Alejandra Carvajal Reyes Columna Semana

OPINIÓN

Irene Vélez: por decencia, déjese de mentiras y brutalidades. ¡Renuncie ya!

Los chats entre ella y el director de hidrocarburos demuestran ampliamente su mala fe. Sus declaraciones, ignorancia e incompetencia.

31 de enero de 2023

Irene Vélez ha mentido al país. La comparan con Karen Abudinen, siendo bastante peor el accionar de la señora Vélez, evidentemente doloso y falto a la verdad. A la señora Abudinen se le acusa de un detrimento patrimonial por un valor de 70 mil millones de pesos, lo cual no ha podido probarse, por lo que aún goza del beneficio de la duda, que en la Constitución está contemplado como el derecho a la presunción de inocencia.

Las faltas de Irene Vélez sí están probadas, pues sus bizarras intenciones en contra de la economía nacional son evidentes. La cifra de 70 mil millones de pesos del desfalco de Centros Poblados es ínfima si se compara con los billones de pesos que puede perder el país en caso de prosperar sus intenciones de prohibir la exploración y explotación de petróleo.

Irene Vélez no solo es ignorante de los temas propios de su cartera, sino también malintencionada. Una combinación peligrosa que puede acabar muy mal, con consecuencias legales para ella, pues la independencia de poderes aún existe en Colombia, a pesar de que un amplio sector de la extrema izquierda pretenda lo contrario.

La mala fe de Irene Vélez, experta en geopolítica y no en hidrocarburos, está sobradamente probada, quedando claro su propósito de acabar con la inversión y de generar una dependencia futura del petróleo de Venezuela. Esto, obviamente, favorece enormemente los intereses de Maduro y de su dictatorial régimen.

En su momento, se detectó aquí en Colombia qué desde Venezuela se utilizaron bots que convertían en tendencia a Petro cuando era candidato. ¿Será que están buscando cómo pagarle el favor? A lo mejor también su ayuda para las elecciones regionales.

El nombramiento de Vélez empieza a entenderse si se ve su gran experiencia en filosofía izquierdista y geopolítica. Todos pudimos ver varios videos en los que ella, cuando era profesora, llevaba a sus estudiantes a campamentos guerrilleros del ELN. Esa es información pública, a la que cualquiera puede acceder.

Es claro que Petro, para llegar a la Presidencia, fue bastante favorecido por países cómo Venezuela y Rusia, al igual que por personalidades como el papa Francisco, quien en un acto inusual, recibió con los brazos abiertos a un candidato presidencial, rompiendo claramente con la tradición del Vaticano de no inmiscuirse en procesos electorales. La geopolítica es muy importante, y eso Petro lo entiende bien.

Adicionalmente, la geopolítica toma particular relevancia ahora, porque además se ha podido evidenciar que dentro de los planes de la ideología de extrema izquierda está dominar el orden mundial, teniendo como una de sus metas a América Latina.

Petro, que quiere ser el líder de este movimiento latinoamericano, para su mala fortuna no genera confianza ni siquiera entre sus “aliados”, a quienes les parece un disparate abandonar la exploración de petróleo y el carbón. Lula ya se ha pronunciado sobre esto, al igual que otros de sus pares. El discurso de nuestro presidente no es confiable ni siquiera para ellos.

Hace mal Petro al querer acabar con la economía del país patrocinando informes mentirosos como el que publicó Irene Vélez, en el que miente flagrantemente sobre el límite de nuestras reservas de petróleo y gas. La no exploración y explotación nos conduciría a un escenario de pobreza, en muchos casos extrema.

Por decencia, si es que la tiene, Irene Vélez debería renunciar. En cualquier caso, contra ella proceden acciones de carácter administrativo, penal y disciplinario, que muy seguramente prosperen por la gravedad de los hechos. Eso Vélez también debería tenerlo en cuenta, pues en Colombia aún tenemos jueces, fiscales y procuradores.

Entre tanto, preocupémonos, porque pareciera que lo que la señora Vélez y compañía quieren es acabar con el país, implantar su ideología y tomarse el poder el mayor tiempo que les sea posible. Los hechos hasta ahora hablan por sí solos.

Nota final: las críticas a Irene Vélez no se han hecho porque ella sea mujer y que por su condición quiera hacérsele matoneo, como quieren disfrazarlo algunos en redes sociales. Es por ignorante, incompetente y mentirosa. Sobre eso tiene que haber, ante todo, claridad.