OPINIÓN
La soledad del hámster
Cuando le preguntaron si le molestaba no aparecer al lado del expresidente Uribe, Cadena respondió: “Hombre invisible, hombre invencible”.
A Javier Darío Restrepo.
La decisión se venía venir por comentarios privados y públicos de los abogados titulares del senador Álvaro Uribe. Diego Cadena, tan útil en algún momento, iba a ser desechado como un kleenex usado a las primeras de cambio. La primera afirmación en ese sentido apareció en la entrevista conjunta de los abogados Jaime Granados y Jaime Lombana a la revista SEMANA, publicada en agosto.
SEMANA: “¿Entonces la posición de ustedes es que cualquier conversación que hubiera podido tener el abogado de Uribe, Diego Cadena, con el señor Monsalve, es responsabilidad individual de Cadena y nada tiene que ver el expresidente?”.
Jaime Granados: “Sí, pero como no existen conversaciones de Uribe con ningún testigo que alegue que él lo manipuló, para darle piso a esa supuesta manipulación entonces recurren a las interceptaciones ilegales en las que aparece Uribe hablando con Cadena”.
Unos renglones antes Jaime Lombana, el otro abogado presentable, había dicho: “Y de cualquier forma, ¿qué tiene que ver Uribe con todo eso?”.
Desde luego, en el momento de dar estas declaraciones, los reconocidos abogados debían estar al tanto de la existencia de una grabación en la que expresamente el senador Uribe autoriza a Diego Cadena para ofrecer al testigo Monsalve la elaboración gratuita de un recurso de revisión a su condena.
–Pero presidente, yo tengo algo en mente pero quiero consultarlo con usted, y es un tema que me faculta para poder ayudar a este señor. Es una acción de revisión ante la corte porque el señor tiene una condena de 44 años por secuestro. Yo lo que puedo hacer es un re…
–Ah, sí, no… –interrumpe Uribe–, un recurso jurídico hay que adelantarlo...
–Claro… –asiente Cadena.
–El recurso jurídico está bien, por supuesto y la… y la ayuda para que le protejan la familia, pedírsela a las autoridades competentes y además públicamente –instruye el expresidente.
–Correcto, quería su autorización, presidente, para estar ciento por ciento claros –pide de manera expresa Cadena.
–Proceda, doctor Diego, que usted hace las cosas bien hechas.
En el expediente también hay pruebas de que Diego Cadena le informó al senador Uribe que le estaba prestando ayuda para “trámites judiciales” al paramilitar Carlos Enrique Vélez, citado a declarar en el proceso como testigo a favor del expresidente:
“Presidente, a ponerlo al día. Al señor Carlos Enrique Vélez cuando yo lo entrevisté inicialmente me dijo que si le podía ayudar con unos trámites judiciales porque es gente que es pobre. Yo le puse a uno de los abogados de la oficina, entonces él habla con frecuencia con él”.
Una conversación interceptada entre Cadena y Álvaro Rodríguez, fiscal ante los jueces especializados de Cali, demuestra que Cadena efectivamente hizo la gestión para que Vélez obtuviera beneficios jurídicos por la entrega de unas armas.
Doc, venga le cuento una cosa –empieza Cadena–. Hay un señor que me manda un mensaje, me dice que tiene una cooperación. Algo que él dejó en el pasado por allá escondido, son unas armas, dice que son varias, pero él quiere un beneficio por eso… doc, y es un señor que tiene su pasado. ¿Qué podríamos hacer para eso, doc? ¿Le cuadro una cita con él? Yo creo que no es perder el tiempo, es algo importante.
Bueno sí –responde el fiscal–, cuadremos una cita y miramos a ver.
Pero él está más encerrado que tigre de zoológico –aclara el abogado.
La investigación ha demostrado que Cadena, además, le efectuó pagos al paramilitar Carlos Enrique Vélez y a su antigua compañera de armas Eurídice Cortés, conocida bajo los alias de Diana y El Caimán.
Cadena no niega esos pagos, los llamó “subsidios” en su entrevista con La W. Antes los había llamado “auxilios humanitarios” con el mismo pretendido candor con el que ahora afirma que, cuando se definió como un “abogánster”, realmente quiso decir “abohámster”.
Antes de que Uribe entrara a rendir la indagatoria ante la Corte Suprema de Justicia, “la defensa” filtró a algunos medios que el expresidente Uribe estaba decidido a marcar distancia con Diego Cadena, como efectivamente lo hizo esa misma noche.
Quizás Cadena esté dispuesto a echarse toda la culpa.
Una frase de su entrevista quedará para la historia. Cuando le preguntaron si le molestaba no aparecer –como los abogados prominentes– al lado del expresidente Uribe, Cadena respondió: “Hombre invisible, hombre invencible”.
Evidentemente, la visibilidad lo metió en problemas.