Claudia López volvió a salir en defensa de Petro, como cuando votó por él, y después de meses de atacarlo. ¿Qué hay detrás?

La exalcaldesa de Bogotá Claudia López no deja de sorprender con sus repentinos cambios en la política. A pesar de que durante varios meses la exmandataria distrital cuestionó abierta y públicamente al presidente Gustavo Petro, ahora salió a defender al jefe de Estado luego de que el Consejo Nacional Electoral (CNE) decidiera formular cargos y abrir investigación a la campaña presidencial de Petro por la presunta violación de topes electorales.

Aunque el Consejo de Estado ha dejado claro que el CNE sí tiene la facultad para investigar la campaña presidencial de Petro, la exalcaldesa López cuestionó la decisión del tribunal electoral y ahora salió a defender al primer mandatario.

“El CNE no puede investigar y mucho menos formularle cargos al presidente de la República. Hacerlo es una extralimitación de funciones de un organismo político y politizado. El presidente debe defenderse en derecho”, dijo la exalcaldesa de Bogotá en X, el pasado martes 8 de octubre.

Y agregó: “Hay un país que necesita seguridad, empleo, agua, energía, estabilidad y dirección. Los colombianos que viven el agobio diario de las dificultades no pueden, además, vivir en la zozobra de las peleas intestinas de los políticos y sus ambiciones, sus grandilocuencias para sus respectivas galerías, mientras el país de verdad, el de la gente, se desbarata”.

Así mismo, en un mensaje que podría interpretarse que va dirigido a los magistrados del CNE, y en defensa del presidente Petro, López enfatizó: “¡Respeten a la gente! Trabajen y dejen trabajar”.

Lo que llama la atención es que Claudia López ahora salga en defensa del presidente Petro cuando lo único que hizo, tanto en los últimos meses de su mandato, como en los primeros meses después de salir de la Alcaldía de Bogotá, fue cuestionar y criticar al presidente a tal punto de llamarlo “caudillito de pueblo”, incluso, de tildarlo de querer sabotear a la capital del país.

Y esos cuestionamientos y críticas a Petro las hizo Claudia López a pesar de que ella misma votó y ayudó a elegir al hoy jefe de Estado en las pasadas elecciones presidenciales. Incluso, en una entrevista con SEMANA, López indicó que volvería a votar por él.

“Yo me siento contenta, no solo me siento bien. Yo voté por el presidente Petro, yo creo en el cambio que él representa. A mí me ilusiona esta época de cambios. Sé que los cambios generan un poquito de inestabilidad y temor, y hay un poquito de incertidumbre, carajo, pero al fin ganamos”, dijo López en su momento, quien después agregó: “Volvería a votar por Petro, sin duda”.

No obstante, con el pasar de los meses, López, como ya es costumbre, cambió de parecer y empezó a cuestionar al presidente Petro y a ese “cambio” que —según ella— le ilusionaba.

Estando aún en la Alcaldía, criticó a Petro por querer parar la primera línea del Metro y por oponerse a la ampliación de la avenida Boyacá en terrenos que, en la actualidad, pertenecen a la Reserva Forestal Thomas van der Hammen.

“Esa manía maldita de creerse, pues, el Mesías, el único que sabe, el que llega a hacer las cosas destruyendo y desconociendo todo lo anterior, lo único que nos produce es parálisis, saboteo, pérdidas de los recursos de los bogotanos”, le cuestionaba López a Petro.

Ya fuera del Palacio de Liévano, López endureció sus críticas a Petro y su gobierno del cambio. Uno de los cuestionamientos vino cuando el Gobierno nacional presentó la nueva reforma a la salud y cuando intervino a la EPS Sanitas. En su momento, López dijo que Petro estaba concretando una “venganza ideológica”, al mismo tiempo que advirtió que el presidente estaba en su “campaña reeleccionista”.

López afirmó que los funcionarios del Gobierno son una “sarta de irresponsables” y pidió al Congreso hundir la reforma a la salud.

Así mismo, López también cuestionó cuando el Gobierno presentó una nueva reforma tributaria. “No hay derecho a que, en este mar de corrupción y desgobierno, el presidente pretenda clavar más a la clase media y trabajadora con más impuestos. El Gobierno debe dejar las cuentas alegres, parar la corrupción y el desgobierno, y ejecutar bien y transparentemente los recursos que ya tiene”, decía.

De igual modo, como era de esperarse, López también cuestionó al Gobierno en medio del escándalo de la UNGRD y le respondió a Petro por los señalamientos que hizo el presidente a la exalcaldesa por el racionamiento de agua en Bogotá.

“Si en vez de mentir y tuitear gobernara, y si la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo no hubiera estado dedicada a la corrupción de carrotanques y a robarse los recursos de prevención y la atención de emergencias, el país y la región no estarían abocadas al racionamiento tanto de agua como de energía”, le respondía López.

¿Por qué ahora defiende al presidente Petro?

Lo contradictorio, aunque para nada sorpresivo en Claudia López, es que ahora la exalcaldesa esté defendiendo al presidente Petro, después de la férrea crítica que le hizo durante meses al primer mandatario.

Con su actuar de los últimos días, ha quedado en evidencia que ahora la estrategia de López, quien muy seguramente está pensando en las elecciones presidenciales de 2026, es ablandar su crítica hacia el jefe de Estado, pues los cuestionamientos no le han dado réditos en las encuestas.

Así mismo, López, paradójicamente, ahora está cuestionando al alcalde Carlos Fernando Galán por la inseguridad de la ciudad, a pesar de que fue ella, con su gobierno, la que deterioró la seguridad en la ciudad.

López tiene claro que va a necesitar los votos de la izquierda y la centroizquierda en sus intenciones de querer llegar a la Presidencia de la República y, por ello, ahora no va a enfilar sus críticas al presidente Petro.

Incluso, como lo ha puesto sobre la mesa la senadora del Centro Democrático María Fernanda Cabal, no sería descabellado en pensar que Claudia López puede ser la candidata del presidente Gustavo Petro en las elecciones de 2026. De hecho, Petro ha insistido en que el gobierno del cambio necesita más de cuatro años. Ese mismo ‘cambio’ por el que López se ilusionaba.