EMPRENDIMIENTO

¿Cuándo debo conseguir capital semilla?

Conozca las mejores tecnologías que existen en el mundo para facilitar la tarea de crear su propia startup. Allí están Design Thinking, Lean startup, Disciplined Entrepreneurship y Canvas, entre otras. Haga este recorrido con Mayra Roa, experta en emprendimiento. Ella lo guiará por los 50 pasos para emprender con éxito. En esta entrega, el paso 42.

Mayra Roa, Mayra Roa
27 de enero de 2020

RECUERDO UNA VEZ que un emprendedor se me acercó en un taller y me pedía que le ayudara a conseguir ‘Capital Semilla’ para su compañía. Lo primero que le pregunté fue si había cumplido la ‘Hipótesis de Valor’ y la ‘Hipótesis de Crecimiento’; como respuesta me entregó un reporte. Este reporte demostraba que, efectivamente, con éxito, las había aprobado. Luego le pregunté por sus proyecciones actualizadas y su modelo Canvas u otra herramienta que me permitiera conocer su negocio rápidamente. Fue grata mi sorpresa al darme cuenta de que no solo este emprendedor tenía muy bien estructurada su compañía, sino que, además, los resultados en ventas mostraban un crecimiento interesante; tenía toda la capacidad para conseguir ‘Capital Semilla’.

De pronto me quedé mirando su ‘Estado de Flujo de Caja’ en las proyecciones y me llamó la atención que en la parte de ‘Actividades de Financiación’ (donde sale el dinero que se está buscando) no aparecía ningún monto y que todos los ‘Flujos Finales’ eran positivos. En ese instante le pregunté por qué quería conseguir ‘Capital Semilla’; su repuesta me sorprendió y entendí lo que estaba viendo. El emprendedor me dijo que todo el mundo le decía que debía conseguir ‘Capital Semilla’, que ese era el siguiente paso que debía tomar. ¡Que equivocadas estaban esas personas! Los emprendedores deben conseguir ‘Capital Semilla’ cuando el ‘Flujo de Caja’ lo necesita. Eso significa que el ‘Flujo Final’ en el ‘Estado de Flujo Caja’ en las proyecciones sale negativo, de otra manera, no lo necesitan. Hay que recordar que la compañía ya está en operaciones y las proyecciones están mostrando la capacidad de autofinanciarse (teniendo en cuenta todos los planes a futuro de la visión del emprendedor).

FLUJO DE CAJA

Aprendamos a manejar mejor que nadie nuestro ‘Estado de Flujo  de Caja’. Como mencionábamos en el Paso 33, este es el estado más importante dentro de las proyecciones mientras estamos emprendiendo. Asegurémonos que siempre el ‘Flujo Final’ esté positivo y si no es así, entonces ahí sí, consigamos financiación.

Una alarma rápida no relacionada con conseguir financiación que puede estar ocasionando estragos en nuestro ‘Estado de Flujo de Caja’ es qué tanto crédito damos a los clientes versus qué tanto crédito recibimos de los proveedores. Normalmente cuando damos en días mucho más crédito a los  clientes de aquellos que recibimos de los proveedores, la compañía tiende a tener graves problemas de caja (los clientes no pagan rápidamente y por el otro lado los proveedores están cobrando rápidamente, una situación mortal). Si estamos viviendo esta situación, una forma de resolverlo, antes de buscar inversionistas, es haciendo factoring (cedemos a una institución de factoring las cuentas de crédito  que tenemos por cobrarle a nuestros clientes y la institución de factoring nos da el dinero inmediatamente menos un interés o comisión por adelantar el dinero, ayudándonos a alinear el crédito que damos a los clientes con el plazo que tenemos para pagarle a proveedores).

Si ya trataste todo para mejorar tu ‘Estado de Flujo de Caja’ y este sigue presentando números negativos, entonces llegó el momento de conseguir más financiación.

CAPITAL SEMILLA

La siguiente etapa de financiación es efectivamente ‘Capital Semilla’ o Seed Capital (el nombre da la sensación de que es con lo que inicia un startup, pero cada vez los requerimientos son más exigentes, haciendo que esté lejos de ser la semilla de algo, pero ese es el nombre). La diferencia entre Pre-Seed (‘Pre-Semilla’), la anterior forma de financiación, y ‘Capital Semilla’ es que el monto tiende a ser más alto, hay menos riesgo para los inversionistas y estos tienden a exigir ventas relativamente estables.

