Así armaron la declaración del Tuso Sierra

Una de las revelaciones más interesantes en las interceptaciones al abogado Diego Cadena es el tortuoso trámite que tuvo la declaración de Juan Carlos Sierra, alias el Tuso, para favorecer los intereses del expresidente Álvaro Uribe.

El Tuso Sierra, que salió de la cárcel en Estados Unidos después de purgar una pena por narcotráfico, es allegado por negocios y por lazos de familia con el exsenador Mario Uribe, primo del expresidente. Hace unos años, Mario Uribe, Santiago Uribe Vélez, el condenado abogado Sergio González y el Tuso fueron parte de un complot para desacreditar la investigación de la parapolítica que llevó a la cárcel a decenas de políticos, entre ellos el propio Mario Uribe.

Este año, cuando ya pocos recordaban al Tuso, el expresidente Álvaro Uribe pidió que lo llamaran a declarar en su proceso por manipulación de testigos. Varias comunicaciones muestran el accidentado trámite que tuvo la declaración. También evidencian algunas cosas que querían que dijera.

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La primera llamada en la que se menciona el tema tuvo lugar el 10 de abril. Los interlocutores son Fabián Vargas, miembro de la Unidad de Trabajo Legislativo de Uribe, y el abogado Cadena.

–¿Nos podemos hablar normal por aquí? –pregunta el hombre de confianza del expresidente Uribe–. ¿Será que no podemos buscar abrirle espacio para ver si logramos introducir de alguna forma el tema del Tuso en el proceso?

–Claro –responde Cadena–, una prueba sobreviniente se allega a la Corte.

Vargas invoca la influencia de Diego Cadena en Estados Unidos.

–Y como usted tiene el espacio donde los monos, entonces a ver si de pronto pudiéramos trabajar. Acabo de hablar con el jefe…

Menos de una hora después, el abogado Cadena habla con el expresidente Uribe, quien le comenta:

–Me dicen que le han pedido una prueba. Que le han pedido una declaración a este Tuso Sierra para el 5 o 7 de mayo. Me dicen de Medellín, pero no lo tengo claro todavía.

–Excelente –replica Cadena.

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La conversación concluye con esta elocuente frase del abogado:

–… La del Tuso, presidente, empieza a tumbarle credibilidad a ellos. Eso me deja tranquilo. Voy a averiguar si eso es cierto.

Después de eso, Diego Cadena viajó a Estados Unidos para lograr el testimonio del Tuso. El 7 de mayo se presentaron varias llamadas entre Uribe y Cadena porque la declaración seguía sin llegar.

–Ese hombre hoy dizque debería dictar una… –el senador Uribe se calla súbitamente.

–¿Debería dictar una qué, presidente? –pregunta Cadena.

–Debería dar una declaración hoy donde él pensaba mencionar este tema, pero una declaración que nada tiene que ver conmigo.

Aparentemente, el plan consistía en que la declaración de Sierra fuera rendida en otro proceso y luego trasladada al que la Corte Suprema sigue contra el expresidente Uribe. También queda claro, en otra llamada de ese mismo día, lo que estaban esperando que el Tuso dijera.

–Hombre, una cosa, es que me han dicho que con ese tema del abogado de Estados Unidos –comenta el senador Uribe en la grabación– él no quisiera involucrar en esto ni el caso de Juan Carlos Restrepo, ni el caso Barceló, Juan Carlos Giraldo.

–¿Que él no quiere involucrar al magistrado Barceló ni a Juan Carlos Giraldo? –pregunta Cadena.

Al final, Uribe con resignación le da esta instrucción al abogado.

–Dígale que lo importante es que él declare lo que quiera decir, que si tiene que quitarle o agregarle a esa declaración que tranquilo.

Esas conversaciones sucedían el 7 de mayo. Al otro día, el martes 8, el Tuso Sierra fue con un familiar a las oficinas de Univisión en Miami. Allí nos contó al periodista Gerardo Reyes y a mí que un abogado, cuyo nombre no reveló, le había enviado una carta de 15 páginas en la que incluso absolvía de toda culpa a Mario Uribe. Nos dijo que no iba a firmar eso, pero que “tenía familia”.

Dos semanas después, el 24 de mayo, ya la situación era desesperada, a juzgar por el tono de Uribe:

–Preocupado, hombre, porque se me acabó el tiempo, doctor Diego.

Un día después, el viernes 25, Cadena se queja porque la declaración que recibió no era la que estaban esperando:

–Mire, presidente, me entregan un documento muy diferente al que el señor firma en presencia mía y me entregan un documento dando a entender sí que él tiene una información, pero no hace alusión a la visita que tuvo por parte de estas personas. Falta de seriedad, falta de respeto, falta de todo.

Finalmente, la declaración del Tuso Sierra fue presentada en la Corte Suprema de Justicia, dos meses después, en agosto. La evolución grabada del curioso documento muestra qué tan espontáneo fue el testimonio.