El Bitcoin y Nvidia, dos burbujas no tan distintas

“Una gran mentira repetida mil veces se convierte en verdad”.

Esta frase, que Joseph Goebbels, arquitecto de la propaganda nazi, empleó para definir su estrategia de comunicación, aplica para los mercados financieros.

En este mundo, disfrazar la verdad ha sido una práctica recurrente para definir precios de acciones y las burbujas financieras son ejemplos de que una mentira puede ser tratada como una verdad a ciegas.

Netflix, Amazon, Nvidia o Apple se nos presentan como modelos de negocios invencibles. Son monopolios tecnológicos con economía de escala que crean ventajas competitivas naturales, patentes con el estado del arte de la tecnología y, lo que es mejor, sus retornos son impresionantes. Una persona que invirtió US$1.000 en Nvidia, en 2014, tendría en este momento US$948.000.

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¿Es su crecimiento una burbuja?

Vamos al caso de Nvidia. Tiene sentido comprar acciones de esta empresa porque es una de las fabricantes de procesadores más avanzados del mercado. Estos son usados en las tarjetas gráficas de los computadores que muchos tenemos en nuestros hogares.

Además, los procesos de inteligencia artificial los necesitan, al igual que los dispositivos de reconocimiento facial. Con la llegada de la criptomonedas y la minería de datos, la demanda de esta tecnología se disparó.

A comienzos de 2018, los inversionistas apostaban por las acciones de Nvidia, Amazon y Netflix porque tenían más valor y demanda, lo cual hizo que su precio se disparara.

Sin duda, estos títulos entraron en la dinámica de una burbuja financiera, la cual comenzó con la retroalimentación positiva, que hizo inestables los precios y dejó ganancias super exponenciales. Una señal de que al menos Nvidia entró en esta dinámica es la caída de su título en la jornada del viernes pasado, en la que registró un descenso del 19%.

El ocaso del Bitcoin

En diciembre del 2017, advertimos que Bitcoin era una burbuja financiera a punto de estallar,  de alguna manera su precio se está comportando como un indicador líder de los espíritus animales descritos por Adam Smith, traspasado su ola de pánico y euforia a las demás acciones de tecnología. Esto nos ha dejado un desbalance, como lo muestra la siguiente gráfica.

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Máximas caídas del precio del Bitcoin desde 2011. Fuente: Coinbase.

Nuestro análisis indica que la criptomoneda atravesaría una última gran caída. La gráfica indica que cada traspié puede significar un 80% de pérdida de valor, lo que la podría empujar su precio por debajo de los US$4.000, hoy está en US$5.535.

Sin embargo, a pesar de la caída de los precios, los fraudes alrededor de varias criptomonedas y las declaraciones en su contra por parte de analistas tan respetados como Nouriel Roubini, no olvidemos la verdad que encierra el Bitcoin: se trata del primer experimento para crear una nueva versión de la democracia y de los activos financieros.

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