INVERSIONISTAS

Los inversionistas en ‘Capital Semilla’ tienden a ser de 8 tipos:

  1. Inversionistas ángeles: individuos adinerados dispuestos a invertir en etapas muy tempranas de un startup.
  2. Fondos de capital de riesgo o venture capitalist de ‘Capital Semilla’: que son un grupo de inversionistas que se especializan en dar dinero a startups de alto riesgo para tener alto retorno.
  3. Incubadoras: empresas que ofrecen asistencia a los emprendedores como oficinas, entrenamiento y consejo; en algunos pocos casos también dan financiación.
  4. Aceleradoras: compañías que dan mentoría y capital a cambio de acciones en el startup.
  5. Convocatorias de apoyo al emprendimiento: tanto privadas como públicas, las cuales no exigen que el dinero sea pagado de vuelta.
  6. Crowdfunding: son plataformas que ponen en contacto personas que quieren hacer donaciones económicas o potenciales inversionistas con varios startups.
  7. Bancos Comerciales: cada vez están incursionando más en otorgar préstamos para apoyar a startups.
  8. Compañías de Fintech: ofrecen micro créditos y formas de financiación alternativas.

VEHÍCULOS

Los vehículos pueden ser acciones o notas convertibles como en Pre-Seed. También pueden ser préstamos en el caso de bancos comerciales y compañías de Fintech, como Bankamoda, quienes dan financiación alternativa a startups de moda.

REQUERIMIENTOS

En la medida en que avanzamos en tipos de financiación, el tema se vuelve más sofisticado y por lo tanto con mayores requerimientos. En esta ocasión nos daremos cuenta de que los inversionistas empiezan a prestarle mucha atención a nuestra estructura financiera y resultados actuales. Estas son algunas cosas que preguntarán y que deberemos estar preparados a responder:

  1. Ingresos anuales y mensuales (según contabilidad).
  2. Ventas anuales y mensuales (según contabilidad).
  3. ‘Costos Variables’ (según contabilidad).
  4. ‘Margen Bruto’ (según contabilidad).
  5. Utilidad anual y mensual (según contabilidad).
  6. Cuánto se espera vender este año (según proyecciones).
  7. Para qué se necesita la inversión (según proyecciones).
  8. Cuánto dinero se necesita.
  9. Qué se está dispuesto a dar.

Este último requerimiento es especialmente importante porque, con la respuesta, los inversionistas medirán qué tan lógica es la propuesta para ellos. Una compañía que pide $100 millones por un 10% de sus acciones está asumiendo que vale $1.000 millones ($100 millones/10%). Si la compañía en los dos últimos 2 años ha vendido $10 millones y $30 millones de pesos al año respectivamente, de verdad, ¿creemos que puede valer $1.000 millones de pesos?

Lo más seguro es que no (los valdría si tuviera una cifra extraordinaria en usuarios o un producto o servicio muy difícil de replicar, algo jamás visto y con mucho potencial).

Algunos inversionistas hasta se atreverán a decir que prefieren coger esos $900 millones (que es lo que vale el esfuerzo hecho por el emprendedor, $1.000 millones- $100 millones) y montar una nueva compañía, que lo más seguro es que venda mucho más que $30 millones.

VALORACIÓN

La pregunta del millón sigue siendo entonces ¿cuánto vale nuestro startup si vende $30 millones de pesos al año?

Hay muchas formas de valorar una compañía, pero la metodología que más se está utilizando es múltiplos de Ebitda. Esta metodología entrega el valor de una compañía con la siguiente fórmula:

Ebitda en inglés es earnings before interest, taxes, depreciation and amortization (en español sería la ganancia antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización). Se entiende como el número que muestra lo que la compañía puede generar en un año (ingresos menos los ‘Costos y Gastos’ que no son mencionados en las siglas de Ebitda).

Para startups el múltiplo usual es entre 3 y 5; siendo 3 para compañías que tienden a tener buenas ventas y 5 cuando el producto es extremadamente revolucionario.

Así que si vendemos $30 millones y asumimos que el Ebitda es de $20 millones, estaríamos hablando que la valoración está entre $60 millones ($20 millones X 3) y $100 millones ($20 millones X 5). Puede ser que un inversionista termine dándole al emprendedor los $100 millones que pedía al inicio, si se enamora desquiciadamente de lo que va a hacer el emprendedor con el dinero, pero va a pedir por lo menos el 50% de la compañía. Así que volvamos a la idea básica del inicio, ¿de verdad necesitas este capital?

Igual recordemos que si utilizamos la nota convertible nos podemos ahorrar el dolor de valorar la compañía hoy, pero el inversionista debe quedar satisfecho con el descuento que le das en la siguiente ronda y/o valuation cap, cuando sea valorada la compañía.

Noticias Destacadas