NACIÓN
Capturaron a tres presuntos responsables de disparar contra el Ejército en Cesar
En el lugar fueron decomisadas un arma de fuego, proveedores, cartuchos, vainillas y radios de comunicaciones entre otros elementos
Luego de avalar los argumentos de la Fiscalía General de la Nación, un juez de control de garantías impuso medida de aseguramiento en establecimiento carcelario en contra de tres personas que habrían atacado con disparos a integrantes del Ejército Nacional.
Los hechos se registraron el pasado 12 de marzo a las 4:30 de la madrugada en una finca ubicada en el corregimiento Monterrubio, zona rural de Sabanas de San Ángel (Magdalena), hasta donde llegaron los uniformados luego de recibir información sobre la presencia de personas portando armas de corto y largo alcance.
Durante el procedimiento fueron capturados Celina Esther García Blanco, Ana Elena García Mercado y Ramiro Mercado Caballero.
En el lugar, los uniformados decomisaron una pistola calibre 9 milímetros, cuatro proveedores,103 cartuchos, cuatro radios de comunicaciones, cuatro agendas de apuntes, dos boletas de libertad a nombre de una de las personas que habría huido del lugar, seis teléfonos celulares, tres memorias USB, así como elementos de campaña con logos del Ejército, una camioneta y tres motocicletas.
Por estos hechos, un fiscal de la Seccional Cesar les imputó cargos como presuntos responsables del delito de fabricación, tráfico y porte de armas de fuego o municiones agravado, en concurso con fabricación, tráfico y porte de arma, municiones de uso restringido de las fuerzas armadas.
Soldados del Caribe muertos en ataque
Los rostros de las víctimas de la masacre y la crueldad del ELN tras un atentado perpetrado este miércoles 29 de marzo en los límites del noroccidente del departamento de Santander con el departamento de Cesar, son en su mayoría jóvenes soldados nacidos en el Caribe colombiano.
Seis de los nueve muertos, que cumplían misiones de seguridad en el oleoducto Caño Limón - Coveñas y hacían parte del Batallón Especial Energético y Vial N.º 10 (BAEEV10), son nativos precisamente de los departamentos de Cesar, Magdalena y La Guajira.
El ataque se registró según las autoridades hacia las 3:00 de la madrugada y allí instantáneamente murieron los jóvenes soldados que apenas llevaban meses prestando su servicio a la patria.
Los soldados Jaime Manuel Redondo Uriana, Fabio Epinayu Ipuana y José David Pushaina Epieyu eran oriundos de Manaure, La Guajira; el soldado Herzel José Fernández Bonivento era oriundo de Riohacha, también en el departamento de La Guajira, mientras que Kevin Andrés Acevedo Osorio, era oriundo de San Alberto, Cesar, y Rafael David Fallece Jiménez, nacido en Fundación, Magdalena. Todos entre los 19 y los 23 años de edad.
Los otros soldados muertos en el ataque fueron: el cabo segundo Brayan Alberto Gómez Gamboa, del arma de Artillería, con siete años de servicio, oriundo de Palmira, Valle del Cauca; el cabo tercero Juan Mateo Benavides Bohórquez, del arma de Infantería, oriundo de Bogotá, quien tenía un hijo, y el soldado Jhoan David Gómez Gelvez, oriundo de Bucaramanga, Santander.
En el hecho también resultaron heridos el subteniente Carlos Pacheco Pacheco, Álvaro Epieyu Epieyu, Arrieta de Armas, Adolfo Epieyu; Brayan Guerrero López, Gabriel Herrera Orozco, Luis Angarita Muñoz; Joselito Henríquez González y Julio Molina. En donde también hay nativos del Caribe.
Vale precisar que en el sector de Guamalito históricamente se han presentado ataques contra el oleoducto Caño Limón - Coveñas, que han causado graves afectaciones al medio ambiente debido al derrame de crudo y afectaciones contra la misma comunidad.
SEMANA tuvo acceso a las primeras imágenes de los hechos y son demoledoras, por su contenido resultan impublicables, pero el país debe conocer la brutalidad con la que esta guerrilla, que supuestamente está negociando la paz, atacó a ese grupo de forma despiadada y en completa incapacidad de defenderse.
Uno de los videos más fuertes fue grabado por uno de los soldados sobrevivientes del ataque quien, con celular en mano, recorre el devastado lugar donde solo se ven cuerpos tirados en el piso y bañados en sangre. Paso a paso entre la maleza ve a cada uno de sus compañeros.