PABLO LONDOÑO
Empleo: Elemental mi querido Watson
Parece ciencia ficción pero no lo es. La fuerza y rapidez con que se está implementando la inteligencia artificial está a tono con nuestros tiempos. La semana pasada se lanzó en los medios con gran fuerza el proyecto a través del cual la fundación Santa Fe se pone a tono con las nuevas tecnologías.
Watson for Oncology es un sistema de inteligencia artificial en la nube que brinda soporte médico a 11 tipos de cáncer, entre ellos a los de mayor incidencia en Colombia: seno, tiroides, próstata y gastro (y otros como pulmón, colon, recto, cervical, ovario, vejiga, hígado, tiroides).
En un país en donde se presentan 72.000 pacientes nuevos con cáncer cada año y existen solo 200 especialistas en el tema, es decir un oncólogo para cada 360 casos nuevos, la capacidad de estos para mantenerse al día con todos los estudios y avances es prácticamente nula.
Lo que hace Watson es clasificar las opciones de tratamiento, vincular estudios que han sido investigados y filtrados en 13 países en el mundo y poner toda esta literatura médica para que el Oncólogo considere tratamientos alternativos que están ligados a la ficha médica del paciente. Son más de 15‘000.000 de páginas de texto puestos a disposición del profesional de la salud para que este, y no la máquina, complemente su conocimiento y practique de mejor manera su profesión.
Watson no reemplaza al médico, lo apoya. Las decisiones siempre estarán en cabeza del experto, pero implica que este no solo esté alfabetizado en la tecnología sino además acostumbrado a manejarla. Este es uno de los innumerables casos en que la inteligencia artificial está transformando el mundo, en unos casos para apoyarlo, en otros, desafortunadamente, para reemplazarlo.
Estudios serios predicen que la inteligencia artificial, bien sea en forma de robot o simplemente de software eliminará, solo en los Estados Unidos, el 6% de los empleos. No son necesariamente actividades operativas. Los famosos Bots (software diseñado para hacer tareas por su cuenta y aprender de ellas) ya está presente en una gran cantidad de tareas y usted todavía no se ha enterado.
Visite: YoTambién y el acoso laboral en Colombia
Son capaces ya, de simular una conversación, asumiendo de esta manera actividades infinitas de servicio al cliente como hacer una reserva de avión o en un restaurante. Taco Bell por ejemplo, tiene un Bot diseñado para gestionar sus pedidos de comida. Facebook lo utiliza en su plataforma de messanger, Twitter para enviar mensajes estructurados (por ejemplo cuando hay amenaza de terremoto). Microsoft, Slack y Google tienen recursos importantes dirigidos a la creación de Bots a la venta.
Los especialistas dicen que hay oficios sentenciados. Los contact center por ejemplo serán en un alto porcentaje reemplazados por Inteligencia Artificial. Ya en economías desarrolladas profesiones como la de contador, incluso la de abogado, tienen su mayor competencia en una máquina.
Las tareas analíticas, sobre todo aquellas que hoy implican recolección de información y análisis de esta, tienen en la inteligencia artificial a un gestor más veloz, más capaz y más barato.
En Japón Fukoku reemplazó a 30 de sus representantes de venta de seguros por Watson; Foxconn en China reemplazo 60.000 obreros de sus plantas industriales por robots y Associated Press lo usa para escribir informes trimestrales de ingresos que antes hacían periodistas. Deloitte estima que 39% de los empleos del sector judicial podrían automatizarse en los próximos 10 años (¿será la solución de nuestro sistema judicial?).
Cajeros, analistas financieros, obreros de la construcción (el albañil automatizado pone hasta 1.200 ladrillos por día), jefes de inventario, trabajadores agrícolas, choferes de taxi, obreros industriales, o periodistas, tienen muchos parte de su trabajo amenazado.
Esta realidad, porque es una realidad, crecerá en la medida en que políticas gubernamentales pongan freno a la inmigración que es hoy la que hace trabajo operativo, y en la medida en que economías con población envejecida necesiten a sus jóvenes en oficios creativos dándole el espacio de las tareas repetitivas a una tecnología que cada día será más económica.
Recomendado: Colombia busca capitán
El panorama suena aterrador, pero podría no serlo. Grandes líderes del mundo hoy estudian mecanismos para reducir la jornada laboral y garantizar un ingreso mínimo que genere independencia y vuelque al ser humano al manejo de oficios relacionales, creativos y de emprendimiento apalancados en la tecnología.
Lo relevante de cara al futuro de países como el nuestro es que existan políticas de estado que de un lado alfabeticen a toda la población en el uso de las nuevas tecnologías y de otro destinen recursos importantes no solo al fortalecimiento de las profesiones que demandará la nueva economía (Colombia está muy quedada) sino que además estimule el emprendimiento y la exportación de servicios de este tipo.