El testigo estrella

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El paramilitar Carlos Enrique Vélez, declarante a favor del expresidente Álvaro Uribe y en contra del senador Iván Cepeda en el proceso por manipulación de testigos, fue grabado mientras afirma que lo que dijo no es verdad. También le anuncia a otra testigo que se volteará, si no les dan una gruesa suma de dinero.

Vélez, alias comandante Víctor, está en la cárcel de Palmira condenado a 20 años por una masacre en Riosucio, Caldas. Allí fue contactado por el controvertido abogado Diego Cadena y por su subalterno el abogado Juan José Salazar.

La persona interceptada mientras habla con Carlos Enrique Vélez se llama Eurídice Cortés, alias comandante Diana, ex jefe política del frente paramilitar Cacique Pipintá.

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Cadena y Salazar le pidieron a Diana un video desmintiendo a Pablo Hernán Sierra, alias Alberto Guerrero o Pipintá, el jefe de esa estructura paramilitar, que declaró que Álvaro Uribe y su hermano Santiago fundaron el Bloque Metro de las autodefensas.

La corte tiene en su poder varias interceptaciones entre Vélez, Diana, Cadena y Salazar.

En una de esas conversaciones Cadena le ofrece a Vélez gestionarle beneficios judiciales con un fiscal de Cali a quien le entregarían unos fusiles que el paramilitar dejó escondidos: “Yo estuve hablando con el fiscal, se llama Álvaro Rodríguez, es buen fiscal, buen señor, muy serio, muy servicial, muy comprometido con el trabajo para ver de qué forma le pueden dar un beneficio jurídico”.

Álvaro Rodríguez, fiscal ante jueces especializados de Cali, efectivamente recibió una llamada de Diego Cadena, donde le dice: “Hay un señor que me manda un mensaje, me dice que tiene una cooperación con algo que él dejó en el pasado por allá escondido, son unas armas, dice que son varias Doc. Y es un señor que tiene su pasado. ¿Qué podríamos para eso, Doc? ¿Le cuadro una cita con él? (…) pero él está más encerrado que tigre de zoológico”.

En el llamado a indagatoria a Álvaro Uribe, la Corte Suprema afirma que Cadena “ha contactado en diferentes cárceles –y por fuera de ellas– a exmiembros de grupos paramilitares para que –a cambio de favores jurídicos y al parecer dinero– elaboren escritos y videos a favor del senador Álvaro Uribe Vélez y de su hermano Santiago”.

Varias llamadas indican que Carlos Enrique Vélez no se conformaba con los favores jurídicos.

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En una comunicación, interceptada el 16 de junio del año pasado, Vélez le dice a alias Diana: “A ver Diana pa que saquemos mija porque esto está muy hp, ese man ahí vea, ese hp no es pobre de sacar 100 o 200 millones de pesos”.

Cinco horas después Diana se comunica con el abogado Juan José Salazar a quien le pregunta: “¿Usted ha hablado con Víctor, con Carlos?”. Salazar responde: “Pues la verdad es que el hombre estaba molestando por ahí, porque no le pudimos cumplir con una cosita que nos pidió el favor, porque pues se nos demoró. Usted sabe que a nosotros se nos demoran a veces las cositas”.

El 22 de junio, seis días después, el tono había subido. Vélez afirma: “Yo voy a tirar eso con la corte. Voy a embalar a esos hp”. “Cambiemos la versión, que coman mierda esos hp. No ve que ya le van a dar orden de aprehensión a Uribe”. “Uno puede voltear ahí eso y decir la verdad. Ellos quieren que yo diga la verdad pues la verdad la voy a decir, entonces, perjudicando ese viejo y ellos”. Diana le pregunta “¿O sea que usted la declaración que le dio a la corte no fue bajo juramento?”. Vélez replica: “No, no (inaudible) con la magistrada y los investigadores. Entonces esta ya viene juramentada y hasta luego, ahí si no me le (inaudible) pa atrás ni por el (…) Así mejor dicho salgo apoyando a Alberto” “Quedo apoyando soy yo a Alberto prácticamente” “Apoyándole las mentiras a Alberto. Eso es lo que ellos quieren, ellos verán. Ahí la llamarán a usted por ese video que usted hizo”.

Vélez continúa: “No cuando le metan todo eso ahí pa arriba va a ver el estallido tan hp. Si a Daniel Coronell le doy una entrevista y la acabo de (inaudible) y más Diego que está cargado con ese man, lo acabo de cargar”. Diana interviene: “Cagada, cagada, pero yo no entiendo pues la actitud de Diego, para qué se pone a decir que sí va ir donde usted, que no sé qué, que si no. Diga no hermano, no puedo o dejemos las cosas así y dentro de dos meses volvemos a hablar”. Carlos agrega: “Y Juan también es un mentiroso ahí”.

De alguna manera debieron apaciguar la ira de Carlos Enrique Vélez porque el apoderado principal del expresidente Uribe, Jaime Granados, publicó en octubre un comunicado en el que anuncia que Vélez se ratificará en su declaración.