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El dueño de un gimnasio y varios trabajadores en Carolina del Sur son acusados por abusar sexualmente de menores

El dueño del gimnasio aparentemente “participó en actos sexuales ilícitos con atletas menores de edad que no tenían la edad suficiente para dar su consentimiento”,

2 de septiembre de 2022
Abuso sexual
El gimnasio es acusado de abusar sexualmente de atletas menores de edad, así como de llevarlas a través de las fronteras estatales con el fin de tener relaciones sexuales. | Foto: Getty Images

Este jueves se presentó una demanda contra un gimnasio de porristas de Carolina del Sur, el cual nombra a 100 demandantes que acusan al gimnasio y a su empresa matriz de cometer abuso sexual contra menores a través de las fronteras estatales durante años, según informes locales.

“Esta fue una fábrica de abuso diseñada específicamente para generar dos cosas: un suministro constante de víctimas menores de edad para Scott Foster y sus compañeros depredadores y un flujo de ingresos de mil millones de dólares para Varsity Spirit, USASF y Bain Capital”, dijo el abogado de Strom Law Firm, Bakari Sellers, en un comunicado.

Foster y su esposa durante 21 años, Kathy Foster, copropietaria de Rockstar Cheer, se habían enterado recientemente de una investigación del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) en donde hacían acusaciones de que Scott Foster estaba abusando sexualmente de atletas menores de edad. En el informe también aseguraban que llevaba atletas menores de edad a través de las fronteras estatales con el fin de tener relaciones sexuales.

La demanda fue presentada en un tribunal de distrito de Carolina del Sur.

Acusan al gimnasio y a su empresa matriz de cometer abuso sexual contra menores a través de las fronteras estatales durante años.

En este documento también acusan a Varsity Spirit , LLC; Bain Capital, LP; y la Federación de Estrellas de EE. UU. (USASF) de crear “un entorno competitivo que solicite a los atletas jóvenes que crucen las fronteras estatales con una supervisión mínima de los padres o de un adulto, para converger en lugares previamente programados donde los atletas estarían expuestos a las drogas, el alcohol y los ataques depredadores, conducta de adultos, incluidos entrenadores y coreógrafos”.

En un comunicado publicado en Twitter, el presidente de Varsity Spirit, Bill Seely, dijo que escuchar las acusaciones es “devastador” y que “el corazón de la compañía está roto junto con el suyo”.

Scott Foster supuestamente alquiló “un apartamento para sus atletas donde algunos de ellos vivirían y donde los atletas menores se reunirían para consumir drogas y beber alcohol con y sin el acusado Foster”. El dueño del gimnasio, aparentemente también “participó en actos sexuales ilícitos con atletas menores de edad que no tenían la edad suficiente para dar su consentimiento”, dice la demanda.

“Todos los acusados eran cómplices en un plan para lograr que la mayor cantidad posible de familias confiara a sus niños atletas a estos gimnasios y entrenadores privados para que esos entrenadores llevaran a los atletas a las competencias lucrativas en todo Estados Unidos durante el año”, afirma la denuncia.

En una página web (Rockstar Cheer’s Greenville location), una biografía aparentemente escrita por Scott Foster afirma que el nativo de Kentucky “se graduó con una licenciatura en Justicia Criminal y estaba totalmente preparado para unirse al FBI después de completar su maestría; pero la vida lanzó su curva y se introdujo el porrismo competitivo como una posible carrera”.

La demanda actualmente detalla las experiencias de varios sobrevivientes, pero se presentarán demandas adicionales de otras víctimas en otras jurisdicciones de todo el país, según Strom Law Firm.

“Scott Foster y sus aliados hicieron todo lo posible para intimidar y aislar a sus objetivos, haciendo que estos jóvenes se sintieran solos y de alguna manera responsables”, dijo la abogada Jessica Fickling en un comunicado.

“Bueno, ya no están solos. Estamos con ellos y con todos los sobrevivientes que se presentan”, concluyo.