POLÍTICA
Congresistas piden que presidentes de Senado y Cámara, Iván Name y Andrés Calle, se aparten de esa dignidad por escándalo en UNGRD
Un grupo de parlamentarios solicitó a través de una carta que den un paso al costado mientras se define lo que sucedió en ese entramado.
A través de una carta liderada por la congresista Jennifer Pedraza, un grupo de congresistas solicitó que los presidentes del Congreso, Iván Name del Senado y Andrés Calle, de la Cámara de Representantes, renuncien a esa dignidad por estar salpicados por el escándalo de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo y Desastres (UNGRD).
“El Congreso de la República debe responderle al país ante las denuncias de presunta corrupción con los recursos del agua y la alimentación de La Guajira. De lo contrario continuaremos con la mayor desfavorabilidad de todas las instituciones públicas ante los ojos de la ciudadanía”, aseguraron.
Y agregaron: “Colegas, que ustedes gocen de presunción de inocencia y que tengan el derecho a defenderse en el marco del debido proceso no le resta al deber superior de defender la democracia y la institucionalidad del Congreso de la República. Este propósito supremo no puede garantizarse si permanecen en la presidencia del Senado y la Cámara de Representantes, por lo que les exigimos su renuncia inmediata a las mayores dignidades de estas corporaciones”.
Piden que se pueda aclarar su situación jurídica mientras están en el Congreso con independencia y sin interferencias mientras se adelantan las funciones de control político y judiciales necesarias para esclarecer los hechos de corrupción en la UNGRD en La Guajira. “Más que quienes firmamos esta carta, es la ciudadanía quien le demanda al Congreso estar a la altura de la lucha contra la corrupción”, afirmó.
La solicitud está firmada, además de Pedraza, por los representantes Christian Avendaño, Catherine Juvinao, Alexandra Vásquez y Andrés Cancimance.
En las últimas horas varios congresistas habían reclamado en la plenaria de la Cámara de Representantes que Calle saliera de su cargo. Una de las más críticas fue la congresista Pedraza.
“El representante Calle debería renunciar a la Presidencia de la Cámara de Representantes. Nunca he estado más orgullosa de votar en blanco en esta elección de Presidencia porque yo sabía quién era Andrés Calle, quien absolvió olímpicamente a Néstor Humberto Martínez siendo parte de la Comisión de Acusaciones. Ahora está implicado y presuntamente recibió dineros para aprobar las reformas del Gobierno”, aseguró la congresista de Dignidad.
El representante a la Cámara José Jaime Uscátegui presentó una proposición para que se aplazara el debate de los proyectos de ley del Gobierno hasta que no se aclare lo que ha sucedido en medio del escándalo de la UNRGD.
En las últimas horas la Corte Suprema de Justicia anunció que indagará tanto a Name como a Calle por estos señalamientos. Esto, luego de las declaraciones hechas por el exsubdirector de la UNGRD Sneyder Pinilla entregadas a SEMANA en las que habló de varios de los implicados, entre ellos los presidentes del Congreso.
Según dijo, se le entregaron 4.000 millones de pesos en efectivo. En el caso de Name habría sido 3.000 a través de la exconsejera para las regiones Sandra Ortiz quien Pinilla se refirió como “la mensajera”. Por su parte, en el caso de Calle, Pinilla dijo que fue él personalmente quien le entregó 1.000 millones de pesos en su apartamento en Montería. Sobre esto, el exfuncionario de la UNGRD presentó chats que evidenciarían lo que dice.
El presidente de la Cámara hasta el momento no ha respondido estas acusaciones. En el caso de Name dio una explicación en la plenaria del Senado en la que negó cualquier responsabilidad.
“No recibí dineros ilícitos. Mi proceder es democrático. Es contraevidente decir que los recibí a cambio de favorecer unas reformas a las que me opuse”, dijo Name. Y agregó: “Declaramos no compartir y no apoyar la reforma pensional. Pero eso no nos podía convertir en unos saboteadores porque eso no lo merecían la nación, la patria y el Congreso. Un día levanté la sesión en señal de discrepancia de la actitud señalada del presidente contra el Congreso. Nunca he sido un saboteador”.