POLÍTICA
¿Congresistas desde los 18 años? Esto es lo que propone un proyecto de ley radicado en el Congreso
Según el Dane, el 48 % de los jóvenes no está de acuerdo con la forma en que funciona la democracia.
A pesar de que los jóvenes representan el segmento poblacional que más ha salido a las calles en los últimos años para pedir mejores condiciones de vida, su participación en las instancias políticas de decisión aún es muy baja. Actualmente ellos representan cerca del 25 % de la población del país, pero la representación de menores de 30 años en el Congreso es inferior al 15 %.
Actualmente, la Constitución señala que entre los requisitos para ser congresista está el límite de edad. Para los representantes a la Cámara es a partir de los 25 años y para los senadores desde los 30 años.
Con esta iniciativa se baja este requisito a 25 años en el caso del Senado y para ser representante a la Cámara únicamente se exigirá “ser ciudadano en ejercicio”, es decir, desde los 18 años, que es cuando el ciudadano adquiere la plenitud de derechos y deberes.
“El fundamento de eliminar el requisito de edad para el acceso a los cargos de elección popular en Colombia es que en la actualidad representan una barrera para la participación política de los jóvenes. Esta barrera no solo resulta innecesaria, debido a que se fundamenta en razones que ya no corresponden a las realidades del país, sino que también limitan el ejercicio político dentro de un sistema democrático participativo”, indica la argumentación de la iniciativa.
La propuesta ha generado posiciones encontradas. Por un lado, hay quienes consideran que para ser congresista es necesaria una preparación académica y profesional en determinados campos con una experiencia de varios años, por lo que no consideran conveniente que quienes lleguen al Legislativo sean personas que apenas estén comenzando la vida adulta.
“Ese acto de representar requiere madurez. Yo he visto a congresistas recién llegados, son ignorantes porque no saben, ignorantes porque no aprenden. Creo que quien va a legislar debe tener determinadas condiciones. En efectos de la democracia, la propuesta hace daño”, explicó el exrepresentante Germán Navas Talero, quien estuvo más de 20 años en el Congreso.
Así mismo, asegura que los primeros dos años los parlamentarios jóvenes generalmente llegan a aprender, y que legislar para un país requiere madurez y conocimientos. Critica la idea porque considera que podría ser un “exceso de democracia” en el que una persona sin preparación pueda llegar a reformar la Constitución.
Sin embargo, hay otras voces que, por el contrario, consideran que esto podría contribuir a solucionar la crisis que se vive en el país actualmente por el paro, en la que los jóvenes reclaman más oportunidades y mayor representación.
Una de las que está a favor de esta iniciativa es la representante Katherine Miranda, quien considera que si los jóvenes ya pagan impuestos y pueden elegir a sus representantes, también deberían tener la opción de participar en elecciones populares.
Esta no es una propuesta nueva, la alcaldesa de Bogotá Claudia López planteó lo mismo durante el reciente paro nacional, aunque ella fue más drástica, pues buscaba que el requisito para ser congresistas fuera partir de los 18 años sin importar si es Cámara o Senado.
En todo caso, esta iniciativa, por tratarse de una reforma constitucional, tendrá un duro camino en el Congreso, pues debe superar 8 debates, cuatro de los cuales deben darse antes del 16 de diciembre, cuando finalizan las sesiones ordinarias del Legislativo.
Y, por ahora, las prioridades del Congreso estarán concentradas en la reforma tributaria que acaba de radicar el Gobierno, la ley de presupuesto, la reforma política y la reforma rural integral.