¿Cómo incentivar el empleo femenino en Colombia? Un desafío que no da espera

La crisis económica y social acelerada en Colombia por la covid-19 tiene rostro de mujer: su tasa de desempleo aumentó en 12,6 puntos porcentuales versus 7,6 para los hombres. Así mismo, la proporción de mujeres inactivas aumentó en 8,3 puntos porcentuales en comparación con 5,2 para los hombres.

Estos efectos diferenciales entre hombres y mujeres se explican por dos razones principales: 1) las mujeres están empleadas en mayor proporción en sectores y ocupaciones como comercio, educación, salud, actividades artísticas, servicio doméstico, hoteles y restaurantes, los cuales han sido los más afectados por los cierres y 2) la cuarentena y el cierre de los colegios generó un aumento en las tareas del hogar y cuidado de los menores al interior de los hogares, responsabilidad que en culturas como la nuestra recae principalmente en las mujeres, afectando sus posibilidades de realizar actividades productivas.

Lea también:Discusión de reforma tributaria se iniciaría en primer trimestre de 2021

Lo anterior exige el diseño de políticas efectivas con enfoque diferencial de género que mitiguen el aumento del desempleo femenino y especialmente en aquellos colectivos más afectados por la crisis: mujeres jóvenes, en zonas rurales, en condición de vulnerabilidad económica, madres cabeza de familia, entre otras. Estas políticas deben ser integrales e incentivar el empleo tanto por el lado de la demanda como de la oferta laboral. A continuación, se describen algunas ideas de políticas públicas que pueden ser parte de la solución.

Por el lado de la demanda de trabajo, es necesario que el Gobierno Nacional apoye con incentivos económicos la reactivación de los sectores afectados que mayor proporción de mujeres emplea en el país, y no solamente a los sectores “masculinizados” como el transporte y la construcción. Otra de las medidas a implementar por parte del Gobierno, debería ser realizar inversiones en proyectos de infraestructura social que contribuyan a mejorar el bienestar de la población al tiempo que reactivan el empleo.

En cuanto a la oferta laboral, es necesario crear centros de cuidado infantil de alta calidad y localizados en lugares estratégicos de las ciudades, de manera que las mujeres con hijos tengan donde dejarlos para desempeñar las actividades productivas, académicas o ambas. Asimismo, es importante promover un cambio cultural que derribe estereotipos de género y promueva una distribución más equitativa en las labores del cuidado al interior de los hogares. Para ellos, es clave por ejemplo permitir que la licencia por nacimiento de hijos sea tomada por la madre o el padre en igualdad de condiciones. 

Finalmente, es importante masificar el acceso a internet y dispositivos tecnológicos en los hogares con más restricciones, pues así se incrementan las posibilidades, especialmente en la coyuntura actual y seguro después de ella, de conseguir un empleo o desarrollar en general actividades productivas, incluso desde casa. Además, permite conocer y aplicar a las ofertas de trabajo existentes, ofertas que por ley en Colombia deben ser de conocimiento público y que en su gran mayoría se acceden a ellas por medio de páginas web.

Le puede interesar:Unos 34 millones de empleos se perdieron en Latinoamérica con la covid

Sin embargo, no basta con que se provea el acceso a estas herramientas, sino que también es necesario capacitar a las mujeres en habilidades digitales, competencias que son cada vez más requeridas en el mercado laboral, y que seguramente lo serán aún más, dados los avances tecnológicos y de automatización que está impulsando la pandemia. Los sectores y carreras de ciencia y tecnología son dominados por hombres en Colombia y es necesario atraer a más mujeres a estos. Para ello es clave otorgar becas y generar alianzas con programas de formación para el trabajo e instituciones técnicas y tecnológicas para ofrecer programas virtuales de alta calidad, alineados con las necesidades del sector productivo.