CLAUDIA VARELA
Crisis de amor
La vida es como es. Nada es casualidad, las cosas pasan porque de una u otra forma deben pasarnos. A veces pensamos que estamos en algún sitio por una casualidad del destino o lo que es más egocéntrico aún, porque decidimos que así era, pero no es así. En cada entorno que estamos presentes tenemos una responsabilidad de hacer algo para devolver al Universo todo lo que nos da.
No sé si los años me vuelven más consciente, más observadora o simplemente más madura y por tanto hay comentarios que me aburren profundamente. No entiendo cómo algunos todavía piensan que son intocables y que nunca podrán salir de una Organización. También hay otros que piensan que su pareja nunca los dejará, esos niveles de amor por algo son lindos, pero la sobreconfianza que raya en la arrogancia demente me hacen reír.
Claro que pueden un día sacarte de cualquier empresa. Claro que tu pareja un día puede aburrirse o incluso aburrirte a ti. No es que quiera ser dramática porque es algo que definitivamente no va con mi perfil optimista, pero está claro que hay que conocer los límites y el mundo es finito.
Tu existencia, tu posición en una empresa, tu juventud, tus hijos, tus mascotas y quizás tu pareja. Si tenemos conciencia plena de que la vida son sucesos y emociones que pasan por una serie de eventos encadenados, podemos entender mejor cuando nos pasan aquellas cosas que sentimos como sorpresivas.
Hay que dejar de juzgar a los demás por lo que hacen o no. Los juicios solo ocurren en las mentes propias y por tanto no son absolutos. Es decir, lo que para mí puede ser una forma de vivir es impensable para otras mentes más conservadoras y clásicas. ¿Tiene alguno el derecho de decir que tiene la verdad revelada?
Nos tiene realmente muy mal parados no querer entender puntos de vista diferentes. Pero es que me he dado cuenta de que es muy complejo escuchar a los demás en el día a día. Hay un personaje en una de mis redes sociales que se dedica a hablar mal de Claudia López, por ejemplo, parece que buscara historias odiosas y hasta se mete en su vida personal. Yo no entiendo al señor qué le pasa. ¿Será que si a Claudia le va mal le va bien a él? Vivimos en la misma ciudad que se está comiendo la cultura de solo yo importo y la falta de pensamiento social responsable. Pero creo que si ella se equivoca él se gana un like así que es mejor incrementar el rencor que vivir en la buena onda.
Las organizaciones están llenas de humanos, imperfectos, horribles, egocéntricos. Obvio también me sumo a la lista. La cuestión es que esperamos cosas del sistema que ni siquiera nosotros mismos damos.
He visto personajes corporativos que no dicen lo que piensan delante del involucrado, otros que quieren acabar con cualquiera que les genere competencia, otros que son mentirosos compulsivos y otros que se agarran de su puesto con pies, manos, garras y se llevan por delante al que toque para proteger su status quo.
He visto también otros que navegan el mundo empresarial a partir del trabajo honesto, los resultados, decir las cosas de frente. Pero esos son menos ya que es más fácil en esta sociedad ser malo que bueno. Recibir prebendas en mas sencillo que decir que no.
Quiero entender por qué es tan complejo ir por el buen camino. Torcerse siempre parece una opción más fácil. La inconsistencia nos está acabando. Algunos pelean por sus derechos, pero no respetan los derechos de los demás.
Hace unos años escuché a alguien de un nivel realmente superior de inteligencia una frase que me pareció muy humana “no sé si pueda perdonar”. Entendí que la inteligencia no tiene nada que ver con el corazón, nada tiene que ver con la empatía, quizás cuando se es sobresaliente se tiene una mayor responsabilidad de entender mentes más débiles.
Un buen líder escucha, un buen ser humano pasa la página y olvida por que el karma existe y no somos nadie para juzgar y hacer justicia por nuestras manos. ¿crisis de izquierda o de derecha? ¡Crisis de amor e inconsistencia!