Política
Alcalde de Barranquilla llegó hasta la Casa de Nariño preocupado por los Juegos Panamericanos: “En el cambio de Gobierno hemos flaqueado”
Jaime Pumarejo indicó que las próximas tres semanas serán vitales para que Colombia continúe con los Juegos.
Una profunda preocupación tiene el alcalde de Barranquilla, Jaime Pumarejo, por el futuro de los Juegos Panamericanos, sentimiento que lo obligó a llegar hasta la Casa de Nariño para hablar de ese tema con el presidente Gustavo Petro en el centro de Bogotá.
Pumarejo advirtió que con el cambio de Gobierno se ha “flaqueado” en compromisos adquiridos para adelantar las justas en el Caribe colombiano; el mandatario municipal indicó que el presidente Gustavo Petro ha señalado que honrará el compromiso con la organización.
“Pero al mismo tiempo, en este ínterin de cambio de Gobierno, hemos –digamos– flaqueado en algunos de los compromisos que se tenían que cumplir con la organización de Panam”, sostuvo Pumarejo.
También indicó: “En este momento, luego de que el Gobierno manifestara que quiera hacer los Juegos, el presidente Petro mandara la inequívoca razón de que va a honrar el compromiso y quieren honrar el compromiso a los deportistas”.
“Estamos ahora contra el tiempo, asegurándonos que se puedan cumplir esos compromisos. Esos compromisos son, por ejemplo, la conformación del comité organizador. Esos compromisos son, por ejemplo, también el pago de los derechos deportivos y televisivos para que los Juegos se puedan hacer”, advirtió el alcalde de Barranquilla.
Además, aseguró: “Así que este espacio de tiempo de las próximas tres semanas son fundamentales para que antes que empiecen los Juegos en Santiago de Chile, tengamos todos los documentos y las obligaciones contractuales al día y que de esa manera Colombia, Barranquilla y el Caribe colombiano no queden por fuera y no sean, digamos, quitados los Juegos a Colombia y entregados a otro país”.
Juegos Panamericanos en Barranquilla: el presidente Gustavo Petro tiene la última palabra
Hace dos años, durante el mandato de Iván Duque, se anunció a más de 40 países de América que Colombia sería el anfitrión de los Juegos Panamericanos, que se realizarán en Barranquilla (Atlántico) entre el 22 de octubre y el 7 de noviembre de 2027.
Aunque todavía quedan cuatro años para esas justas deportivas, el panorama no está claro y Colombia podría incumplir el contrato que se firmó con la Organización Deportiva Panamericana (Panam Sports).
Lo previsto es que lleguen al país unos 9.000 atletas de 40 países para esas tres semanas de competencia que, además, albergará los Juegos Parapanamericanos. Sin embargo, desde el anuncio a la fecha han pasado diversas situaciones que han debilitado la economía mundial y el problema en este momento es conseguir los 400 millones de dólares para darle viabilidad al compromiso deportivo.
La ministra del Deporte, Astrid Rodríguez, reveló la cifra en un debate en la Cámara de Representantes y también dejó claro que se están buscando fuentes de financiación para obtener los recursos necesarios. De ese rubro el Gobierno nacional debe destinar el 70 % y el resto se divide entre la Alcaldía de Barranquilla y la Gobernación del Atlántico.
Según la ministra, el presidente Gustavo Petro tiene la voluntad de financiar los Juegos, pero la plata es el tema central y se deberá hacer un análisis de cuáles escenarios deportivos deberán repararse y cuáles construirlos. Rodríguez es sincera y dice que todo queda en manos del mandatario. “No tenemos un plazo. Hicimos un cronograma ajustado para las justas, pero el presidente Petro es el que toma la decisión”.
No obstante, algunos sectores consideran que el retraso del Gobierno en la destinación de recursos podría tratarse de un cálculo político por estar a pocos meses de elecciones y porque en 2027 Petro ya no estará en la Casa de Nariño.
El senador Mauricio Gómez Amín, del Partido Liberal, dijo a SEMANA que tiene información clara sobre la indecisión del presidente Petro en este asunto y que “un día dice que sí habrá Juegos y al otro día que no”.
Lo que le preocupa al congresista es que hay un compromiso de Estado y más allá de las sanciones económicas que podría conllevar el incumplimiento de contrato, Colombia podría ser castigada deportivamente y dejarla por fuera de competiciones internacionales por un tiempo. “Está en juego la seriedad del país porque conseguir la sede no fue nada fácil. Al Gobierno hay que recordarle que estos Juegos no son de los Char, no son de Elsa Noguera ni de nadie de la política. Son los Juegos de los colombianos y caribeños, así que esperamos que solucionen el problema”.
Gómez Amín se niega a creer que se le esté mezclando política a un asunto netamente deportivo, pero las versiones que apuntan hacia allá cada vez aumentan. En todo caso, el presidente Petro ha dicho en diferentes ocasiones que el turismo se debe incrementar, por lo que la vitrina de unos juegos internacionales son el mejor escenario para Colombia.
“La inversión que se hace se recuperará con creces. La imagen de Colombia ante el mundo será positiva, la infraestructura mejora y quedan los escenarios para los jóvenes y otras competiciones”.
La Alcaldía de Barranquilla, junto con la Gobernación del Atlántico, el Comité Olímpico y el Ministerio del Deporte vienen trabajando en la revisión del presupuesto de los Juegos. El presidente de Panam Sports estuvo en la ciudad y en julio se lograron ajustar varios ítems del presupuesto para mejorar las condiciones de los compromisos.