OPINIÓN

El reencauche de Pastas

Que Pastas, quien es una de las fichas de Bustos termine investigando al exfiscal Moreno, que siempre fue uno de sus protegidos, es como poner a los ratones a cuidar el queso.

María Jimena Duzán, María Jimena Duzán
26 de agosto de 2017

Ala Fiscalía de NHM le va a tocar hacer mucho más que compulsar copias a la comisión de absoluciones para desactivar la red de corrupción que presuntamente habrían orquestado exmagistrados, abogados y fiscales, bajo la batuta de Leonidas Bustos, su gran aliado y elector.

El reencauche del magistrado auxiliar de la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia Álvaro Pastas es una historia que muestra cómo el exmagistrado Bustos mueve sus fichas tras bambalinas.

Pastas fue el magistrado auxiliar que reemplazó al investigado estrella de la parapolítica, Iván Velázquez, cuando este presentó su renuncia irrevocable con el argumento poderoso de que las investigaciones de la parapolítica tenían cada vez menos apoyo por parte de la mayoría de los magistrados de la Sala Penal y que en esas condiciones era mejor renunciar.

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La salida de Iván Velázquez fue presionada por el magistrado Leonidas Bustos, como muchos periodistas lo denunciamos en su momento, cuando además advertimos que lo que se buscaba era acabar con los procesos de la parapolítica, cosa que efectivamente sucedió.

Pastas no duró mucho en ese cargo. Fue removido por la misma Corte Suprema de Justicia, por haber ‘refundido’ una grabación de una audiencia que él le había hecho a Macaco en Estados Unidos, y en la que este narcotraficante hablaba de toda la estructura de las autodefensas del Valle del Cauca y de los políticos con los cuales tenían relaciones.

Aunque la grabación apareció después, de la misma forma misteriosa en que desapareció, Pastas fue retirado del cargo, más por el empecinamiento de la magistrada María del Rosario González, que por la del propio Leonidas Bustos.

Al poco tiempo se supo que Álvaro Pastas de ser el magistrado investigador de la parapolítica había pasado a ser el abogado de la Gata, hecho que contrarió a muchos magistrados que sabían que Pastas adelantó varias investigaciones de políticos que tenían relación con la Gata. Ante la sorprendente flexibilidad ética de Pastas, la propia Corte Suprema de Justicia lo denunció por haber recibido presuntamente dinero para arreglar un negocio que él tenía en su despacho y que tenía que ver con la empresa Servimos, a la que se le señalaba de financiar políticos con dinero de los paramilitares.

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Entretanto, su protector, Leonidas Bustos, ya era presidente de la Corte Suprema de Justicia. Hizo muy buenas migas con el fiscal Montealegre y logró que este les concediera un cupo de puestos a todos los magistrados de la Sala Penal de la CSJ. Uno de los fiscales delegados ante la corte que fueron nombrados como cuota de Bustos fue Luis Raúl Acero.

El 16 de agosto de 2016, a los pocos días de haber llegado NHM a la Fiscalía, Acero archivó la investigación contra Álvaro Pastas. (Al poco tiempo Luis Raúl Acero fue nombrado por NHM como fiscal delegado ante el Tribunal de Cundinamarca. Martínez también nombró como fiscal ante la corte –lo han dicho varios medios- a Mabel Parra, quien fue magistrada auxiliar de Bustos y la que prospectó el fallo inhibitorio a favor de Germán Vargas Lleras por un caso de parapolítica que adelantó la CSJ. Su exesposo es el famoso Yayo, quien hasta hace poco trabajaba en la UTL del senador de Cambio Radical Germán Varón. Igualmente , NHM confirmó como fiscal ante la corte a Carlos Iván Mejía, otra ficha de Bustos).

Hace unos meses, el magistrado de la Corte Suprema de Justicia Luis Antonio Hernández nombró al cuestionado Álvaro Pastas como magistrado auxiliar, con la anuencia de Leonidas Bustos, quien al principio se opuso al nombramiento, pero después le dio el visto bueno.

Para cerrar este círculo pérfido: ahora se sabe que el magistrado Hernández, que trabaja con Pastas, es el designado por la Sala Penal de la corte para que examine las presuntas irregularidades del exfiscal Gustavo Moreno en los procesos que adelantó ante la corte.

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No sobra recordar que Moreno también fue una ficha de Bustos que NHM heredó de Montealegre, y que luego él ascendió al puesto de jefe de la Unidad Anticorrupción. Que Pastas, quien es una de las fichas de Bustos, termine investigando al exfiscal Moreno, que siempre fue otro de sus protegidos, es como poner a los ratones a cuidar el queso.

Por lo demás, la relación entre Pastas y Bustos está atravesada por casos espinosos como el de Habib Merheg, proceso que estuvo dormido más de siete años en la CSJ, hasta que finalmente se falló en su contra cuando convenientemente Merheg estaba ya fuera del país. ¿Por qué durmieron ese proceso? ¿Hubo plata de por medio? ¿Será que nos va a tocar que la DEA intervenga para saber hasta dónde llegan los tentáculos de Leonidas Bustos?
No crean que la cabeza del monstruo de la corrupción ha sido cortada por una compulsa de copias a una comisión que nunca ha investigado nada. El monstruo todavía goza de muy buena salud.