Bienes de lujo

Las joyas ganan atractivo como inversión

El brillo del oro y de los diamantes cautiva a inversionistas y consumidores alemanes que, en tiempos de crisis y de bajas tasas de interés, no ahorran, sino gastan a manos llenas porque tienen empleos y altos salarios.

Alianza DW
11 de junio de 2012
Joyería.

Pareciera que la crisis de deuda en Europa hubiera trastocado virtudes consideradas inamovibles en la sociedad alemana como el ahorro. Pero no es la crisis lo que ha mejorado los ánimos de los consumidores, sino el bajo índice de desempleo existente en el país y los altos niveles salariales.

"Los consumidores están gastando a manos llenas, sobre todo por los bajos tipos de interés, lo que ha beneficiado al sector de la joyería" afirma Joachim Dünkelmann, representante de la Asociación Alemana de Joyeros. 

El sector registró en 2011 un volumen de negocio equivalente a 5.000 millones de euros. Dos tercios fueron compras de joyas y una tercera parte, relojes. Los joyeros esperan este año un crecimiento adicional. Los altos precios del oro, la plata, el platino y diamantes no intimidan al bolsillo a los consumidores. La gente está dispuesta a pagar. 

“Sobre todo el segmento de joyería fina se ha beneficiado de una reapreciación del valor de este tipo de productos por parte del consumidor”, afirma Dünkelmann y explica que esto se debe a que el precio del oro, por ejemplo, mantiene una tendencia al alza, también los diamantes muestran una cotización estable.

No todo lo que brilla es oro

Pero no todo lo que brilla es oro. La organización Stiftung Warentest, que somete a prueba a una amplia gama de productos en beneficio del consumidor, recomienda a quien no conoce de joyas no invertir en un mercado poco transparente: “Quien no conozca el sector es mejor que ni se meta en ese tipo de inversiones” advierte la organización.

Lo mismo opina Jürgen Kurz, representante de la Asociación de Protección a Propietarios de Títulos, que advierte que con la compra de una pieza de joyería no sólo se compra el material sino el trabajo y la provisión del vendedor: “Cuando una joya, aunque sea muy fina, ya no corresponde a la moda en boga, vale sólo el material”.

El mercado de oro es más fiable al tener criterios más claros para su cotización. Pese a que la onza de oro ha bajado durante las últimas semanas y actualmente se cotiza en unos 1.500 dólares el experto advierte que no vale la pena comprar oro en pequeñas cantidades, pues los precios por un gramo pueden variar entre la venta y la compra de un 10 a un 20 por ciento.

Refugio en tiempos de crisis

La fuerte demanda del metal se debe a que sigue siendo considerado un buen refugio en tiempos de crisis. “Quien invierte en oro apuesta por un aumento en su cotización”, afirma Joachim Kurz y añade que en tiempos de crisis el precio sube, pero baja tan pronto como vuelve la calma. Kurz aconseja tener oro en una inversión mixta.

Con la sostenida crisis del euro la cotización de oro se mantiene alta y no es obstáculo para que los ahorradores inviertan fuertes sumas. Así es como el consumidor llega a comprar collares y relojes que adquieren un valor personal.

A diferencia de los automóviles y la ropa, que con el transcurso del tiempo pierden valor, la joyería, aunque no genera intereses, preserva el valor de los materiales preciosos que contiene.