Sofy Casas

OPINIÓN

¿El Esmad quedará en manos de los narcoterroristas ELN?

Muchas cosas por reflexionar y, sobre todo, muy grave para el país e inaceptable el sentar al Esmad con una caterva de desadaptados.

2 de septiembre de 2022

Otra polémica que se suma a las tantas de este nuevo gobierno es el anuncio del presidente de la Cámara, David Racero, al confirmar que las llamadas primeras líneas (que no son más que milicias urbanas) harán parte de la reforma de los Escuadrones Móviles Antidisturbios Esmad.

Recordemos que el congresista David Racero señaló que para reestructurar el Esmad es necesario establecer un diálogo pluralista, razón por la cual varios integrantes de esas agrupaciones que hacen presencia en diversas regiones del país tendrán un espacio. Entre la reestructuración (transformación) el general

Sanabria dijo que el Esmad se convertirá en una Unidad de Diálogo y Acompañamiento cuando haya alteraciones de orden público, confirmando así, que habrá cambios en el casco de los agentes y las tanquetas se pintarían de blanco. Un punto importante: algunas tanquetas las convertirán en ambulancias. ¿Pero quiénes son los integrantes de esas agrupaciones llamadas primeras líneas?

Recordemos que las investigaciones de la DIJIN en la toma guerrillera del 2021 (las famosas protestas) arrojaron que estos integrantes son financiados, entrenados y controlados por las milicias urbanas de los narcoterroristas del ELN, y donde se logró demostrar que las FARC también los apoyaron. Ellos Son como una especie de colectivo armado al servicio del régimen, tal cual como operan en Venezuela los colectivos chavistas.

El gobierno del expresidente Iván Duque cometió el error de no catalogar a este de grupo de ‘supuestos jóvenes’ como milicianos urbanos al estilo Antifa.

¿Recuerdan a la encapuchada alias Simona de la famosa primera línea que no son más que milicias urbanas controladas por los narcoterroristas del ELN y FARC?

Reapareció el miércoles 31 de agosto con un polémico hilo en Twitter, haciendo varias exigencias, entre esas la liberación de sus compañeros detenidos por la toma guerrillera del 2021 que incendió el país, dejando a muchos dueños de negocios sin su sustento y generando desempleo.

Alias Simona, en sus mensajes publicados en Twitter, expresó que no basta con una reestructuración, sino con el desmonte definitivo de ese organismo.

Simona también es conocida por irrumpir con su grupo de delincuentes en la catedral primada de Bogotá en plena eucaristía gritando arengas en contra de los feligreses.

Hubo algo que llamó mi atención en su hilo en Twitter, cuando la encapuchada vocera de uno de estos frentes controlado por los narcoterroristas del ELN justificó la existencia de esos grupos de jóvenes que participaron en la toma guerrillera, indicando lo siguiente: “la primera línea nació en defensa de la vida, el territorio y la protesta social. Esta organización está conformada por jóvenes inconformes y soñadores que decidieron arriesgarlo todo por un nuevo porvenir, argumentando también que La primera línea quería cuidar al pueblo de la brutalidad policial, por eso arriesgaron sus vidas por el bienestar colectivo”.

¿Qué significa para estos supuestos jóvenes el cuidar al pueblo? ¿Cuidar al pueblo significa incendiar al país dejando a millones sin transporte público para acudir a sus sitios de trabajo? ¿Cuidar al pueblo significa acabar con la empresa privada generadora de empleo, la cual le da trabajo a millones de colombianos para que puedan llevar el sustento a sus hogares?

El incendiar las bombas de gasolina, dejando también a millones sin poder tanquear sus carros o motos para poder transportarse a sus lugares de trabajo, incrementando así el precio del combustible, ¿eso es cuidar del pueblo?

Yo no sabía que cuidar al pueblo significa bloquear ambulancias con pacientes graves y que se morían dentro de ellas porque no lograban llegar a los hospitales por culpa de estas protestas y bloqueos. Entre esos muertos se registró un caso que estremeció al país: el de una mujer embarazada que perdió a su bebé, gracias a las protestas.

Me vengo a enterar de que cuidar al pueblo para ellos significa el bloquear las vías principales de las ciudades por donde se transportan los alimentos de los colombianos. Al bloquear las vías no llegaban los alimentos a los supermercados y plazas de mercado, dejando a millones sin comida.

Desafortunadamente, si el gobierno del exguerrillero y ahora presidente, Gustavo Petro, permite esta aberración en contra de la institución, esto llevará poco a poco al desarme de la Fuerza Pública que operará con bolillo y donde quedaremos con un Esmad adoctrinado y controlado por los narcoterroristas del ELN los cuales estarán al servicio de un régimen que ya se está conformando para la protección de una futura dictadura que viene para Colombia, quedando así, la ciudadanía, completamente desprotegida y en manos de las milicias urbanas.

Muchas cosas por reflexionar y, sobre todo, muy grave para el país e inaceptable el sentar al Esmad con una caterva de desadaptados de la peor laya para decidir sobre el futuro de este organismo.

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