Estados Unidos
Reanudan clases en escuela de Uvalde, Texas, donde ocurrió la masacre de 21 personas
Algunos alumnos se niegan a volver a las aulas tras los hechos sucedidos.
Este martes 6 de septiembre inició el año escolar en los Estados Unidos y ante el nuevo año escolar, la escuela de Uvalde, Texas, donde ocurrió el tiroteo en el que 21 personas fallecieron, 19 de ellas estudiantes, abrió nuevamente sus puerta para recibir a sus alumnos.
De acuerdo con la información oficial, la Escuela Primaria Robb no abrirá el lugar de la escena de la masacre. Es decir que ni estudiantes, ni personal regresaran a dicha locación.
En este sentido, los niños que terminaron primero y pasan a segundo y no lo harán en las estas instalaciones, sino que tomarán su curso en la Escuela Primaria Dalton.
Por su parte, quienes estaban en grado segundo, víctimas en su mayoría del tiroteo, harán su año escolar en la nueva Escuela Primaria Uvalde, ubicada en un complejo educativo habilitado en la ciudad.
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No obstante, otros estudiantes prefirieron abandonar la escuela e inscribirse a otra con el fin de dejar atrás ese episodio y poder dar un nuevo inicio en otro centro de educación primaria.
Regreso a Clases
El regreso a clases en las escuelas de Estados Unidos inicia el próximo 6 de septiembre y todas están tomando medidas para proteger a los estudiantes, debido a los tiroteos que se presentaron el último año, sobre todo el ocurrido en Uvalde, Texas.
Allí todavía la herida está abierta y los recuerdos de aquella masacre que cobró la vida de 19 alumnos y dos profesores retumban en la mente de ciudadanos, estudiantes y padres de familia. Es por eso que varios de ellos temen la vuelta a las aulas e incluso piensan en tomar las clases de manera virtual, ya que el miedo está apoderado de ellos.
“Mi hijo y mi hija no quieren ir a la escuela [...]. Yo hablé con mi hijo sobre todos los policías que iban a estar en la escuela, pero él me responde que los policías aunque estén ahí no van a entrar y si algo pasa van a estar asustados, y cuando escuchas a tu hijo decir tienes sentimientos encontrados”, dice Adán Martínez, padre de uno de los niños que sobrevivió a la masacre en entrevista con Telemundo.
Otros padres decidieron inscribir a sus hijos en otra escuela primaria cercana. Incluso acudieron a colegios privados cristianos, donde toca pagar la mensualidad. La razón, sus hijos estaban asustados por regresar a la escuela Robb.
“Piensa un poco lo que pasó en la Robb y no tiene miedo de ir allá (a la nueva escuela), eso sí, nunca va a parar de pensar en ese trágico día”, dijo Oscar Orona al mismo medio de comunicación.
Los padres de familia de los estudiantes que deben regresar a clases piden por lo menos que los policías y el jefe de ellos sea cambiado, debido a las falencias que presentaron a la hora de ingresar a la escuela para detener el tiroteo y los culpan de ser los principales responsables de que varios de los menores de edad perdieran la vida.
Relatos escalofriantes de sobrevivientes
Miah Cerrillo, de 11 años, logró sobrevivir a ese día. Para escapar de la atención de Salvador Ramos, la niña se cubrió con la sangre de un compañero, cuyo cadáver estaba junto a ella, dijo a la cadena CNN en un testimonio fuera de cámaras. Acababa de ver al atacante matar a su profesora después de decirle “buenas noches”.
Otro estudiante, Daniel, contó al periódico The Washington Post que mientras las víctimas esperaban a que la policía viniera a rescatarlos, nadie gritó. “Estaba asustado y estresado, porque las balas casi me pegan”, dijo.
Su maestra, que resultó herida, les susurró que “mantuvieran la calma” y se “quedaran quietos”. Una niña, también herida de bala, había pedido amablemente a su maestra que llamara a la policía, diciendo que “sangraba mucho”, relató Daniel, que ya no puede dormir solo y tiene pesadillas.
Los niños sobrevivientes “están traumatizados y tendrán que vivir con eso toda la vida”, subrayó su madre, Briana Ruiz. Samuel Salinas también dijo tener pesadillas en las que ve al tirador. La idea de volver a la escuela, o incluso volver a ver a los compañeros de clase, sigue siendo aterradora. “No tengo muchas ganas”, confesó, y añadió que quería “quedarse en casa” y “descansar”.