Crece polémica en Francia por presidencia de Polanski de los César

La ministra francesa de los Derechos de las Mujeres, Laurence Rossignol, juzgó el viernes "sorprendente y chocante" el hecho de que el cineasta Roman Polanski, acusado en Estados Unidos de violación, presida la entrega de los premios César el mes próximo.

"Es una elección que demuestra, de parte de quienes decidieron nombrar al presidente de los César, una indiferencia respecto a los hechos que le son reprochados", estimó la ministra. El director francopolonés de Tess, El Pianista o Chinatown, es acusado por la justicia estadounidense de haber violado a una menor en 1977.

Una asociación feminista ya llamó el jueves a manifestarse durante la ceremonia del 24 de febrero en París de los César -los Óscar franceses-, para protestar contra la decisión anuciada esta semana. La designación de Polanski es un gesto "indigno frente a las numerosas víctimas de violaciones y agresiones sexuales", estimó la asociación Osez le Féminisme.

El viernes se habían recogido cerca de 25.000 firmas para forzar su "destitución" como presidente de los César.

La exministra de Cultura Aurelie Filippetti estimó en cambio el jueves que la elección formaba parte de la "libertad absoluta de la Academia de los César" y deseó que "se dejé (a Polanski) presidir esta ceremonia". "Es algo que pasó hace 40 años", agregó.

Interrogada por la AFP, la Academia de las Artes y Técnicas del Cine, organizadora de los César, declinó reaccionar a la polémica.

Polanski fue acusado en California en 1977, cuando tenía 43 años, de haber violado a una adolescente de 13 años. El cineasta se declaró culpable de "relaciones sexuales ilegales" con una menor y huyó de Estados Unidos antes del veredicto. Polanski, de 83 años, vive en Francia con su tercera esposa, la actriz Emmanuelle Seigner. Nunca regresó a Estados Unidos. 

El cineasta, autor de 21 largometrajes, ha sido recompensado principalmente con dos César al mejor filme. En 1980 lo fue por Tess, adaptada de la novela Tess de Urberville de Thomas Hardy, y en 2003 por El Pianista, su obra maestra adaptada del libro autobiográfico epónimo de Wladyslaw Szpilman, que narra la supervivencia de un músico en el gueto de Varsovia durante la Segunda Guerra Mundial. Por esta última película, premiada igualmente en Cannes en 2002, también recibió el César al mejor director.

Polanski prepara actualmente su próxima película, consagrada al caso Dreyfus, que provocó el famoso artículo Yo acuso del escritor Émile Zola.