¿Qué es la terapia neural en perros y cuándo se recomienda?
La terapia neural en perros es un tratamiento que resulta efectivo para cierto tipo de padecimientos. Aquí te contamos todo lo que necesitas saber al respecto.
Para poder entender de qué se trata la terapia neural, debemos imaginarnos el cuerpo de un animal como una red de conexiones nerviosas que hace posible que una molestia en un lugar específico pueda generar otra a distancia. Por ejemplo, después de una cirugía abdominal, a veces se observan problemas de rodilla o cadera.
Desde el punto de vista de la medicina convencional esto no tendría tanto sentido; sin embargo, la terapia neural comprende el cuerpo como un todo. Busca equilibrar y darle las herramientas al organismo para que sane. Por lo tanto, cualquier irritación sobre esa red nerviosa (cicatrices, infecciones, intervenciones quirúrgicas, estrés emocional, etc.) generará síntomas diversos en cualquier parte.
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Pero ¿qué es exactamente?
La terapia neural es una herramienta o práctica médica que consiste en inyectar un anestésico local en diferentes partes del cuerpo, según el tipo de enfermedad.
En teoría, es el mismo método que se utiliza en humanos. No obstante, en la práctica las cosas cambian. Hay perros que toleran mejor el dolor y permanecen tranquilos; pero hay otros muy inquietos. Dependiendo del sitio donde se va a realizar la inyección, el tipo de paciente (animales muy nerviosos o agresivos), la cantidad de puntos que se quieren hacer e incluso la profundidad, se podría considerar la sedación como una alternativa válida para poner en marcha el procedimiento.
Se puede inyectar la procaína en la piel de manera superficial cerca de la zona del dolor o alrededor de cicatrices; algunos puntos son más profundos, pero por lo general se trabaja con aquellos que son superficiales que incomodan menos al animal. Las terapias se pueden hacer en casa cada 8, 15 o 20 días según la evolución del paciente.
Las ventajas de la terapia neural es que cada sesión es corta, no genera un estrés significativo para el perro, los costos no son muy altos y se puede utilizar en animales de todas las edades. Ya que solo se conseguirá el efecto deseado si se aplica el anestésico local en los puntos donde haya irritación o bien en los puntos específicos que tengan una relación directa con la enfermedad, cabe puntualizar que la terapia debe realizarla siempre un médico veterinario experto en el tema.
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¿En qué casos se recomienda?
Podría considerarse como una terapia alternativa ya que no está catalogada dentro de los tratamientos de medicina convencional; en veterinaria su uso no es muy conocido por los dueños de mascotas, por lo que su uso en Colombia todavía no es muy popular. Los pacientes que son remitidos a las terapias alternativas son por lo general de edad avanzada y que ya han probado varios tratamientos sin tener resultados. También puede llegar a ser útil en casos terminales; cuando ya no hay mucho por hacer, los propietarios acuden a otro tipo de alternativas curativas.
Los motivos de consulta más frecuentes para la terapia neural son dolores articulares y musculares, displasia de cadera y/o problemas neurológicos. No obstante, sus usos van más allá: sirve en casos de problemas respiratorios, de la piel, infecciones que no mejoran fácilmente, ansiedad y depresión por citar solo algunos.
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La terapia neural no es la “panacea”. Como todo, tiene sus limitaciones, pero es una opción disponible para los animales que se puede utilizar al mismo tiempo con otro tipo de tratamientos sin ningún problema. No olvides que no todos los tratamientos sirven para todos los casos; es cuestión de probar y quedarse con el método que garantice la mayor salud del paciente.