el Gobierno haga cumplir las leyes”, contó.
Desde ese sector también se alertó que la alta congestión vehicular que hoy amenaza la estabilidad vial de las principales ciudades del país está justificada en el incrementado de carros que ofrecen servicio y se presentan como taxis, pero no están en la legalidad.
La preocupación de la Federación Metropolitana del Gremio de Taxistas es grande. Entretanto, reconoció que la labor que por años le han estado brindando a la ciudad se está acabando porque hoy las personas prefieren los automotores irregulares.
“Nosotros estamos regulados. Tenemos quién nos vigile, quién nos persiga. Nos exigen la revisión tecnicomecánica, revisión de cambio de tarifa, nos piden tarjeta amarilla, nos piden de todo. Mientras que la ilegalidad se moviliza a sus anchas”, agregó el vocero.
El clamor de los conductores de los carros amarillos es contundente: quieren que el Gobierno nacional tramite los esfuerzos que sean necesarios para poder eliminar las plataformas digitales que ofrecen el servicio de transporte público en Colombia.
La Federación explicó que, mientras ellos están cumpliendo con las obligaciones, los otros están movilizando a los clientes sin blindarlos de los riesgos que están en la vía. Es decir, las empresas digitales no están costeando los seguros requeridos para la operación.
“Acá está en riesgo es un usuario. Tenemos que pensar en ellos. Si le van a prestar un servicio de transporte, que sea protegido con un seguro. Además, que el carro cumpla con todas las normas legales que exige el Ministerio de Transporte”, detalló la entidad.
Si bien tienen molestias con el precio de la gasolina, no será la consigna principal, a razón de que consideran que ese tema deber ser incluido en otra movilización nacional donde se incluya a todos los sectores de la sociedad porque serían más los afectados.
De momento, no se ha confirmado el recorrido que realizarán en la capital de Antioquia ese 22 de febrero. Sin embargo, se presume que se concentrarán en el centro de la ciudad.