Estados Unidos
Exjefes del Pentágono temen por las relaciones entre civiles y militares en Estados Unidos
Esa división se ha venido fortaleciendo en los últimos años.
Un grupo de exjefes del Pentágono expresaron el martes 6 de septiembre su preocupación por el riesgo de deterioro de las relaciones entre civiles y militares en Estados Unidos.
“Estamos en un clima civil-militar extremadamente complejo”, advirtieron en una carta abierta ocho exministros de Defensa y cinco exjefes de Estado Mayor antes de enumerar 16 principios que deben guiar las relaciones entre militares y población civil.
“Políticamente, los militares profesionales enfrentan un ambiente extremadamente adverso caracterizado por las divisiones de una polarización que culminó en la primera elección en más de un siglo cuando la pacífica transferencia del poder político fue perturbada y puesta en duda”, dijeron.
“Todos estos factores corren el riesgo de agravarse antes de que las cosas se calmen”, advierten los exsecretarios de Defensa, entre los que se encuentran el republicano Bob Gates o el demócrata Leon Panetta, así como dos de Donald Trump, Jim Mattis y Mark Esper, destituidos por haberse opuesto al expresidente republicano.
Tendencias
Trump fue acusado de politizar al Ejército estadounidense al desplegar soldados en la frontera mexicana para ayudar a detener a los migrantes que trataban de entrar ilegalmente a Estados Unidos. Pero también recurrió a los militares para operaciones de mantenimiento del orden durante las manifestaciones antirracistas de 2020.
En una de esas ocasiones fue dispersada de manera violenta una manifestación cerca de la Casa Blanca para que Trump se pudiera fotografiar con una biblia en la mano frente a una iglesia. El jefe de Estado Mayor, general Mark Milley, fue filmado en uniforme detrás de Trump, lo que lamentó públicamente unos días más tarde.
Por su parte, el presidente Joe Biden fue criticado por el retiro caótico de Afganistán el año pasado, que dejó un sabor amargo para muchos militares, y más recientemente por haber pronunciado un discurso muy crítico hacia su antecesor con dos marines a su lado.
Los exjefes del Pentágono señalan en el documento publicado por el sitio especializado War on the Rocks que los militares deben aceptar las órdenes de civiles, aunque no estén de acuerdo, pero las órdenes deben ser legales.
“Cualquiera que sea el proceso, los más altos responsables políticos y militares tienen como responsabilidad asegurarse de que las órdenes que reciben del presidente son legales”, escribieron, exigiendo también a los civiles “asumir las responsabilidades” de las órdenes que imparten.
Pentágono se niega a desplegar la Guardia Nacional en Washington
El Departamento de Defensa de Estados Unidos se opone a desplegar la Guardia Nacional en el Distrito de Columbia, donde se encuentra Washington, para lidiar con los migrantes enviados en buses desde Texas y Arizona, según afirmó este viernes un funcionario del Pentágono.
La alcaldesa del Distrito de Columbia, Muriel Bowser, pidió al secretario de Defensa, Lloyd J. Austin, “que despliegue la guardia nacional de DC” para abordar “una creciente crisis humanitaria”.
Cabe mencionar que la Guardia Nacional es un cuerpo militar de reserva que se suele desplegar en casos de emergencia estatal. Por esta razón, cada estado puede activarla dentro de su territorio, pero DC no es un estado y necesita el acuerdo del Departamento de Defensa para poder desplegarla.
El secretario de Defensa “se ha negado a aprobar la solicitud” para que la guardia nacional de DC (DCNG) proporcione personal para ayudar a la oenegé Samu First Response “con el transporte y la recepción de migrantes que llegan al área de DC”, afirmó a la AFP un funcionario del Pentágono que pidió mantener el anonimato.
“Hemos determinado que brindar este apoyo afectaría negativamente la preparación de la DCNG y tendría efectos negativos en la organización y los miembros”, añadió.
El funcionario también señaló que las subvenciones a través del Programa de alimentos y refugio de emergencia de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (Fema) “son suficientes (...) para brindar asistencia a los migrantes”.
El gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, envió el pasado mes de abril unos autobuses llenos de migrantes irregulares a Washington; posteriormente, el mandatario de Arizona, Doug Ducey, del mismo partido, hizo lo mismo.
“Debemos asegurarnos de que haya una respuesta federal, no una respuesta ciudad por ciudad, estado por estado”, insistió la alcaldesa de DC.
Según la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), en junio el número de encuentros con migrantes irregulares en la frontera sur de Estados Unidos fue de 207.416, es decir, cada vez que uno de ellos llega y se entrega a una autoridad o trata de cruzar.
El 26 % de ellos había intentado cruzar al menos una vez en los últimos 12 meses.
*Con información de la AFP.