Risaralda
Esta es la identidad de los muertos y sobrevivientes que, de momento, deja el deslizamiento que sepultó un bus en Risaralda
Tres personas han sido encontradas sin vida, mientras que otras nueve aparecieron con signos vitales en medio del deslizamiento.
Los organismos de socorro del departamento de Risaralda confirmaron el fallecimiento de tres personas y el hallazgo con vida de otros nueve ciudadanos que se movilizaban dentro de un bus de servicio público que fue sepultado por un deslizamiento de tierra este domingo.
El movimiento en masa cayó sobre tres carros y una motocicleta que se movían entre los municipios de Santa Cecilia y Pueblo Rico a las cinco de la mañana. Sin embargo, la fatalidad se concentró en el vehículo que estaba ocupado por cerca de 31 personas.
Una lluvia de piedras frenó el destino del bus que salió en la madrugada desde la ciudad de Cali hacia el departamento de Chocó. Desde la terminal de transporte se registraron 25 personas y dos conductores, pero en el trayecto se embarcaron más pasajeros.
Aunque el señor que tenía las manos en el volante trató de esquivar el incidente, la montaña se le vino encima. Entre los ocupantes estaban familias enteras, menores de edad y una mujer en embarazo. Solo nueve, milagrosamente, han podido salir con vida.
Seis de ellos fueron identificados como Yolanda Pérez Acevedo, Andrés Guillermo Ibargüen Díaz, Elvia Quiñónez Castillo, Danilo Ríos Granada, Kevin Sánchez Río y Saray Mosquera Rivera. Todos están siendo atendidos en centros hospitalarios del departamento de Risaralda.
Según el informe que suministraron los organismos de socorro de esta región del país, las afectaciones que tienen los pacientes fueron producto de los golpes que recibieron de las piedras. Entre tanto, fracturas en las piernas y brazos y otros traumas considerables.
Mientras que los fallecidos está una niña de aproximadamente siete años, cuyo nombre sería Saray. A pesar del esfuerzo de los médicos para reanimarla, no respondió a las maniobras. Las autoridades no han podido dar con el paradero de sus acudientes.
Las otras dos personas que perdieron la vida en medio del desprendimiento de la montaña en Risaralda fueron identificadas como Guillermo Ibargüen Arboleda de 44 años y Samuel Elías Ayala Benítez de 20 años, según lo reportó la Alcaldía de Pueblo Rico.
Pero la lista podría aumentar en las próximas horas. La Gobernación indicó que una menor de edad fue vista con signos vitales, mientras abrazaba el cuerpo sin vida de quien sería su madre. Hasta el momento, esta víctima no se ha contemplado dentro de los fallecidos.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Vías (Invías), dos buses que prestaban el servicio público de transporte y un vehículo particular resultaron bajo la tierra. Las cuentas preliminares dan cuenta que 31 personas fueron sorprendidas por una lluvia de material vegetal y rocoso.
Pero la tensión se mantiene en el lugar donde se registró el incidente a razón de que las fuertes precipitaciones y nuevos movimientos en masa estarían frenando las labores de rescate. Si las condiciones lo permiten, los organismos de socorro se mantendrán en el sector hasta las seis de la tarde de este domingo y retornarían el 5 de diciembre.
“Al parecer ha habido 2 movimientos en masa suplementarios y sigue lloviendo, lo que dificulta las labores de rescate. Al menos 70 unidades de la Dirección de Bomberos de Colombia apoyan las labores de rescate”, indicó la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres en la tarde de este 4 de diciembre en sus redes sociales.
En el sector se mantienen unidades de los cuerpos de bomberos de Risaralda, Defensa Civil y la Policía Nacional. Además, más de 70 hombres del Instituto Nacional de Vías, entre técnicos, operarios e ingenieros, se trasladaron para apoyar la remoción de material con 37 unidades de maquinaria, entre retroexcavadoras, cargadores y volquetas.
Las autoridades que regulan el transporte en la capital de Risaralda recomendaron que, mientras se realizan las labores de remoción, se mantiene como vías alternas el corredor Quibdó – Medellín, recorrido que implica un aumento en las operaciones comerciales de las empresas que se mueven entre el Eje Cafetero y la ciudad de Quibdó.