Citan a debate de control político a miembros del Gobierno por amenazas del ELN en contra del fiscal, Cabal y el general Zapateiro

La información revelada por SEMANA en las últimas horas que evidencian que el comandante del Ejército, el general Luis Mauricio Ospina, conocía desde hace dos meses las amenazas en contra de la senadora María Fernanda Cabal, el fiscal general Francisco Barbosa y el general (r) Eduardo Zapateiro ya levantó polémica en el Congreso.

El representante a la Cámara, Óscar Villamizar, del Centro Democrático, citó a debate de control político al ministro de Defensa, Iván Velásquez y al alto comisionado de Paz, Danilo Rueda, a que den las explicaciones correspondientes sobre estos hechos en el Capitolio Nacional.

¡Urgente! Ante las graves denuncias, hechas por la revista SEMANA, sobre el ocultamiento del plan criminal del ELN para asesinar al Fiscal General Francisco Barbosa, la senadora María Fernanda Cabal y el general en retiro Eduardo Zapateiro, solicito que se cite al ministro de defensa, al alto comisionado para la Paz y al comandante del Ejército, para que respondan sobre estas acusaciones”, aseguró el congresista.

Villamizar compartió la solicitud que le hizo a la presidencia de la Cámara de Representantes, a cargo del congresista Andrés Calle, para que sea citado el debate en el que deberán responder los dos altos funcionarios del Gobierno.

Asimismo, pidió que se cite por información al general Luis Mauricio Ospina, comandante del Ejército Nacional, para que explique por qué ocultó esta información durante determinado tiempo y las demás preguntas que se relacionen sobre el caso.

“Explique las circunstancias de tiempo, modo y lugar donde se les informó sobre el plan de asesinato de Eduardo Zapateiro, María Fernanda Cabal y Francisco Barbosa a manos del grupo criminal y terrorista ELN”, es una de las preguntas que deberán responder los funcionarios en el Congreso.

La segunda es que expliquen el procedimiento seguido a la neutralización del plan criminal del ELN y la protección de la vida de los tres líderes, así como su integridad y la de sus familias.

“Responda de forma pormenorizada la razón para negar públicamente que el grupo criminal ELN era el responsable del plan de homicidio”, cuestionó Villamizar.

El congresista también quiere saber qué medidas se han tomado al interior de la mesa de negociación con el ELN en el momento en que se conoció del plan criminal en el que se pretendía asesinar a los implicados. Además del protocolo que se está siguiendo para informar a posibles víctimas cuando se sabe de un plan de este tipo a mano de un grupo criminal que pueda afectar la integridad y vida de los involucrados.

Por ahora falta que la solicitud sea tenida en cuenta por Calle y próximamente sea citado el debate de control político en la Cámara de Representantes para conocer las explicaciones del caso.

El reclamo surge luego de que SEMANA revelara que el general Ospina tenía pleno conocimiento de los hechos, pero no lo había informado a las víctimas. Tres fuentes distintas, en inteligencia militar, el CTI de la Fiscalía y la policía judicial que apoya la Dirección Especializada de Organizaciones Criminales, confirmaron la grave información del plan criminal en marcha. Todo se ordenó en una reunión de cinco altos mandos del ELN en Venezuela. El encargado de la operación macabra fue ‘el Rolo’, con el apoyo de Jaime Galvis, alias ‘Ariel’, y ‘Gonzalo Satélite’.

La propia UIAF detectó el movimiento sospechoso de 3.000 millones de pesos destinados a ejecutar el ataque terrorista. El informe fue puesto en conocimiento del Ejército y este fue engavetado. La Fiscalía le solicitó al Ejército que le enviara toda la información sobre el plan terrorista, pero la institución no lo hizo.

Fue solo hasta que la Fiscalía confirmó la información que el ministro de Defensa, Iván Velásquez convocó a una reunión el pasado miércoles. Allí le reclamaron al general que se hubiera guardado lo que conocía durante este tiempo. Una de las razones habría sido para proteger las negociaciones que se adelantan con esa guerrilla y el Gobierno.