Política
Amenazas de muerte del Tren de Aragua a comerciantes desató fuerte choque entre el presidente Petro y María Fernanda Cabal; ¿qué pasó?
Cabal culpó al mandatario colombiano por poner a la ciudadanía a “merced de la criminalidad”.
Un fuerte roce se registró entre el presidente de la República, Gustavo Petro, y la senadora del Centro Democrático María Fernanda Cabal, choque que se desató por las amenazas de las que fueron víctimas comerciantes por parte del temido y criminal Tren de Aragua.
Petro y Cabal se sacaron chispas por medio de las redes sociales, la primera en lanzar un agudo sablazo fue la senadora, quien advirtió que las amenazas del Tren de Aragua es culpa de los gobiernos de izquierda como los del jefe de Estado y la alcaldesa Claudia López.
“Este es el claro resultado de gobiernos de izquierda como el de Petro y Claudia López en Bogotá. Los ciudadanos y comerciantes a merced de la criminalidad, que están celebrando el “cambio” porque los buscan no para ponerlos presos, sino para ofrecerles un millón por no matar. ¡Tenemos que recuperar la autoridad y el orden!”, trinó Cabal.
Este es el claro resultado de gobiernos de izquierda como el de Petro y Claudia López en Bogotá. Los ciudadanos y comerciantes a merced de la criminalidad, que están celebrando el "cambio" porque los buscan no para ponerlos presos, sino para ofrecerles un millón por no matar.… pic.twitter.com/a0B69MLE4k
— María Fernanda Cabal (@MariaFdaCabal) October 5, 2023
E inmediatamente le respondió el mandatario colombiano con otro sablazo: “Cuando se hace la investigación de estas bandas, terminan sus jefes vinculados a líderes políticos de las extremas derechas. La senadora podría investigar, para su control político, el caso de Pereira”.
Lo más leído
Cuando se hace la investigacion de estas bandas terminan sus jefes vinculados a líderes politicos de las extremas derechas. La senadora podría investigar para su control político, el caso de Pereira. https://t.co/aISH9Hztyp
— Gustavo Petro (@petrogustavo) October 5, 2023
El tema es delicado, ya que recientemente Fenalco Bogotá Cundinamarca denunció públicamente que los comerciantes de la capital del país han sido víctimas de extorsiones, las cuales han sido perpetradas por el grupo delincuencial Tren de Aragua.
En el llamado de atención a la sociedad y las autoridades del gremio de los comerciantes, se piden acciones ante la creciente amenaza a la seguridad y estabilidad de los comerciantes locales.
Sobre el tema, Juan Esteban Orrego, director de Fenalco Bogotá Cundinamarca, condenó enérgicamente estos actos de intimidación y se mostró con gran preocupación por la situación que están viviendo los comerciantes.
De igual manera, aseguró que, pese a tener el apoyo del Gaula de la Policía, dijo que es indispensable que las autoridades distritales, nacionales y la Fiscalía General de la Nación intervengan de manera efectiva para garantizar el libre ejercicio de las actividades comerciales, la protección de las vidas y el patrimonio de los comerciantes.
Del mismo modo, destacó el compromiso de la agremiación en no ceder ante la extorsión y resaltó que pagar estas exigencias es fomentar la criminalidad.
Ante tal situación, hizo un llamado urgente a los comerciantes a no caer en estas trampas y unirse en la lucha contra este tipo de actividades ilegales.
“Fenalco Bogotá Cundinamarca ha afirmado su disposición para colaborar activamente con las autoridades y estar a disposición de cualquier convocatoria que surja en este sentido. Además, están dispuestos a escuchar y apoyar las medidas que se adopten para abordar esta problemática. La colaboración entre el sector privado y las instituciones gubernamentales es crucial para salvaguardar la seguridad y el bienestar de los comerciantes y la comunidad en general”, agregó el gremio de los comerciantes.
Policía activó plan para capturar a alias Niño Guerrero, jefe del Tren Aragua, tras información que podría estar en Colombia
La fuga del jefe del Tren de Aragua de una cárcel ubicada en el estado de Aragua tiene con las alarmas encendidas a las autoridades colombianas por la posible llegada del temido criminal a Colombia, en donde la estructura ha cometido aterradores hechos delincuenciales.
El director de la Policía, el general Wiiliam Rene Salamanca, dijo que se activó un plan de búsqueda liderado por la Dirección de Investigación Criminal, Dijin, para capturar a alias Niño Guerrero si llega a pisar suelo colombiano.
De igual manera, indicó que se ha alertado a las unidades en las zonas de frontera para que estén alerta a la presencia del jefe máximo del Tren. Hay que recordar que la fuga de este delincuente se dio luego de que las autoridades de Venezuela intervinieran la cárcel de Tocorón, en el estado de Aragua, donde los presos vivían con comodidades y excentricidades como una piscina dentro del penal.
El lugar tenía zoológico, discoteca, banco, entre otros lujos para los detenidos. El Tren de Aragua es una estructura criminal que se ha extendido por diferentes países de Latinoamérica, en donde vienen actuando con extrema violencia.
Para el caso de Bogotá, hay evidencia de una alta injerencia de dicha estructura en localidades como Kennedy, desde donde sus cabecillas coordinaban varias acciones criminales. Más de una docena de cuerpos han sido encontrados en las calles de Bogotá desmembrados y en bolsas, generando una estela de miedo en la ciudad.
Al principio, las autoridades no entregaban mayor información sobre qué era lo que estaba pasando y quién estaba detrás de los macabros homicidios, solo después de un tiempo, mientras avanzaban las investigaciones, se supo que detrás de las muertes estaba el Tren de Aragua.
En la capital del país, viejos y destartalados hoteles ubicados en deprimidas zonas de la ciudad se convirtieron en lugares de tortura por parte de los integrantes de dicha estructura criminal. Por ejemplo, en la localidad de Kennedy, SEMANA se conoció el caso del denominado el Hotel Negro, en donde el Tren de Aragua se acomodó y utilizó las habitaciones como centros de tortura.
De acuerdo con los testigos, en el hotel secuestraban, torturaban, asesinaban y embolsaban a las víctimas, que luego sacaban en bicitaxis para lanzarlos como basura en cualquier esquina, generando temor entre los habitantes de la ciudad, que no sabían qué era lo que estaba sucediendo.