¿La quimioterapia es igual de fuerte en las mascotas? Aquí el ABC de este tratamiento

 ¿Qué es quimioterapia?

Es el uso de fármacos que atacan las células cancerígenas, evitando que crezcan y se multipliquen. Dependiendo del tipo de cáncer y del estado del animal, el médico veterinario escogerá un protocolo que puede incluir uno o varios medicamentos, retiro del tumor antes o después de las sesiones de quimioterapia y, en algunos casos, radioterapia. 

¿Sí o no a la quimioterapia?

Muchas personas, al saber que su perro tiene cáncer se rehúsan a la idea de aplicarles este tratamiento, porque piensan que se va a ver afectada su calidad de vida y que el animal va a sufrir exageradamente; sin embargo, hay que tener claro que la meta de la quimioterapia en medicina veterinaria es diferente a la de la medicina humana. ¿Cuál es el propósito principal? Tratar el cáncer pero no a expensas de la calidad de vida del animal. Si el perro comienza a presentar efectos secundarios a la medicación, el protocolo se debe modificar cambiando el medicamento o disminuyendo la dosis y, en casos extremos, se suspenderá el tratamiento. Cabe resaltar que los perros y gatos toleran la quimioterapia mucho mejor que las personas. 

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¿Y en que consiste la quimioterapia en animales?

Generalmente se realiza vía intravenosa, pero puede inyectarse vía subcutánea (debajo de la piel), algunas se dan de manera oral en la clínica o en casa, dependiendo del medicamento que se esté utilizando. El costo de una quimioterapia va a depender del tamaño del animal y de los fármacos, pero puede oscilar entre los 100.000 y los 200.000 pesos por sesión.  

Antes de cada sesión, entre el veterinario y el propietario deben discutir y evaluar qué tan comprometida está la calidad de vida y qué tan buenos resultados contra el cáncer está teniendo la quimioterapia. Según esto, se decide continuar o no. Si el tratamiento se va a realizar vía intravenosa, el animal debe ser llevado a la clínica una o dos veces por semana; además, el médico veterinario debe hacer un examen clínico completo, control de peso, revisar el tamaño del tumor (si lo hay) y asegurarse de que no existan masas nuevas. La sesión puede durar entre 30 minutos y una hora, dependiendo del medicamento que se utilice; luego, el perro podrá ir a su casa, es decir, es un procedimiento ambulatorio, ideal para que el paciente tenga una vida lo más normal posible. 

En la mayoría de perros la quimioterapia se realiza sin sedación, pero con algunos gatos puede llegar a ser necesaria. Es común que se tomen exámenes de sangre cada semana para evaluar los órganos internos (hígado o riñón) al igual que un cuadro hemático para saber cómo están los niveles de glóbulos rojos o las células de defensa, que en ocasiones, luego de las sesiones de quimioterapia, pueden disminuirse y causan anemia, defensas bajas, diarrea, orina con sangre, etc. Si los exámenes salen alterados debe dejarse descansar al animal y esperar que esos valores mejoren para hacer la siguiente sesión. 

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¿Qué le puede pasar a mi perro tras las sesiones de quimioterapia?

Algunos perros terminan el tratamiento sin presentar efectos secundarios; sin embargo, algunos pacientes muy sensibles pueden llegar a tener problemas gastrointestinales (vómito, diarrea y/o pérdida del apetito). Por lo general, estos son reversibles, tienden a aparecer de 3 a 5 días después de la quimioterapia y se solucionan en 1 o 2 días. En esos casos se pueden dar medicamentos en casa para evitar complicaciones. 

La pérdida de pelo en los animales de compañía es poco frecuente. Los gatos pueden perder sus bigotes y presentar una disminución de la cantidad de pelo en el cuerpo, en especial los de pelaje largo. 

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Recomendaciones 

Si tiene una mascota que se encuentra en quimioterapia no hay necesidad de cambiar su estilo de vida, es decir, puede seguir con sus rutinas diarias, dormir con su amo, estar con otros animales, etc. Todo sigue igual; sin embargo, hay que tomar algunas precauciones: 

1. Evitar el contacto directo (usar guantes) con el vómito, la orina y las heces de su mascota durante 72 horas posteriores a la quimio. Los perros en tratamiento deben orinar en sitios poco concurridos, evitando parques infantiles o sitios de picnic. Personas inmunosuprimidas y mujeres embarazadas o en tratamientos de fertilidad deben evitar el contacto con estas sustancias. Si el animal llegase a orinar o a defecar dentro de la casa, esta se debe desinfectar muy bien utilizando guantes.
2. Siempre que suministre quimioterapéuticos orales en casa debe utilizar guantes y lavarse muy bien las manos luego de la administración. Nunca parta la pastilla o abra las capsulas, ya que se liberan gases al ambiente que pueden afectar la salud de personas.
3. Acudir a terapias alternativas como las esencias florales, la musicoterapia y la aromaterapia para crear un ambiente más amigable que ayude a tu perro a relajarse durante el procedimiento. 

¡Pilas!

Siempre que observen o sientan una masa en su animal deben consultar al médico veterinario lo antes posible, no importa si el animal es joven o se encuentra muy bien de ánimo, el cáncer puede llegar a ser una enfermedad silenciosa en sus inicios. 

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