Estados Unidos

Alcalde de Nueva York admite que la crisis migratoria es “insostenible”

El alcalde está tratando de dar la mejor de las respuestas ante la crisis que cada vez trae más personas a su ciudad.

12 de octubre de 2022
En imágenes : Migrantes que logran curzar la frontera los transportan hacia el norte de EE. UU
El alcalde de admitió que Nueva York ahora tiene más de 61.000 personas en su sistema de refugio. | Foto: REUTERS

La Gran Manzana pronto tendrá refugios de emergencia para inmigrantes en “todas las comunidades”, y los residentes deben esperar que se abran sin previo aviso ya que es una crisis hasta hora insostenible, dijo el martes el alcalde Eric Adams.

“Cada comunidad va a tener solicitantes de asilo”, dijo Adams durante una conferencia de prensa en el estadio de los Yankees en el Bronx.

Adams también dijo que “no podemos dar a la gente un mes de antelación” antes de que los migrantes se instalen en los hoteles de sus barrios.

“A medida que llega la emergencia, tenemos que hacer estos movimientos sobre el terreno y asegurarnos de que hacemos frente a la crisis que tenemos delante”, dijo.

Las declaraciones del alcalde se produjeron un día después de que The Post publicara una desgarradora foto de una madre migrante desesperada que sostenía a su hija de un año mientras pedía comida en Staten Island.

Los políticos locales y los residentes han criticado a Adams por enviar a decenas de familias migrantes a los hoteles de Wild Avenue en la sección de Travis de la isla, diciendo que no hay recursos disponibles para ellos en el barrio.

Pero Adams, que el viernes declaró el estado de emergencia por la crisis migratoria, dijo que ninguna zona quedaría exenta.

“Así que todas las llamadas que estoy recibiendo de los funcionarios electos, todas las llamadas que estoy escuchando de la gente de decir, ya sabes, ‘Por favor, no aquí’, que simplemente no puede suceder”, dijo.

“Esta es una crisis que afecta a toda la ciudad y todos nosotros nos veremos afectados y Staten Island se verá afectada como los otros cuatro distritos”.

Nueva York declara estado de emergencia por llegada de migrantes

El alcalde de Nueva York, Eric Adams, declaró este viernes la emergencia en la ciudad ante la “crisis humanitaria” derivada de la llegada de miles de migrantes, supuestamente alentada desde estados gobernados por republicanos.

La orden insta a todas las autoridades y agencias a coordinarse para ofrecer una mejor respuesta, ante la previsión de que hasta 100.000 personas puedan llegar a la ciudad en los próximos meses, explicó Adams ante los medios, según la cadena NBC News.

Nueva York ya ha habilitado como refugios 42 hoteles y ha distribuido a 5.500 niños en escuelas públicas, pero reclama más apoyo de las autoridades estatales y federales. La alcaldía prevé destinar más de 1.000 millones de dólares a responder al aumento del flujo migratorio.

Adams y otros líderes demócratas culparon a gobiernos republicanos de estados fronterizos de alentar estas llegadas. En el caso de Nueva York, las críticas van dirigidas principalmente contra el gobernador de Texas, Greg Abbott.

De acuerdo con el alcalde demócrata, desde el pasado abril más de 17.000 solicitantes de asilo, en su mayoría sudamericanos, han sido enviados en autobuses a esa ciudad desde la frontera sur, tras señalar que desde septiembre se ha visto una media de cinco o seis buses cada día.

El funcionario señaló que en la víspera, jueves, llegaron nueve y que este jueves llegaron nueve. Otros cuatro lo hicieron este viernes, de acuerdo con un reporte del New York Post.

“Miles de solicitantes de asilo han sido traídos en autobús a la ciudad de Nueva York y simplemente dejados aquí, sin aviso, coordinación o atención, y más siguen llegando cada día”, denunció.

Señaló que “la ciudad de Nueva York se ve obligada a soportar mucho más de lo que le corresponde en una crisis nacional provocada por motivaciones políticas”.

Por ley, la denominada capital del mundo es una de las pocas de Estados Unidos que tiene la obligación de dar asistencia a cualquier persona y no dejar a nadie en la calle, con lo que la llegada de cientos de migrantes el sistema ha sido puesto a prueba.