Las trágicas historias detrás de la muerte de varias personas en medio de la fuerte tormenta invernal en Nueva York

La tormenta invernal que sacude a Estados Unidos ha afectado especialmente al estado de Nueva York, donde 39 personas han muerto, según el más reciente informe de funcionarios del condado de Erie.

Esta zona, localizada en oeste de ese estado, ha sido el área más golpeada por el fenómeno metereológico de ese país, donde en total han muerto 59 personas.

Aunque en la víspera (miércoles), las temperaturas se moderaron, incluyendo Buffalo; esta ciudad, a orillas del lago Erie, cerca de la frontera con Canadá, registró la mayoría de las muertes por la tormenta.

Las autoridades encontraron cadáveres en sus autos o en las calles, algunas después de esperar durante horas para ser rescatadas.

“Desafortunadamente, nuestras muertes relacionadas con la tormenta, según lo informado por la oficina del médico forense ahora son 39. 17 fueron encontrados afuera, 11 estaban en casas, 4 fueron encontrados en autos, 4 fueron por palear/quitar nieve, 3 fueron respuestas demoradas de EMS”, señaló Mark Poloncarz, funcionario del condado de Erie.

“En este punto, hay múltiples cadáveres sin identificar. Ofrezco mi más sentido pésame y condolencias a todos los que han perdido un ser querido a causa de esta terrible tormenta de nieve”, indicó.

Historias

En medio de ese panorama, se han conocido las historias de personas que han muerto como consecuencia de la tormenta invernal. Es el caso de Anndel Taylor, una joven de apenas 22 años de edad perdió la vida tras estar durante 18 horas dentro de su carro, atrapada por la nieve.

La mujer alcanzó a enviarles algunos videos a su familia, en uno de los cuales se puede ver cómo su carro quedó enterrado y no podía seguir su camino. El video llega a ser desesperante y aterrador, ya que no hay salida ante la tormenta, la cual hizo descender los termómetros a temperaturas que ningún ser humano podría resistir.

Entre las personas que han perdido la vida se encuentran, además, Monique Alexander, 52 años, quien según relató su hija Casey Maccarone a ABC News, salió a una tienda para hacer unas compras, tras enterarse de que los establecimientos serían cerrados debido a la tormenta.

“Nunca dijo dónde iba, solo que volvería enseguida”, narró tras señalar que no regresó y su cuerpo fue encontrado a pocos metros de la casa, enterrado en la nieve.

Otro hecho que ha generado tristeza es el de Carolyn Eubanks, una mujer de 63 años quien murió luego de que su casa se quedara sin servicio de electricidad. La mujer utilizaba una máquina de oxígeno para respirar.

De acuerdo con su hijo, Antwaine Parker, en declaraciones al periódico The Buffalo News, la mujer no logró comunicarse con los servicios de emergencia.

Un vecino, identificado como David Purdy, le ayudó a él y uno de sus hermanos a cargarla hasta el interior de su vivienda e intentó en reanimarla.

“Me dijo ‘Ya no puedo seguir’ y yo le respondí: ‘Mamá, solo ponte de pie’. Cayó en mis brazos y no dijo una palabra más”, narró el hijo de la mujer.

Timothy Murphy, de 27 años, es otra de las víctimas que ha dejado la tormenta invernal: El joven murió debido a que la nieve taponó la salida del gas de un equipo de calefacción.

De acuerdo con el reporte oficial de la Policía del Condado Niagara, esta situación llevó a que su vivienda ubicada en Lockport se llenara de monóxido de carbono, causándole la muerte.

Steven Murphy, primo del joven, intentó comunicarse con él y con su madre Kathy Murphy, en la mañana del día de Navidad, pero no obtuvo respuesta, por lo que fue hasta la casa a ver que sucedía, dijo Goodrich, hermana de Timothy, citada por el diario The New York Times.

Dijo que Steven encontró a Timothy “frío” y sin respuesta. “No pudo salvarle”, mientras que su madre fue trasladada a la unidad de cuidados intensivos del cercano hospital Mount St”.

Medidas

Entretanto, las autoridades locales mantienen la prohibición de conducir debido a las condiciones que se presenta en las vías por la presencia de nieve.

La Guardia Nacional irá de puerta en puerta en áreas que perdieron el suministro de energía eléctrica para asegurarse de que los residentes estén bien.

También se preparan para la eventual crisis que sigue a la gran tormenta, el derretimiento de grandes cantidades de nieve.

Adelantándose a que las temperaturas alcancen los 10 grados celsius previstas para este viernes 30 de diciembre, la gobernadora del estado de Nueva York, Kathy Hochul, ordenó el despliegue de bombas y sacos de arena en caso de “condiciones de inundación potencialmente peligrosas”.

Con información de AFP