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Un paso más hacia la guerra.
Lunes 27, 9:30 horas. Los investigadores de armas ya le entregaron su reporte a la ONU y aunque se critica la actuación del gobierno iraquí, no es posible asegurar que se están armando de nuevo. Mientras tanto, Estados Unidos prepara un borrador de resolución que autorice ataque al país árabe.
El equipo de investigadores, dirigido por Hans Blix, indicó que los iraquíes no han sido abiertos y no han entregado la información que ha sido buscada por los inspectores. Y, a pesar de haber encontrado distintas pruebas, no se pueden confirmar las acusaciones proferidas por Estados Unidos sobre que se está armando de nuevo.
Los equipos de la Comisión de Inspección, Monitoreo y Verificación de armas de las Naciones Unidas encontraron documentos relacionados escondidos en la casa de un científico iraquí; al menos 16 ojivas vacías y no declaradas de armas químicas y partes importadas ilegalmente para su programa de misiles.
Mientras tanto, el Departamento de Estado norteamericano ha comenzado a redactar el borrador de una nueva propuesta de resolución de Naciones Unidas que autorizaría el uso de acciones militares para obligar al régimen de Saddam Hussein al desarme. Lo único que falta es que se conozca el informe y se apruebe en el Consejo de Seguridad de la ONU.
La resolución solamente será presentada si Estados Unidos tiene la certeza del apoyo a una posible guerra contra Irak de al menos nueve de los 15 miembros del Consejo de Seguridad, el mínimo necesario según las reglas de la organización para que la medida sea aprobada. Tampoco sería ratificada si la iniciativa es sancionada por alguno de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad, ya ahí uno asegurado: Estados Unidos comparte la posición con China, Rusia, Gran Bretaña y Francia.
Así mismo, voceros del gobierno norteamericano aseguraron que una iniciativa de guerra es la única manera de encarar a Saddam Hussein.
Por su parte, el general Amer al Saadi, asesor científico del presidente iraquí, le dijo el sábado a CNN que un ataque estadounidense es inevitable, sin importar el informe que presenten los inspectores de la ONU.