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Prisión para hombres acusados de lanzar dos cadáveres desde un vehículo en zona rural de Pereira
Las víctimas habían sido torturadas con golpes en el rostro, tórax, abdomen y extremidades.
A pesar de que no aceptaron los cargos que les fueron imputados por homicidio agravado y tráfico, fabricación o porte de armas de fuego, accesorios, partes o municiones; un juez decidió enviar a la cárcel a tres hombres que son acusados de arrojar dos cadáveres a un lote baldío en zona rural de la ciudad de Pereira durante la madrugada de este viernes 24 de febrero.
La información oportuna que entregó la comunidad fue clave para resolver este misterioso crimen que dejó sorprendidos a los habitantes de la vereda La Bamba, en el coregimiento Morelia, ubicado en la salida de la ciudad de Pereira hacia el municipio vallecaucano de Alcalá, cuando desde un automóvil fueron lanzados dos bultos a una zona boscosa.
De inmediato, los uniformados adscritos a la Subestación de Policía Tres Puertas iniciaron la ejecución de un plan candado que les permitió interceptar un vehículo con características similares al que describieron los ciudadanos, cuando circulaba al frente del colegio Bethlemitas en la vía que conduce a la vereda El Congolo.
En el informe que entregan las autoridades se explica que al interior de este automotor, una camioneta Renault Duster de color gris, viajaban tres hombres de 28, 30 y 43 años, quienes son oriundos de los municipios de Pereira y Chinchiná, en el departamento de Caldas.
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De acuerdo con el coronel Javier Raúl Gallego Duque, quien es el comandante de la Policía Metropolitana en la capital risaraldense, fueron encontradas varias manchas de sangre en la ropa de uno de los detenidos y en el tapete del copiloto.
Precisó que durante la inspección de los cadáveres por parte de los integrantes del Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía General de la Nación, fue posible determinar que las víctimas habían sido torturadas con golpes en el rostro, tórax, abdomen y extremidades. Además, sufrieron asfixia mecánica y presentaban señales de estrangulamiento con una cuerda; aunque su deceso se produjo por impactos con arma de fuego.
El director seccional de Fiscalías en Risaralda, Germán Ramírez Muñoz, indicó que en el baúl de la camioneta también hallaron rastros de sangre que fueron cotejados con las personas fallecidas. Agregó que el automotor había sido alquilado el jueves 23 de febrero y que fue captado por una cámara de seguridad contigua al lote donde arrojaron los cuerpos a la misma hora del crimen.
Explicó que al inspeccionar los costales que fueron arrojados desde este carro, los investigadores hallaron los cadáveres de dos hombres que estaban amordazados, atados de pies y manos; y con disparos en la cabeza. Las víctimas pudieron ser identificadas como Jarol de Jesús Martínez Ríos y Jorge Eliécer Arango Buitrago, quien era conocido con el alias de Conejo.
Los tres sujetos que actualmente están tras las rejas registran antecedentes en el Sistema Penal Oral Acusatorio, (SPOA), por los delitos de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes; lesiones personales y tráfico, fabricación o porte de armas de fuego, accesorios, partes o municiones.
Otra zona limítrofe de la ciudad de Pereira que está siendo vigilada de forma permanente por las autoridades es el corregimiento de Puerto Caldas, que la comunica con el municipio de cartago en el Valle del Cauca. Allí fue desmantelada recientemente una estructura delincuencial conocida como ‘Nueva Generación’, la cual se encargaba de controlar el tráfico de estupefacientes en esa área y de la ejecución de homicidios selectivos.
Durante los operativos fueron detenidas 13 personas que son acusadas por su presunta responsabilidad en 10 homicidios y tres atentados, los cuales ocurrieron entre los meses de septiembre de 2022 y febrero de 2023 en Cartago y el corregimiento Puerto Caldas. Se conoció que cada integrante de esta estructura recibía sumas quincenalmente entre los $ 800.000 y $ 1.000.000 de pesos por asesinato.
Este grupo tenía en su poder varios elementos que fueron incautados como seis motocicletas de distintos cilindrajes, 11 teléfonos celulares, 1 revólver, 2 pistolas, 1 granada de humo, 100 cartuchos de varios calibres, 1 chaleco antibalas, 1.000 gramos de marihuana, 1 vehículo y $ 600.000 pesos en efectivo.