OPINIÓN

Los boliburgueses

Aquellos ungidos por Chávez que siempre caen parados.

Fanny Kertzman
10 de enero de 2013

Bajo los arruyos de los millones de dólares que fluyen desde  ciertas áreas de Caracas a otras no tan enaltecidas, la corrupción, que ha sido endémica a las instituciones políticas venezolanas por décadas, está de pronto un poco subida de tono. Bajo el mandato del presidente Hugo Chávez, la corrupción en Venezuela ha llegado a nuevas dimensiones, desconocidas hasta ahora.

Chavez recibió un estado débil, hueco, cuando asumió la Presidencia en 1999. Pero durante los casi 13 años que Chávez ha estado en el poder, las instituciones democráticas que quedaban fueron desmanteladas. No hay separación de poderes públicos. Chávez controla la Asamblea Nacional (Congreso), la Corte Suprema, la Fiscalía General de la Nación, y el Concejo Nacional Electoral (CNE).
 
La destrucción de las instituciones gubernamentales  y judiciales causadas por la revolución bolivariana han facilitado la emergencia de organizaciones criminales a todos los niveles, adentro del gobierno de Hugo Chávez.

De hecho, la atención local e internacional está centrada en

-Construcción de fortunas personales a escalas nunca vistas antes en Venezuela. 

-Individuos que vivían en humildes casas de barrio y tenían modestos salarios hace solo 5 y 8 años, ahora tienen fortunas en los cientos de millones de dólares. Por ejemplo, el anterior ministro de la vivienda y obras públicas, hoy Presidente de la Asamblea, Diosdado Cabello, posee directamente o a través de intermedarios cerca de 2.000 millones de dólares. 

Diosdado Cabello, alias "Ojitos lindos", porque así lo bautizó Chávez en un "Aló Presidente", es un todo terreno con juego propio. Fue militar, es ingeniero y ocupó cargos varios: ministro de Interior y Justicia, de Obras Públicas y Vivienda, gobernador del estado de Miranda, y ahora preside la Asamblea Nacional. Los que lo conocen aseguran que es arrogante y vengativo, y que aquellos que quieren realizar un negocio con el Estado deben pasar antes por su despacho. Dicen que es multimillonario, que tiene mansiones en Europa y testaferros en varias empresas y bancos. Aunque él siempre negó estas historias, un cable de WikiLeaks divulgado por la revista Semana, lo presenta "como uno de los grandes polos de la corrupción del gobierno". En voz baja, lo llaman "El Padrino".

El hermano de Diosdado, José David Cabello, fue nombrado Ministro de la Infraestructura en julio de 2006. En Febrero 2008 paso a ser director del Seniat, el servicio de Impuestos y Aduanas. Tuvo una breve pausa como director de Conviasa de abril a junio de 2006. Hasta hoy es el director del Seniat. Todo el comercio de entrada y salida está en sus manos. Todos los impuestos, tasas, desacuerdos, pleitos, son manejados por el hermano de Diosdado.

Arné Chacon Escamillo es otro ejemplo. Es hermano de Jesse Chacón ministro ad infinitum de Chávez. Compró el 49 por ciento de Baninvest en 2004, en crédito extendido por el vendedor Pedro Torres Ciliberto  porque, bajo su propia administración decía que  estaba quebrado. Cinco años después, en junio 2009, Arne Chacón dice que tienen 1.000 millones de dólares en efectivo para comprar bancos y compañías de seguros. El único negocio que tenía Ricardo Fernández Barrueco en 1997 era un parqueadero en Caracas. Sin embargo al finalizar al final de 2005, KPMG certificó de que su fortuna ascendía a 1.600 millones de dólares.  

Las fuentes de las fortunas illícitas de estos grupos son numerosas: Gigantescos sobrecostos en los proyectos de infraestructura del gobierno,  importaciones de comida y otros bienes, otros servicios como seguros de salud y vehículo para los empleados del gobierno; coimas; serruchos; tasas de intermediación, operaciones en moneda dura y en instrumentos financieros oficiales; contrabando de armas; tráfico de drogas; extorsión; lavado de dinero y secuestros por rescate.  Esta riqueza se lava a través de negocios intensivos en el uso de efectivo como restaurantes, bares,  desarrollos urbanísticos, agencias de viajes, firmas de importación y exportación, casinos, etc. 

Un paso clavo es hacerse al control de las autoridades de inteligencia financiera, contrainteligencia y control de actividades financieras o  fiscales. 

Las entidades que aparentemente  ahora están controladas por personas involucradas en actividades criminales, corrupción y espionaje de ciudadanos privados incluye la división de inteligenciaa militar del ministerio de defensa, la policía política del Ministerio del interior y Justicia (DISIP), la superintendencia bancaria (Sudeban) y la autoridad en impuestos Seniat, entre otros. Los individuos que controlan estas entidades aseguran el avance de sus intereses a cualquier costos, manteniendo su exposición a un mínimo. Por ejemplo, Diosdado cerró docenas de emisoras de radio, para después abrir una licitación inventada por Chávez, creando unos medios amañados que no van a denunciar las maniobras de Diosdado.

Estos grupos crimininales organizados están interesados en que haya un ambiente inestable. Esto incluye promover el conflicto, el crimen, la inseguridad, iniciativas para silenciar a la prensa, intidimidar a los rivales políticos, expropiar activos privados y desestabilizar la población en general. El crimen organizado florece en ambientes inestables donde la ley es ignorada por el departamento judicial, el gobierno es corrupto y su vigilancia y control son inefectivos. 

Los individuos que manejan estos grupos de crimen organizado son tan poderosos que al interior de Venezuela se les conoce como los "intocables".

Aparentemente han neutralizado al Fiscal General de la Repúbica, toda la rama judicial incluyendo la Corte Suprema, la Asamblea Nacional, la DISIP y otros órganos investigativos como DGIM y CICPC (Policía). Tienen gran influencia dentro de las Fuerzas Armadas y la Guardia Nacional.                                                                                                                  

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