Nación
Increíble: cientos de personas resultaron estafadas por grupos de WhatsApp en La Guajira; les pedían 50 mil pesos diarios
La víctimas, al parecer, residían en los municipios de Fonseca y Distracción.
En el departamento de La Guajira se reportó una estafa masiva de las que habrían sido víctimas varias personas residentes en los municipios de Fonseca y Distracción.
De acuerdo con la denuncia publicada en el portal La Guajira 24 HRS, personas inescrupulosas comenzaron a contactarse con otros ciudadanos, a través de mensajes vía WhatsApp, ofreciéndoles un supuesto programa de inversión rápida en el que podrían multiplicar el dinero fácilmente mediante un fondo de inversiones conocido como Cruz.
El procedimiento resultaba sencillo. Quien estuviese interesado debía realizar una transferencia por Efecty y luego esperar los resultados financieros.
La información comenzó a generar bastante eco, de manera que se llegaron a conformar 33 grupos de WhatsApp. Las primeras versiones dan cuenta que las personas depositaban, en promedio, 50 mil pesos diarios.
Al parecer, todo marchaba bien, hasta el pasado viernes, 11 de agosto. Ese día, según La Guajira 24 HRS, los coordinadores de dichas transferencias habrían anunciado que se podrían invertir mayores sumas de dinero para obtener más ganancias.
En ese sentido, las víctimas comenzaron a depositar cifras que superaban los 50 mil pesos diarios. Ese mismo día, en horas de la noche, los grupos de WhatsApp fueron bloqueados y, hasta el cierre de esta publicación, aún no hay nadie que responda por el dinero transferido.
Estafas con el SOAT
El SOAT se ha convertido cada vez más en un dolor de cabeza para los conductores colombianos. A pesar de significar seguridad en muchos aspectos, así como tranquilidad al momento de andar al día por las vías del país, también es cierto que los elevados costos de este documento han hecho que más de uno postergue su pago.
Así las cosas, el Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito se ha vuelto objeto de muchas discusiones, ya que los conductores alegan que es un impuesto muy costoso, mientras que el gremio de las aseguradoras alega que no está siendo viable por la evasión, además del fraude que se comete por el uso indebido de dichas pólizas.
Es por esto que la Federación de Aseguradores Colombianos, Fasecolda, presentó una propuesta para hacer una valoración, donde se evalúa el cobro del Soat a partir de una evaluación que determine el riesgo que tiene cada conductor de sufrir un accidente.
Dependiendo de ese resultado, se cobraría una tarifa más alta o más baja al momento de adquirir la póliza. La agremiación señaló directamente a los motociclistas, quiénes son los mayores evasores del seguro, y que sería uno de los actores viales a los que podría afectarles el costo del Soat.
Según lo que expuso el presidente de Fasecolda, Gustavo Morales, en algunos eventos y entrevistas a diferentes medios de comunicación, hay que hacer una revisión en la tarifa del Soat con la intención de pagar una póliza proporcional al riesgo que corre en las calles.
Comparó el proceso con un seguro de salud, si por ejemplo el usuario tiene sobrepeso y fuma tendría que pagar un seguro más caro. Así las cosas, las motos serían uno de los vehículos que más pagarían, por su mayor riesgo.
Lo anterior también ha sido visto como una solución polémica, pues el valor de una moto es mucho menor al de un carro y, en la mayoría de los casos, el poder adquisitivo del dueño de una motocicleta es inferior al de un automóvil.
Con todo, un nuevo problema surge para los usuarios en el afán de adquirir el Soat y es que han aumentado considerablemente las estafas alrededor de este papel.
Una modalidad engañosa ha hecho que cientos de personas caigan y pierdan sumas de dinero equivalentes al valor de la credencial.
¿De qué se trata? Lo que han hecho los inescrupulosos es pagar el patrocinio de Google, por lo que aparecen en los primeros lugares en los resultados de búsqueda con la etiqueta de “patrocinado”, detalle que normalmente daba confianza sobre un sitio. En este caso, es lo contrario.
Al entrar a dichas páginas se ve que tienen un diseño bastante sencillo, lo cual debería ser la primera alerta acerca de la veracidad.
El otro punto clave para sospechar es que no hay un muro de pago con los logos correspondientes al pago ‘seguro en línea’ con el que cuentan los sitios autorizados. Por el contrario, solo hay formularios o chats en los que se redirige su información a WhatsApp.
Ya en conversación con un “asesor”, se le dice al interesado que solo se puede pagar por transferencia electrónica a través de cuentas como Nequi, Daviplata o Bancolombia a la mano, otra razón de fuerza para no continuar con el proceso, debido a que las aseguradoras son empresas legalmente constituidas y tienen cuentas empresariales, por lo que no debería ir el dinero a un particular.
Finalmente, el precio que cobran normalmente es la tarifa actual del SOAT. No obstante, en algunos casos ofrecen descuentos hasta del 15 %, lo que sería otro aspecto preocupante y de gran sospecha, ya que esta clase de beneficios no debería darse.