Internacional

Directora del grupo Clarín detenida por caso de niños desaparecidos

Miércoles 18, 10:30 horas. Ernestina Herrera de Noble, presidenta y directora del conglomerado de medios argentino Clarín, fue detenida el día de ayer, acusada de "falsificación de datos de filiación" de uno de sus dos hijos adoptivos.

16 de diciembre de 2002

El caso corresponde a la investigación sobre el destino de los niños desaparecidos durante la última dictadura militar.

El juez federal Roberto Marquevich ordenó la detención de Herrera de Noble, por los delitos de "supresión de identidad, retención y ocultamiento de menor", dijo un subcomisionado de la División de Delitos Complejos de la Policía Federal Argentina, que pidió mantener el anonimato.

La detención se efectuó tras una querella presentada por el grupo de derechos humanos Abuelas de la Plaza de Mayo, que desde hace más de dos décadas buscan a sus nietos nacidos en centros clandestinos de detención o tomados prisioneros junto a sus padres por escuadrones de las Fuerzas Armadas.

Además de la detención, Marquevich ordenó la "extracción compulsiva" de sangre de uno de los dos hijos adoptivos de Herrera de Noble, para realizar un examen de ADN.

Por su parte, un vocero de la empresa editora del diario El Clarín, uno de los de mayor tirada de Latinoamérica, aseguró que la detención fue abusiva porque "en ningún momento la justicia citó hasta la fecha a la señora de Noble a prestar declaración. La detención resulta un acto procesal intempestivo y arbitrario que excede el limitado propósito de lograr su comparencia ante el tribunal".

Desde 1996, la Justicia argentina investiga más de 190 casos de sustracción de menores y supresión de identidad durante la última dictadura militar argentina en 1976, en la que desaparecieron, según grupos de derechos humanos unas 30.000 personas.

Entre ellas, se encuentran mujeres que fueron detenidas embarazadas y desaparecían tras dar a luz y sus hijos eran entregados a militares, policías y familias adineradas que los registraban como propios. Otras veces eran llevados a centros de adopción y, en raras ocasiones, eran entregados a sus familias biológicas. Según las Abuelas de la Plaza de Mayo, desaparecieron unos 200 niños.