Policía detiene a un sospechoso criminal que escapó de un hospital psiquiátrico en Virginia, Estados Unidos

Este lunes 24 octubre, la policía de Virginia detuvo a un sospechoso criminal que escapó de un hospital psiquiátrico.

La Policía Estatal de Virginia (VSP) dice que Michael Lee Malone, de 32 años, quien también se hacía llamar Christopher Feagin, escapó del Hospital Estatal del Este en Williamsburg, Virginia .

La policía del condado de James City “fue alertada de un individuo que encajaba con la descripción de Christopher Feagin, de 32 años, el cual estaba dentro de una tienda de conveniencia en la cuadra 6400 de Richmond Rd/Ruta 60″, dijo VSP en una publicación de Facebook del martes.

“La policía del condado de James City y la policía estatal respondieron de inmediato y detuvieron a Feagin cerca sin incidentes. Las autoridades están procesando a Feagin con una orden de arresto por un delito grave por escapar del hospital, dijo VSP.

Cabe resaltar que investigaciones posteriores revelaron que el verdadero nombre de Feagin es Michael Lee Corey Malone. Las autoridades, por su parte, creen que Feagin escapó del hospital alrededor de la 1:40 a. m. del lunes, pero no dijeron cómo.

Por el momento, se enfrenta a numerosos cargos penales que datan desde marzo de 2021 por: violar la libertad condicional, asalto simple a un socorrista, masturbación pública, daños a la propiedad dentro y fuera de la prisión, y múltiples cargos de posesión no autorizada de un arma mortal, según los registros de Virginia Beach. Se espera su sentencia final para los próximos días.

Un hombre de Florida les disparó a policías pensando que eran miembros de cartel mexicano

En otros hechos, el pasado mes de septiembre, un hombre de Florida le dijo a la Policía que disparó a varios agentes porque pensó que eran miembros de un cartel de drogas mexicano, según una declaración jurada de arresto. Ahora, el sujeto enfrenta cargos de homicidio premeditado.

Se trata de Lukas Alves, acusado de una serie de cargos, incluido intento de asesinato premeditado en primer grado de un oficial de la ley, luego de que le disparara a un oficial en el pecho, en un hotel de Melbourne, informó la cadena FOX 35 Orlando.

Mientras los oficiales lo interrogaban después del tiroteo, Alves dijo que creía que los oficiales eran miembros de un cartel que aparecieron afuera de su habitación para robar sus pertenencias.

“Alves y su compañero de cuarto se hospedaban en el Suburban Lodge Extended Stay cuando la gerencia del hotel fue alertada sobre una llamada al 911 que colgó. Cuando la gerencia llamó a la puerta de Alves, escucharon al hombre gritar: ‘Hay un grupo de hombres armados y yo voy a morir’, dice una declaración jurada de arresto”, publica FOX 35.

La Policía fue alertada del intercambio verbal y uniformados le dijeron a la estación de televisión que llegaron al hotel para verificar el estado del hombre en el cuarto.

Cuando los oficiales llamaron a la puerta de la habitación de Alves, repetidamente les pidió sus números de placa. La Policía dijo que cumplieron y se los dieron.

Minutos después, Alves comenzó a contar regresivamente desde tres y luego disparó un tiro a través de la puerta con su arma, apuntándole a un oficial en el pecho.

Posteriormente, se produjo un intercambio de disparos entre los oficiales y Alves. Según los informes, algunos de los disparos del hombre atravesaron las paredes de otra habitación donde se alojaban dos personas.

Después, Alves y su compañero de cuarto fueron detenidos. Ahora, el hombre enfrenta tres cargos por intento de asesinato premeditado en primer grado de un oficial de la ley, un cargo de disparar contra un edificio ocupado y uso de un arma de fuego durante un delito grave, según FOX 35.

El oficial baleado vestía un chaleco antibalas y solo sufrió contusiones y una pequeña laceración en la barbilla. Por ahora, se espera que el oficial se recupere.

“El chaleco hizo su trabajo”, comentó. Además, se supo que el viernes también era el 26 aniversario del oficial con la agencia. “Gracias a Dios que va a vivir para ver otro día”, dijo el jefe de Policía de Melbourne, David Gillespie.