Nación
Bebé indígena llegó en grave estado de salud a un hospital de Pereira porque le practicaron la ablación genital
La niña presentaba un cuadro clínico de infección, desnutrición, deshidratación y diarrea.
En el departamento de Risaralda se está prestando especial atención al caso de una niña de apenas 15 días de nacida, quien pertenece a una comunidad indígena del municipio de Pueblo Rico, la cual fue sometida a una práctica de mutilación genital por una partera.
De acuerdo con Sandra Milena Gómez Giraldo, quien es la secretaria de Salud Pública de Risaralda, la menor llegó al hospital San Jorge de Pereira procedente del puesto de salud del corregimiento Santa Cecilia, en Pueblo Rico, para ser atendida por varias afecciones.
Tras la valoración realizada por los médicos en el centro asistencial, se reportó el caso a su director, Javier Alejandro Gaviria Murillo, para que fuera comunicado a las autoridades con el fin de que se iniciaran las respectivas investigaciones.
Explicó que la niña ya se encuentra estable y permanece en una unidad de cuidado neonatal; aunque el caso fue comunicado por el hospital San Jorge al Sistema Nacional de Vigilancia en Salud Pública, (Sivigila), del Instituto Nacional de Salud, por maltrato y negligencia.
Sobre este punto, aclaró que no se trata por la ablación puntualmente, ya que a pesar de los múltiples reparos que pueda tener, es una práctica ancestral de estas comunidades, sino que es por las complicaciones que se derivaron de esta hacia la niña, que presentaba un cuadro clínico de infección, desnutrición, deshidratación y diarrea.
Manifestó además que la bebé no tuvo ninguna clase de control médico al nacer, ni tampoco registra esquema de vacunación alguno. Además, su progenitora cuenta apenas con 15 años de edad y tampoco recibió atención prenatal.
Hizo énfasis en que desde la Secretaría se llevan a cabo de manera constante diferentes programas de salud mental, asuntos étnicos para poblaciones vulnerables, y salud sexual y reproductiva.
Precisó que el objetivo primordial es que las mujeres de las comunidades indígenas aprendan a quererse, respetarse y valorarse; para que no permitan ninguna clase de actos relacionados con la violencia intrafamiliar y de género.
Igualmente, manifestó que en estas jornadas se brinda orientación y capacitación a cerca de 150 parteras ancestrales de los diferentes resguardos indígenas existentes en los municipios de Mistrató, Guática, Marsella, Quinchía y Pueblo Rico, en Risaralda.
Destacó que para la administración departamental es muy importante aportar a la construcción del Sistema Indígena de Salud Propia Intercultural, (Sispi), además del mejoramiento en la calidad de vida de los habitantes de todas las comunidades y resguardos.
En el caso de la niña que fue víctima de mutilación genital, indicó que se hará seguimiento por parte la Secretaría de Salud de Risaralda y el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, con el acompañamiento de la IPS Pijao, que es la encargada de brindarle atención inicial a la menor.
Las estadísticas que maneja la Organización Mundial de la Salud, indican que más de 200 millones de mujeres en el planeta han sufrido la mutilación genital femenina en 30 países de África, Oriente Medio y Asia; que es donde más se concentra esta práctica.
Un alto porcentaje de estos casos se presenta entre algún momento de la lactancia y los 15 años de edad, representando en los 27 países que tienen prevalencia un costo de 1.400 millones de dólares anuales para tratar las complicaciones de salud que se derivan.
Se cataloga como mutilación genital femenina cualquier procedimiento que implique resección parcial o total de genitales externos femeninos y otras lesiones, a causa de procedimientos que no son de carácter médico.