Aprobado en primer debate reducción salarial de congresistas en Colombia, ¿cuánto quedarían ganando?

La Comisión Primera del Senado retomó la discusión sobre la reducción salarial para los congresistas de Colombia con base en un proyecto de ley del senador Jota Pe Hernández.

Después de discutir la iniciativa durante un par de horas, los senadores de la comisión tomaron la decisión de aprobar la iniciativa que reduciría parcialmente el sueldo de los legisladores.

El senador de la Alianza Verde explicó que si se aprueba en su totalidad la iniciativa, el ingreso de los legisladores no podrá ser superior a los 25 salarios mínimos vigentes. Por ejemplo, si el proyecto de ley es aprobado, en 2024 la asignación será de 31 millones, pero si hunde el pago mensual será de 42 millones.

Por esa razón hizo un llamado a todos sus colegas para que apoyen la iniciativa en los debates restantes y contó que “vamos a eliminar la prima especial de servicios que ahora es de 12 millones y vamos a fijar la asignación de salario y gastos de representación en 25 salarios mínimos”.

El proyecto de ley de Jota Pe Hernández también impactaría los salarios de los altos funcionarios del Estado pero se argumenta que se ha intentado hacer esta reducción en 23 ocasiones por lo que ya es hora de materializar su proyecto de ley.

Según los cálculos del congresista si se aprueba su iniciativa, el país podría ahorrarse anualmente unos nueve mil millones de pesos por lo que considera que la discusión debe darse de fondo y sin dilatarla.

Sin embargo, ahora el articulado pasará a la plenaria del Senado donde tendrá su segundo debate y se desconoce si tendrá un respaldo mayoritario. En varias ocasiones este tipo de proyectos avanzan en primer debate, pero después por una u otra razón va quedando en el olvido.

El salario de los Congresistas, de acuerdo con lo establecido en la Ley 4 de 1992, está conformado por una asignación que corresponde a un sueldo básico, los gastos de representación y una prima de localización, vivienda y transporte, actualmente prima de servicios.

La suma de estos tres componentes para 2023 es de 37.880.419 pesos, donde la asignación básica es de 9.159.143 pesos, los gastos de representación de 16.282.926 pesos y la prima especial de servicios de 12.438.350.

Si se aprueba el proyecto, los congresistas dejarían entonces de devengar esos 12.438.350 pesos, correspondientes a la prima de servicios.

“Este proyecto busca cerrar brechas sociales y recuperar la confianza ciudadana, desde Cambio Radical hemos respaldado iniciativas como la disminución del receso legislativo y vamos acompañar todos los proyectos de ley y reformas constitucionales que busquen sintonizar al Congreso con la ciudadanía”, aseguró el senador Carlos Fernando Motoa de Cambio Radical.

No obstante, como ocurre siempre con este tipo de proyecto, hay dos obstáculos. El primero es la duda jurídica sobre si el Congreso puede eliminarse a sí mismo esta prima especial o si debe ser el Gobierno el que debe hacerlo, pues al fin y al cabo fue el Ejecutivo el que la impuso en 2013.

El otro elemento a tener en cuenta es el de los tiempos. La iniciativa debe superar cuatro debates en apenas ocho semanas que quedan del periodo ordinario de sesiones y tiene por delante otros proyectos clave como el Plan de Desarrollo, la ley de sometimiento a la justicia, la ley de humanización y, si llegan a avanzar, las reformas laboral y de salud.

Si hay algo que quedó muy bien amarrado en Colombia desde la misma Constitución Política fue el salario de los congresistas. El aumento anual es una obligación que establece el artículo 187 de la carta política.

“La asignación de los miembros del Congreso se reajustará cada año en proporción igual al promedio ponderado de los cambios ocurridos en la remuneración de los servidores de la administración central, según certificación que para el efecto expida el Contralor General de la República”, dice el artículo 187 de la Constitución.

Esa fórmula, hasta ahora, más de 30 años después, no se ha logrado cambiar, en buena medida porque la solución, aunque parezca absurdo, está en manos de los propios congresistas, quienes han creado todo tipo de jugaditas para hundir las reformas.