Política

“Colombia metió a Cuba en este lío”: Luis Gilberto Murillo explica por qué Cuba debería salir de la lista de países que patrocinan el terrorismo

Sin embargo, aclaró que esa una decisión autónoma de Estados Unidos y que sencillamente el Gobierno colombiano está expresando su opinión.

4 de octubre de 2022
Luis Gilberto Murillo
El embajador de Colombia en Estados Unidos, Luis Gilberto Murillo. | Foto: Alejandro Acosta

El presidente de la República, Gustavo Petro, habría tenido su primera diferencia con Estados Unidos, situación que se dio por la inclusión de Cuba en la lista de países promotores del terrorismo. El mandatario del Pacto Histórico insistió que esa situación con la isla es injusta, al argumentar que ha aportado a los procesos de paz en Colombia.

Petro en su discurso, al término del encuentro de alto nivel con el secretario de Estado de EE. UU., Antony Blinken, el cual duró más de tres horas en la Casa de Nariño, aseguró que en el gobierno del expresidente estadounidense Barack Obama hubo una veeduría del proceso de paz con la extinta guerrilla de las Farc en Cuba.

El secretario Blinken manifestó, a su turno, que se mantendrá en esa categoría a la isla de países promotores del terrorismo por ahora y no fue claro en señalar cuándo podría cambiar esa situación con Cuba.

En medio de todo este panorama, el embajador de Colombia en Estados Unidos, Luis Gilberto Murillo, aclaró que el presidente Gustavo Petro dio su opinión y que no hubo roce alguno con Estados Unidos. Eso sí, aclaró que es una postura del Gobierno colombiano que no cambiará.

“El presidente Petro dio su opinión sobre lo que ocurrió con Cuba, había que hacerlo. Es que realmente Colombia metió a Cuba en este lío porque fue una solicitud de Colombia como Estado para que acompañara como garante los procesos de paz, hubo cambio de administraciones, hubo cambios ideológicos y terminaron en esa lista”, afirmó Murillo.

El embajador hace referencia a los diálogos que se adelantaron con las Farc y a la petición de recibir a la delegación del ELN cuando fue expulsada de Ecuador para poder seguir con las conversaciones en la isla.

Sin embargo, aclaró que Estados Unidos tomará una decisión autónoma y que Colombia espera que sea en el sentido de su postura, eso sí, aclaró que no es una solicitud formal de parte del presidente Petro.

Sin embargo, hace varios días y tal como lo anticipó SEMANA, 80 congresistas de partidos progresistas, especialmente del Pacto Histórico, enviaron una carta al Gobierno de Estados Unidos para solicitar que se retire a Cuba de la lista de países patrocinadores del terrorismo.

MIGUEL DÍAZ-CANELPresidente de Cuba
MIGUEL DÍAZ-CANELPresidente de Cuba

El documento de tres páginas expresa que uno de los pilares del gobierno del presidente Gustavo Petro es la consolidación de la paz total para Colombia.

“En ese sentido, vemos con preocupación que un país que ha sido garante de los acuerdos de paz en Colombia durante años haya sido denominado país patrocinador del terrorismo por el Gobierno de Estados Unidos. Los argumentos que se usaron para dicha designación no se sostienen y así lo ha reiterado el actual Gobierno de Colombia”, se lee en el oficio.

Añadieron que “Cuba ha demostrado ser un Estado amigo del pueblo colombiano, a través de su respaldo a la construcción de paz en nuestro país y en diversos campos del desarrollo social como el de la salud y la educación”.

Dejaron claro que el presidente de Cuba, Miguel Díaz Canel, ha ratificado la voluntad para continuar trabajando por la paz, a tal fin que ofreció a su país como sede alterna de las conversaciones del proceso de paz con el ELN aportando además su experiencia como garante del acuerdo celebrado entre la guerrilla de las Farc y el gobierno de Juan Manuel Santos.

“La inclusión de Cuba en la lista de países patrocinadores del terrorismo internacional ha derivado en la clausura de cualquier posibilidad de financiamiento en el mercado mundial, acrecentando las carencias y dificultades de acceso de la sociedad cubana a recursos básicos”, concluyeron.

Añadieron que formar parte de la lista negra de Estados Unidos “es un injusto señalamiento que no solo atenta contra los derechos humanos del pueblo cubano, sino que amenaza, al mismo tiempo, las aspiraciones de paz en nuestro país”.