Estados Unidos
Robo informático a operador telefónico en Estados Unidos pone en riesgo datos de 37 millones de usuarios
Aunque los datos hurtados no son tan sensibles, el número de usuarios de T-Mobile afectados equivale a la población de países como Argentina.
Las alarmas de los cuerpos de seguridad de Estados Unidos se encendieron el pasado jueves, 19 de enero de 2023, luego de que la reconocida empresa, operadora de telefonía móvil en ese país, T- Mobile, diera a conocer que detectó una vulneración de sus sistemas de seguridad informática.
De acuerdo con el reporte entregado por la misma compañía a la Comisión de Valores de Estados Unidos, el ciberataque del que fue víctima la empresa dejó en peligro la privacidad de cerca de 37 millones de sus usuarios; una cifra equivalente a la totalidad de la población de países como Argentina.
En ese mismo sentido, y ante el elevado riesgo que ha significado esta vulneración informática a las bases de datos de millones de usuarios, medios locales han señalado que según las autoridades, de momento, no se ha logrado identificar qué organización se encontraría detrás de este sensible ataque.
Si bien la información de esta vulneración a la ciberseguridad de uno de los principales operadores móviles de Estados Unidos se conoció apenas esta semana, se ha precisado que el robo en sí fue efectuado el pasado mes de noviembre, y este comprendió la extracción de los datos de identificación, domicilio, y contacto de esta importante porción de la ciudadanía estadounidense.
Lo más leído
Pese a que la filtración de datos comenzó en noviembre, según detalla el informe de la compañía, fue solo hasta el pasado 5 de enero que la empresa pudo detectarlo, emprendiendo entonces las correspondientes acciones para buscar neutralizarlo.
En un comunicado dado a conocer por la compañía, la empresa operadora de telecomunicaciones se manifestó consciente del impacto y magnitud del ciberataque para con sus clientes y lamentó lo ocurrido.
“Nuestra investigación aún está en proceso, pero al parecer la actividad maliciosa está totalmente contenida en este momento”, sostiene la empresa, que aclaró que, según lo que se ha podido identificar, el ataque no logró alcanzar niveles tan complejos como el eventual acceso a contraseñas, información financiera, tarjetas de crédito, entre otros, que hubiesen significado aún mayores riesgos.
No obstante, reconoce que la información sustraída sí puede prestarse para que los malintencionados hackers que la hurtaron puedan desarrollar acciones delictivas relacionadas como ‘robo de identidades’ o estafas; afirmaciones basadas en la experiencia con anteriores casos de vulneración.
En medio de la investigación, la compañía ha aclarado que se mantiene en permanente colaboración con las autoridades federales de Estados Unidos con el propósito de combatir esta clase de incidentes, así como en el avance de las correspondientes investigaciones para buscar minimizar la amenaza ya existente.
De igual modo, T- Mobile ha comenzado una cruzada en pro de la seguridad de sus usuarios vulnerados, personas con las que afirma se ha comenzado a poner en contacto con el fin de emprender nuevas acciones que propendan por su seguridad frente a los datos hurtados.
No es el primer robo de información y filtraciones
Según precisan medios locales de comunicación en los Estados Unidos como la cadena de noticias para latinos Telemundo, el ciberataque sufrido por T-Mobile el pasado mes de noviembre no es el primero, ni el único en haber alcanzado la ingente magnitud denunciada.
Así, recuerdan que en el año 2021, la compañía fue objeto de un ataque similar que para su momento puso en riesgo la privacidad de cerca de 77 millones de usuarios. Incluso, en aquel entonces, los ciberdelincuentes habrían accedido no solo a un mayor número de clientes, sino también a datos de mayor complejidad como sus números de seguridad social e incluso sus números de licencias de conducción.
Sumados a casos precedentes, este tipo de robos no solo comprometen la seguridad de los clientes, sino también representan altos costos para la compañía de telecomunicaciones, que ahora deberá poner cara a las eventuales reclamaciones de los usuarios, así como inversiones en el perfeccionamiento de sus sistemas de seguridad para prevenir esta clase de ataques.
En el caso del robo de 2021, T-.Mobile debió desembolsar cerca de 350 millones de dólares en indemnizaciones y reclamaciones de los usuarios, así como cerca de 150 millones adicionales en el fortalecimiento de su ciberseguridad.